14 sitios a los que el apocalipsis no llegará.
La humanidad ha conseguido sobrevivir tanto a la crisis financiera como al pánico al Apocalipsis Maya y la pandemia de la covid-19. Sin embargo, si el mundo empezara a colapsarse, es mejor saber de antemano dónde puedes esconderte para sobrevivir.
Hemos seleccionado algunos lugares que esperamos que continúen siendo una fortaleza para la estabilidad, la seguridad y la prosperidad sin importar todo lo que pase en el mundo.
Islandia
Islandia es con diferencia el país más aislado de Europa, situado a cientos de kilómetros de cualquier lugar, lo que hace que sea difícil su acceso para cualquier posible invasor. El país está también repleto de recursos útiles para vivir. Se abastece casi por completo de energía geotérmica procedente de los muchos volcanes en activo que hay en el país, y sus costas contienen algunos de los mejores y más abundantes pescados y mariscos de todo el mundo. De manera que en el caso de tener que escapar a la isla durante mucho tiempo, podemos confiar en que estaremos calientes y bien alimentados. Islandia también ha sobrevivido a prácticamente el colapso total de su sistema bancario durante la crisis financiera, así que sabemos que sus ciudadanos son bastante fuertes, algo esencial si llega el fin del mundo.
Tristan da Cunha
Esta cadena de islas del sur del Atlántico es realmente el archipiélago habitado más remoto del mundo, a más de 2.000 km del país más cercano. Su población está justo por encima de los 300 habitantes, por lo que estamos seguros de que buscan nuevos residentes. Se la conoce por su excelente pesca – la carrera perfecta si los tiempos vinieran realmente malos.
Guam
Este es un lugar para patriotas americanos, quienes se pueden refugiar en este enclave perdido de América. Guam está situado en el Pacífico y alberga una enorme presencia militar americana, perfecta para mantener a la gente a salvo en caso de que las relaciones ruso-turcas vayan cuesta abajo y nos encontremos en medio de la Tercera Guerra Mundial. Guam no tiene exactamente una economía boyante, pero sus ingresos proceden sobre todo del turismo y del gobierno de los EE. UU.
Chiang Mai
Todo lo que hay que saber es que esta idílica ciudad del norte de Tailandia es donde el inversor suizo Marc Faber construyó su hogar. Faber es conocido por su increíble pesimismo sobre el estado del mundo. Está constantemente lanzando advertencias sobre dónde vivir si llega la guerra (una granja en el campo) y lo que le ocurrirá al dólar (valdrá menos que el papel higiénico). Además de todo esto, aunque el Sudeste Asiático ha sido un hervidero de guerras, heroína y turbulencias políticas durante décadas, Chiang Mai ha continuado siendo un baluarte de paz y estabilidad. Es un buen signo de que podría sobrevivir sin importar lo que nos depare la historia al resto.
Dénver
Dénver tiene ciertas ventajas como su proximidad a increíbles reservas de esquistos bituminosos, lo que significa que siempre habrá combustible. En caso de guerra, es la ciudad más fácil de defender en los EE. UU. puesto que se encuentra a más de 1 km y medio por encima del nivel del mar (y no cerca del mar) y rodeada de montañas. Su elevación también hace que sea un excelente lugar en el cual refugiarse en caso de calentamiento global. De hecho, el calentamiento global debería ayudar a que la tierra de cultivo que rodea a Dénver sea increíblemente fértil.
La Antártida
La Antártida es probablemente uno de los lugares más inhóspitos del mundo, y por ello es un enclave perfecto para esconderse si llega el fin del mundo. Si consigues llegar allí con la suficiente comida para sobrevivir al frío invierno, puedes instalarte en una de las cabañas de expedición y agacharte hasta que las cosas mejoren. Es bastante improbable que la guerra alcance el lugar más meridional del mundo. La única pega es que si los niveles del mar suben debido al cambio climático, podrías acabar como este pingüino.
