5 formas de que viajar para ir a trabajar le arruine la vida.
Hay una razón más para que nos encante París en otoño. El 27 de septiembre, París se verá libre de coches durante un día. En un esfuerzo por afrontar las preocupaciones de la ciudad debido al aumento de la contaminación, la inauguración de «París Sin Coches» liberará de coches desde el Left Bank hasta los Campos Elíseos para los peatones y ciclistas.
Alrededor de 2,2 millones de trabajadores estadounidenses tardan diariamente una hora en ir al trabajo y otra en volver, según la «American Community Survey» del Censo estadounidense, y a 600.000 trabajadores a tiempo completo se les llama super-viajeros para trabajar, al emplear 90 minutos y 80 kilómetros para ir a trabajar cada día. De hecho, más personas condujeron 80 kilómetros o más el pasado Labor Day Weekend de las que lo habían hecho desde 2008, y más americanos están perdiendo tiempo atrapados en medio del tráfico.
«Muchas personas no son conscientes de todo el tiempo que pasan en el coche para ir a trabajar», dice Rob Perks, director de la campaña de transporte del Natural Resources Defense Council, un grupo de abogados medioambientales sin ánimo de lucro en Washington, D.C.
El NRDC averiguó que los trabajadores gastan 2.180 dólares al año en mantener el coche y pagar el combustible para ir y venir del trabajo en las zonas urbanas y 3.347 dólares en los suburbios, mientras que los que se desplazan en las zonas rurales gastan 4.272 al año. Las personas que no viajan para ir a trabajar solo gastan 1.857 al año.
Aquí tenemos otras cinco formas de viajar para ir a trabajar que pueden deteriorar su salud financiera, física e incluso emocional:
1. Provoca problemas de cuello y espalda
Uno de cada tres empleados que viajan para ir a trabajar más de 90 minutos señala problemas en el cuello o la espalda que les han causado dolor en los 12 meses anteriores, según una encuesta de 2010 de más de 173.500 adultos trabajadores de Gallup.
Mientras que es difícil saber con seguridad lo que causa estos problemas – estar sentado ante un ordenador puede que no ayude – solo una de estas cuatro personas que viajan 10 minutos o menos para ir a trabajar señalan problemas similares. Los expertos en salud sugieren que estos trabajadores viajeros usen las mismas tácticas por las que optan quienes vuelan con frecuencia, como una toalla enrollada detrás de la parte baja de la espalda. Un mayor tiempo viajando para ir a trabajar lleva a hacer menos ejercicio y a dormir menos, ha descubierto un estudio de la Universidad de Brown, que es lo que puede causar más dolores al ir por carretera.
2. Rupturas de matrimonios
Una persona que viaje mucho para ir a trabajar podría aumentar las posibilidades de separación y el riesgo de divorcio en un 40%, según un estudio realizado por la geógrafa social Erika Sandow de la Universidad de Umeå en Suecia, cuya investigación estaba basada en 2 millones de suecos que cohabitaron de 1995 a 2005. Muchas de estas personas tienen hijos pequeños y la mayoría son hombres, según el estudio.
Estos problemas maritales pueden aparecer con bastante probabilidad en los cinco primeros años de una larga temporada viajando para ir a trabajar, concluyó Sandow. Las razones de los problemas se pueden relacionar con las circunstancias financieras de quienes viajan mucho tiempo para ir a trabajar y el hecho de que un miembro de la pareja acabe ocupándose de más tareas domésticas y del cuidado de los niños.
3. Le hace engordar
Los estudios muestran que todas las horas que pasa conduciendo se cobran un precio. Y no es solo porque viajar para ir a trabajar sea una actividad sedentaria. «Viajar más tiempo para ir a trabajar también se relaciona con el aumento de la probabilidad de no comprar comida del supermercado y… actividades con ejercicios de menor intensidad», según un estudio de 2009 del Departamento de Community Health en la Universidad de Brown.
Es más, las personas que conducen 25 kilómetros o más para ir a trabajar también suelen pesar más y tener la presión sanguínea más alta, según una encuesta de 4.300 personas que viajan para ir a trabajar de Texas-Fort Worth publicado en el «American Journal of Preventive Medicine» en 2012. Las que viajan de 25 a 32 kilómetros tienen más de un 50% de posibilidades de ser obesas, y un 33% menos de hacer el ejercicio semanal que se considera sano para los americanos.
4. Destruye el planeta
Los americanos recorren una media de casi 5 millones de millas de carretera cada año, dice Perks. Mientras que las centrales eléctricas son las principales fuentes de gases de efecto invernadero en Estados Unidos, el transporte personal es plato de segunda mesa y representa el 20% de todas las emisiones de gases de efecto invernadero, dice. Si el 25% de la población adoptara nuevos comportamientos al conducir como compartir su coche, las emisiones de gases de efecto invernadero se podrían reducir de un 3 a un 12%, ahorrando miles de millones de litros de combustible, y teniendo como consecuencia un ahorro potencial de miles de millones de dólares cada año en gasolina, según ha descubierto el Natural Resources Defense Council. Un objetivo ambicioso, pero posible, dice Perks. «Cualquier cosa que podamos hacer para reducir estas emisiones será beneficiosa», dice.
5. Nos deprime
Puede que la hierba sea más verde en los suburbios, pero los estudios demuestran que quienes viajan para ir a trabajar experimentan un mayor estrés. En una lista de 16 actividades diarias, viajar para ir a trabajar resultó lo menos agradable del ambiente laboral, las tareas domésticas y el cuidado de los hijos, según un artículo de 2012 publicado en el «Journal of Economic Psychology» de Christian Kroll, un investigador de la Universidad de Jacobs en Bremen, Alemania, y Sebastian Pokutta, profesor asistente en el Georgia Institute of Technology. «Comprar una casa en los suburbios tiene un precio para el bienestar de las personas que no es tan obvio a primera vista», dice Kroll. Y el 40% de quienes viajan 90 minutos al día se tiene eran más propensos a preocuparse frente al 28% de quienes viajan 10 minutos o menos, según ha concluido el «Gallup-Healthways Well-Being Index».