5 secretos sobre el dinero
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¿Por qué los estudios universitarios dependen de la aprobación de los padres?

Las empresas no suelen dar consejos prácticos sobre el dinero. Los padres, maestros y mentores son incapaces de inculcarnos las bases para tener una vida exitosa. No sabemos qué hacer con el dinero y ni cómo operar para evitar un fiasco financiero.

Los medios de comunicación hablan a menudo de los mercados de valores. Los analistas utilizan términos que no conoce la mayoría de la gente. Parece que es imposible llegar a ser rico.

¿Cómo entender las finanzas personales? Esta pregunta es igual para todo el mundo. Si desea aprender más acerca de las finanzas personales, estos son cinco secretos ocultos para la mayoría:

1. Actitud hacia el dinero que heredamos de nuestros padres

Nuestro comportamiento financiero se basa en gran medida en el obtenido de nuestros padres. Muchos ni siquiera adquieren ciertos bienes y servicios a causa de la desaprobación de familiares. Sin embargo, este tipo de pensamiento a menudo se convierte en un obstáculo para el conocimiento de la verdad sobre el dinero.

La mayoría de los padres nos enseñan que no hay que correr riesgos. Nos dicen que estudiemos y consigamos un trabajo. Los hijos cuyos padres no recibieron educación universitaria pueden tener graves problemas por este motivo. Muchos jóvenes aseguran que a sus padres les daría un ataque si no se sacaran un título universitario. Todo esto conduce a una falsa obligación de agradar a los padres.

2. La universidad no es la solución

El universitario medio se gradúa a los 22 años y las ganas de «darse la gran vida» son tantas que normalmente despilfarra el dinero extra que le queda en caprichos para él y su familia.

Para cuando ronda los 45, comienza a sufrir la crisis de la mediana edad. Llegado a ese punto, se da cuenta de que solo ha trabajado para ganar dinero. Efectivamente, mientras que hay personas que estudian para obtener conocimientos y conseguir títulos, hay otras que lo hacen por «amor al dinero». Debido a ello, algunas personas sufren una depresión nerviosa que les puede conducir a patrones de comportamiento constructivo o destructivo.

En cualquier caso, la universidad no es la respuesta para llegar a la independencia económica. La mayor parte de la gente acaba aprendiendo información irrelevante y técnicas que no puede aplicar. Es más provechoso leer decenas de libros, asistir a conferencias y contratar a un consejero personal o a un asesor de negocios, que solo costará una parte de lo que costaría la universidad. Además, se aprende más sobre el dinero siendo dueños de nuestra propia educación.

3. Superar la mentalidad del «algún día»

Mucha gente tiene la mentalidad del «algún día». Cuando ven una casa que les gusta piensan: «Algún día podré pagarme esa casa». Con esa actitud, se distancia emocionalmente de poseer esa casa, lo que significa que ha asumido que su nivel sigue siendo insuficiente como para adquirir esa casa.

En vez de eso, debemos decir «esa casa ya es mía y haré lo que sea para conseguirla». Esta actitud denota que considera que esa casa (o una como esa) será suya si la quiere. Una vez hecha mentalmente esta afirmación, todas sus acciones estarán orientadas a la consecución del objetivo.

Es más, mucha gente espera a que ocurran circunstancias externas antes de actuar: la devolución de la renta, la finalización de los estudios de los hijos, la última letra del coche, etc. Esta costumbre de esperar a que llegue «algún día» limita enormemente e impide conseguir lo que tanto desea lograr y que le pertenece.

4. La riqueza es una elección

Tiene que elegir ser rico, nadie puede hacerlo por usted. Sin embargo, la mayoría de las personas nunca han tomado esa decisión —simplemente porque no saben que pueden hacerlo—. La forma más fácil de decidirlo es aceptar que quiere disfrutar de un cierto estilo de vida. Una vez que ha hecho eso, debe marcarse objetivos, trazando un plan de acción para alcanzarlos.

A menudo, las personas no pueden decidir sobre su fortuna porque están atrapadas en conductas adictivas. Acaban malgastando tiempo y dinero por dedicar demasiados esfuerzos a fines que no merecen la pena: drogas, sexo, juego, diversión, dormir en exceso y otras formas de proceder que resultan perjudiciales. Estas adiciones nublan la mente e impiden pensar con claridad.

No se puede eludir la toma de decisión sobre la propia riqueza. Aquellos que no lo hagan estarán confundidos durante el resto de sus vidas. Desgraciadamente, la mayoría de las personas han hecho voto de pobreza (sin ser conscientes de ello), pero aún así han tomado una decisión. Si elige ser rico, solo se dedicará a actividades beneficiosas que le lleven a la riqueza, reduciendo y eliminando por tanto las que no lo sean.

5. Evitar las ideas equivocadas sobre el dinero

Mucha gente sostiene creencias equivocadas acerca del dinero. Hay multitud de falsos maestros que han implantado la idea de que tener dinero no es bueno, provocando que muchas personas asocien el hacerse rico con un sentimiento de culpabilidad. Estos incitadores juzgan a la ligera y asumen que casi todos los ricos son malos.

Cuando ven a personas con dinero, dicen que algo debe de faltarles en la vida, ya que el hecho de tener tanto dinero parece demasiado bueno para ser verdad. Sin embargo, tener dinero nunca debería desanimarle. El dinero es bueno y cualquiera que diga que no probablemente carezca de ello.

En muchas ocasiones, puede que resulte más beneficioso para la sociedad que lo tenga, y además conseguirá entablar más amistades de esta forma. El dinero le da libertad para ser más usted mismo, permitiéndole realizar su propósito vital. En vez de adaptar sus costumbres, comportamientos y filosofías a los de otra gente, busque un nuevo rumbo haciéndose amigo de aquellos que comprenden en qué consiste la riqueza.

Mientras procura atraer prosperidad a su vida, observe sus actitudes y comportamientos con respecto al dinero. Con el tiempo, su riqueza aumentará por haber estudiado y aplicado las verdades sobre cómo mejorar su relación con el dinero.

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