Las operaciones policiales en Francia consiguen desarticular un comando que estaba preparado con armas y explosivos para cometer un nuevo atentado.
Los terroristas que cometieron los atentados del pasado viernes en París llegaron en tres vehículos (Volkswagen Polo, un Seat León y un Renault Clio) con un intervalo de 10 minutos desde Bélgica, según ha confirmado el fiscal de París, François Molins. Un cuarto coche (un Volkswagen Golf) habría sido utilizado por varios individuos para trasladar a uno de los autores de los atentados, Salah Abdeslam, desde París hasta Bruselas. El fiscal agregó:
«Aún falta por determinar el papel de estos individuos. Vinieron por la noche a buscar a Salah, a petición suya, para llevarlo a Bélgica»
La policía ha utilizado 5.000 municiones en la operación También se ha hecho público el hallazgo de un teléfono móvil en una papelera cercana a la sala Bataclan, desde el que poco antes del acceso de los terroristas a la sala se había enviado un mensaje SMS a las 21.42 (20.42 GMT) con el texto «salimos, comenzamos ya».
«Las investigaciones intentan determinar quién es el destinatario de ese mensaje», declaró en una conferencia de prensa sin preguntas Molins. El fiscal ha confirmado que dos de los terroristas fallecidos en los ataques del viernes que aún están por identificar.
Con respecto al asalto a la vivienda de los terroristas en Saint-Denis, el fiscal no ha confirmado la identidad de ninguno de los terroristas, aunque tanto el Washington Post citando fuentes de la inteligencia europea, como fuentes de la inteligencia belga consultadas por el diario flamenco De Standaard, afirman que el presunto cerebro de los atentados de París, el belga Abdelhamid Abaaoud, habría muerto en la operación antiterrorista.
«Un arsenal de guerra» listo para atacar
En cuanto a la operación de la mañana de este miércoles en Saint Denis, donde han muerto dos yihadistas, el fiscal ha afirmado que «se ha encontrado un auténtico arsenal de guerra».
Según ha explicado Molins, «los terroristas contaban con una gran logística» en el apartamento en el que se hospedaba Abdelhamid Abaaoud en Saint-Denis.
La operación ha sido calificada de «extrema dificultad, ya que la puerta blindada del apartamento resistió la detonación de la carga de la RAID y dio tiempo a los terroristas a armarse. Realizaron disparos durante una hora sin parar. La policía utilizó 5.000 municiones», ha detallado el fiscal.