El Parlamento Europeo aprobó ayer un nuevo conjunto de leyes que obligarán oficialmente a las empresas de criptomonedas a cumplir los requisitos de diligencia debida como medida para combatir el blanqueo de capitales.
Como parte de la nueva legislación, los proveedores de servicios de criptoactivos (CASP, por sus siglas en inglés), como los intercambios centralizados, también tendrán que informar de cualquier transacción sospechosa a las autoridades.
El director de estrategia y política de la UE de Circle, Patrick Hansen, ha afirmado que el proyecto de ley ahora debe ser adoptado por el Consejo de la UE antes de entrar en vigor dentro de tres años.
Hansen también ha aclarado que no había planes para prohibir las carteras de criptomonedas anónimas o los pagos autocustodiados, y que las nuevas leyes solo se aplicarán a los CASP que ya estén regulados por el Reglamento sobre Mercados de Criptoactivos (MiCA).