El Banco Mundial recorta sus previsiones de crecimiento en Asia Oriental.
El Banco Central redujo el lunes sus previsiones de crecimiento para las economías de Asia Oriental, revelando riesgos debidos a la crisis en China y un acechante aumento en los tipos de interés de EE. UU.
El banco dijo que esperaba que las economías de Asia y el Pacífico crecieran un 6,5 % este año, 0,2 puntos porcentuales por debajo de su anterior previsión. El banco prevé un crecimiento de 6,4% para el próximo año, 0,3 puntos porcentuales por debajo de su anterior previsión.
El resultado económico de los 14 países de la región, que incluyen China, La India, Indonesia y Vietnam, se expandió en un 6,8% el año pasado. La previsión excluye a Japón y Corea del Sur.
Desde las previsiones de abril, «ha pesado una mayor incertidumbre acerca de la economía mundial sobre el comportamiento y perspectivas de la región en desarrollo de Asia Oriental y el Pacífico», comentó el banco de crédito con sede en Washington en un artículo.
Citó el esfuerzo de Pekín de pilotar la segunda mayor economía del mundo a un crecimiento más lento y sostenible y un muy esperado aumento del tipo de interés en EE. UU. a partir de niveles muy bajos en vigor desde la crisis mundial de 2008.
Sudhir Shetty, economista jefe del Banco Mundial para la Región de Asia Oriental y el Pacífico, declaró:
«Se prevé un crecimiento lento en la región en desarrollo de Asia Oriental debido al reequilibrio de la economía china y al ritmo de la esperada normalización de los tipos de interés en EE. UU. Estos factores podrían generar volatilidad financiera a corto plazo, pero son ajustes necesarios para el crecimiento sostenible a largo plazo».
China es el mayor socio comercial para la mayoría de sus vecinos asiáticos, y su crecimiento en constante declive durante los últimos cinco años ha reducido la demanda de materias primas y de componentes industriales.
Con la exclusión de China, las economías en desarrollo de la región esperan un crecimiento del 4,6 % este año, en línea con la expansión del pasado año, afirmó el banco. Dijo que Vietnam esperaba publicar un crecimiento del 6,2%, pero las pequeñas economías tenían una previsión de desaceleración.
Con el debilitamiento del mercado laboral americano y Europa todavía luchando, podemos atrevernos a esperar un levantamiento por parte de Asia, fuente de gran parte del crecimiento mundial en los últimos años. Pero incluso con un par de puntos brillantes, sobre todo La India, el continente se está cambiando al carril de los lentos. El Banco Asiático de Desarrollo ahora prevé que la región crezca un 5,8% este año y el Banco Mundial espera un 6,5%. Eso puede sonar a mucho, pero está muy por debajo de la media del 8% de la última década. Hay temores de que las cosas empeoren más adelante. Las exportaciones están bajando, las deudas aumentando y las divisas cayendo. Todo esto ha llevado a oscuros avisos de que se pueda repetir de manera acechante el periodo 1997-98, cuando Asia fue consumida por una crisis financiera.
Afortunadamente, esto es improbable porque los gobiernos han creado defensas más fuertes y se han armado con reservas robustas de divisas extranjeras. Pero Asia todavía parece encaminada a una larga crisis, lo cual será bastante penoso.