Mientras persiste la incertidumbre en la economía mundial y Alemania se enfrenta a trimestres consecutivos de crecimiento negativo del PIB, los inversores están muy atentos a la respuesta de la Reserva Federal para contener la inflación mediante subidas de los tipos de interés. El precio del índice del dólar (dxy) sigue subiendo, marcando este mes una subida de casi el 1,4% en el pasado mes.
En Estados Unidos se observan señales positivas, ya que el gasto en consumo personal (PCE) aumenta, lo que indica la disposición de los estadounidenses a gastar y, potencialmente, a impulsar la actividad económica. Los traders e inversores tendrán que estar atentos al calendario económico y a cómo se desarrolla la próxima decisión sobre los tipos de interés, el 14 de junio, que determinará la eficacia de las medidas anteriores y abordará los riesgos en el mercado de deuda y sector financiero de Estados Unidos.
La decisión de la Fed depende de las elevadas cifras del PCE, que no han causado gran inquietud en los mercados. Sin embargo, es esencial tener en cuenta que la Fed da prioridad al PCE como su medida de inflación preferida frente al índice de precios al consumo (IPC) debido a su sensibilidad y a su mayor cobertura.
Los precios del oro (xauusd) han bajado inesperadamente, a pesar de las discusiones sobre el techo de la deuda de Estados Unidos. Los bienes no duraderos y los bienes energéticos experimentaron modestas subidas, mientras que los precios de las materias primas se mantuvieron por encima del 0%. La volatilidad de los bienes y servicios energéticos contribuyó a las fluctuaciones de la lectura del PCE.
Factores como el Día de los Caídos y los posibles recortes de la producción de petróleo por parte de la OPEP añaden más presión al proceso de toma de decisiones de la Reserva Federal. El resultado sigue siendo incierto, siendo una subida de 25 puntos básicos una opción plausible en base a los datos disponibles.
A medida que se acerque el informe de empleo no agrícola, que señalará las condiciones del mercado laboral, la probabilidad de una subida de la Fed podría aumentar significativamente. Con el tiempo limitado que queda, la decisión tiene un peso considerable en medio de un panorama económico que cambia rápidamente.