Puncak Jaya
Esta región montañosa de Indonesia no parece un lugar muy acogedor para vivir. Pero en ese caso, recuerda que en un momento así no estás buscando precisamente comodidad. Buscas sobrevivir. Y resulta que la mayor mina de oro del mundo está en Puncak Jaya, lo que supone que podría haber muchísimo trabajo y comercio si juegas bien tus cartas. También alberga la tercera mina de cobre más grande de la tierra.
Ciudad del Cabo
Si estás en tierras africanas, no hay nada mejor que Ciudad del Cabo. Con sus preciosas vistas y puertos, la ciudad es con razón la segunda más poblada de Sudáfrica. Aunque todo fuera terriblemente mal, Ciudad del Cabo continuaría existiendo como si no hubiera ocurrido nada. La situación económica de Ciudad del Cabo no tiene nada que ver con la de sus ciudades hermanas del norte, gracias en parte a la ubicación de Sudáfrica. También está relativamente exenta de la influencia extranjera occidental
Bern
Suiza se ha constituido sin duda como un paraíso en el sangriento pasado de Europa. Bern cuenta alrededor con los Alpes Suizos, los que le confieren protección natural, y la capital suiza es probablemente el mejor lugar para esconderse en Europa gracias a sus cerebros diplomáticos. Suiza es conocida por haber permanecido neutral en todos los grandes conflictos de los siglos pasados, y esta neutralidad hace de Bern un lugar estupendo al cual escapar durante una Tercera Guerra Mundial. La tierra de cultivo suiza ya es de las más fértiles que hay cerca, y esto será una gran ventaja si el cambio climático llega a tocarnos de cerca. Se cree que el nombre de Bern, muy oportuno, viene del plural alemán de oso, «Bären». Incluso ha mantenido tradicionalmente durante 500 años fosos de osos vivos y actualmente tiene un parque de osos más humano.
Necker Island
Esta es la isla que el magnate Richard Branson, de Virgin, posee. Si llegas a contactar con él estamos seguros de que te permitirá vivir allí cuando el mundo se venga abajo. Después de todo, siempre ha parecido un tipo bastante agradable.
Tierra del Fuego
Los patrones del viento hacen de esta región de Sudamérica el lugar perfecto para evitar efectos nucleares. De nuevo existe un extremado beneficio. Nadie se preocupará por invadir Tierra del Fuego.
Yukón
El Yukón es el más occidental de los territorios federales de Canadá. Está escasamente poblado y actualmente su economía depende en gran medida del gobierno y el turismo. Pero dejando esto de lado, la zona es realmente capaz de mantener comunidades pequeñas y prósperas. Hay una gran vida salvaje para la caza y el trampeo, lo que sería importante durante los primeros años siguientes a una catástrofe mundial, cuando la agricultura no sea una opción muy viable. A medida que la civilización se reconstruya a sí misma, los yacimientos de metales raros de la zona serán una ayuda. La existencia de muchos ríos significa que se puede llegar con facilidad. El clima es duro, especialmente en invierno. De manera que tráete un buen abrigo. Y si estás solo en medio de la vida salvaje, tendrás que tener especial cuidado con los osos.
Kansas City
No importa lo que pase en EE. UU., Kansas City probablemente estará a salvo. No está en ninguna costa de manera que no hay que preocuparse demasiado de la seguridad, de una invasión extranjera ni de las subidas del nivel del mar. Está rodeada de gran cantidad de tierra de cultivo (buena para cultivar cereal y para el ganado), y también se encuentra en la intersección de varias líneas de ferrocarril, de manera que el transporte no debería ser un problema aunque las cosas vayan muy mal – de hecho, la ciudad debería prosperar como núcleo de actividad.
Isla de Lewis
Situada en el norte del océano Atlántico, como mínimo a tres horas en barco desde Escocia continental, la Isla de Lewis tiene una ubicación ideal que evita cualquier guerra o Apocalipsis zombie. También hay que tener en cuenta que ¡nadie ha podido invadir con éxito ningún lugar en Reino Unido durante 950 años! La isla cuenta también con innumerables recursos naturales, buena comida y todo el whisky que quieras, lo que hace de Lewis un lugar perfecto para esconderse en el fin del mundo.