Debido a las mejoras en la tecnología y a los cambios en los entornos de trabajo, está demostrado que puedes ser mucho más productivo en tu trabajo mientras estás alejado de la oficina.
¿Cómo es esto posible? Simplemente debes mantenerte productivo mientras estás de viaje, porque ¿cuáles son tus otras opciones? ¿Dejar de viajar y ver cómo todo tu negocio se queda atrás? No, eso sería inaceptable.
A continuación te presentamos cinco técnicas que pueden ayudarte a mantener la productividad mientras estás de viaje.
1. Acepta el poder de tu teléfono
Es cierto que mucha gente recomienda que te alejes del teléfono todo lo que te sea posible debido a que hacer una desintoxicación digital es saludable, sin embargo, debes aceptar lo importante que es tu teléfono inteligente para agilizar tu trabajo y mantenerte conectado a través de las zonas horarias cuando estás de viaje. Un estudio de Salesforce incluso ha descubierto que el 86% de los 1.400 ejecutivos y empleados corporativos encuestados afirma que la comunicación ineficaz es una de las principales causas de problemas en el trabajo.
Si haces negocios internacionales, WhatsApp es esencial para comunicarte con tus clientes y socios de una forma rápida y eficiente. Los correos electrónicos siempre formarán parte del negocio, sin embargo, tener la posibilidad de enviar un mensaje de WhatsApp a un cliente diciendo: "Oye, nos gustaría saber tu opinión en este aspecto" o "Estoy viendo este problema", ofrece el tipo de conectividad inmediata que no se puede encontrar en ningún otro lugar. Organiza tu teléfono como lo harías con cualquier otra parte de tu negocio, y no lo veas solo como una distracción. Serás mucho más productivo a largo plazo.
2. Articula tu visión
Uno de los mayores desafíos cuando se trata de ser un líder, especialmente uno que está viajando de forma constante, es articular una visión consistente a tu equipo. Nunca tengas miedo de confiar en tus empleados para mantener todo en movimiento.
Una de las cosas que debes aprender es a no asumir nunca que la gente sabe lo que tienes en la cabeza, y en su lugar ser muy claro sobre cuáles son tus expectativas desde el principio. Cuando no lo haces, la gente empieza a desviarse. Es entonces cuando las cosas se pueden complicar en los momentos en los que te ausentas de la oficina durante días o semanas.
Además, asegúrate de tener un fuerte liderazgo en tu ausencia. Confía en que esa gente va a aplicar tu visión y lo que pongas delante de ellos. ¡La confianza se pierde, no se gana! Asegúrate de no dejar un bucle de retroalimentación abierto que dé lugar a que dos proyectos se queden a medio terminar meses después. La comunicación lo es todo en la vida y en los negocios. Por último, forma a tu equipo para tomar decisiones, y mantente cercano para ayudarles a aprender y mejorar en el camino.
3. Empieza pronto
Viajar, especialmente cuando se está en el extranjero, es agotador. No permitas que esto te frene cuando necesites estar al tanto de lo que sucede en tu empresa. Levántate a primera hora de la mañana, haz ejercicio y luego, mientras desayunas, empieza a ponerte al día en todo. Cuando viajas, al final del día suele aparecer una profunda fatiga mental. A veces te encuentras en una zona horaria diferente, por lo que es posible que tengas que hacer frente a asuntos importantes a horas intempestivas. En estos casos, a menudo resulta difícil estar totalmente comprometido.
Si adoptas el hábito de marcarte objetivos y resultados por las mañanas, ganarás un montón de tiempo valioso.
4. Aprovecha tu tiempo de inactividad
Aprovechar al máximo el tiempo de inactividad es realmente valioso... ya sea 20 minutos en un taxi o una hora en tu habitación de hotel. El profesor y escritor de la Universidad de Georgetown, Cal Newport, tiene una teoría de "trabajo profundo", donde la máxima productividad se reduce al tiempo de trabajo multiplicado por la intensidad de la concentración.
Aprovecha tu tiempo libre para ponerte al día con los correos electrónicos o hacer llamadas importantes; estas son las ventanas en las que puedes "recuperar" momentos perdidos durante el viaje. Si intentas hacer todo a la vez y superas los límites de la multitarea, acabarás totalmente agotado.
5. El agua es tu amiga
Una de las mejores formas de hacerle frente al jet-lag es mantenerte hidratado. Deja de beber alcohol en los vuelos largos y bebe agua en su lugar. Tal vez parezca tonto, pero al final acabarás sintiéndote diez veces mejor cuando llegues a tu destino.
Una vez abandonas tu destino inicial, tienes que poner tu mente en la zona horaria a la que vas. Así que, si vas a hacer un vuelo de 10 horas desde Europa a Los Ángeles, por ejemplo, intenta no dormir las 10 horas completas, o cuando aterrices nunca podrás dormir. No sigas el consejo de la gente que recomienda echar siestas pequeñas... no funciona. Además, intenta hacer deporte en el gimnasio o salir a correr por la ciudad. ¡Y come de forma saludable! Todo esto ayuda. De hecho, los estudios han demostrado que los trabajadores que hacen deporte antes o entre reuniones y otras tareas aumentan su productividad hasta un 15%.