Apple Pay, instituciones financieras, la paranoia de los ciudadanos y otros obstáculos para la implementación de los sistemas de pago móviles.
Google y Samsung han anunciado esta semana algunas novedades de interés relacionadas con los pagos móviles, pero estas iniciativas aún se enfrentan a algunos obstáculos importantes.
Los sistemas de pago de Google (NASDAQ: GOOG) y Samsung (KRX:005930) están diseñados para competir con el sistema de pago Apple Pay de Apple (NASDAQ: AAPL) y son parte de una tendencia más amplia de la tecnología de pagos móviles. Pero la adopción masiva de este tipo de métodos de pago está todavía a merced de los grandes bancos y comerciantes, y esto podría llegar a ser el factor limitante más importante en la lucha de Google, Samsung y Apple por el dominio del mercado. Otros factores incluyen la preocupación de los consumidores acerca de la seguridad y algunos desafíos tecnológicos.
Además de anunciar sus nuevos smartphones el martes (el Nexus 6P y el Nexus 5X), Google presentó un nuevo sistema operativo Android denominado Marshmallow que incluye una versión simplificada de Google Wallet llamada Android Pay.
Esta semana Samsung también presentó Samsung Pay en EE. UU. Algunos comentarios que ya se han recibido al respecto son positivos e indican que este sistema funciona en comercios en los que no se puede utilizar Apple Pay y Android Pay.
Esto se debe a que Samsung Pay utiliza un sistema de transmisión segura magnética, además de los sistemas de comunicaciones de campo cercano para llevar a cabo los pagos digitales. Esta tecnología interactúa también con los lectores de tarjetas de crédito tradicionales, lo que permite que Samsung Pay se utilice en cualquier sistema de almacenamiento existente. Por el contrario, Apple Pay y Android Pay requieren que las empresas instalen nuevos registros que funcionan con sistemas NFC, un factor evidente que dificulta el crecimiento de sus ofertas actuales.
Mientras tanto, las preocupaciones de los consumidores sobre la seguridad también están frenando la adopción de estos sistemas por parte de los usuarios. La Reserva Federal informa que casi el 60% de personas aún no utilizan sistemas de pagos móviles por temor a un fallo de seguridad. Sin embargo, esta tecnología es más segura que la utilización de la tarjeta de crédito. Esto se debe a la utilización de la tokenización digital, que sustituye los números únicos por los más delicados, como su número de tarjeta de crédito, durante las transacciones.
Sin embargo, tal y como se dijo anteriormente, el factor más importante que limita su crecimiento es el de las grandes instituciones financieras.
En muchos casos los bancos y las empresas de tarjetas de crédito siguen determinando quién puede adoptar estas nuevas plataformas de pago. Samsung ya se ha asociado con una selección de bancos para la expansión de Samsung Pay, entre los que se incluyen JPMorgan Chase (NYSE: JPM), U.S. Bancorp (NYSE: USB) y Bank of America (NYSE: BAC). También se ha asociado con redes de tarjetas de crédito como MasterCard (NYSE: MA), Visa (NYSE: V), Discover Financial Services (NYSE: DFS) y American Express (NYSE: AXP). No obstante, Samsung aún está pendiente de cerrar un acuerdo con Verizon Communications (NYSE: VZ). En el caso de Android Pay, solo 13 bancos incluyen actualmente el sistema, a pesar de que Google ha prometido que más bancos están haciendo las operaciones necesarias para incluir su tecnología.
Las iniciativas de pago de las empresas de tecnología como Apple y Google están obligando a los bancos a desarrollar sus propias soluciones, y las grandes instituciones pueden todavía terminar haciéndose con el control.
Ryan Feit, director ejecutivo y cofundador de SeedInvest, dijo:
«Las nuevas tecnologías que están irrumpiendo en el campo de los pagos, junto con los préstamos, el crowdfunding y la gestión de patrimonios, están obligando a los grandes bancos a reconsiderar sus estrategias de tecnología. Por ello, los bancos están empezando a poner en marcha sus propias incubadoras y fondos con el fin de asegurarse de que se mantienen desde el principio en esta tendencia emergente de la tecnología financiera».