Los países periféricos de la zona euro han dejado de ser un problema para Europa. Alemania está lista para tomar el relevo.
Anteriormente, el motivo de preocupación para los mercados era la deuda de los países periféricos de la zona euro. Pero en una entrevista con Business Insider, el fundador de Geopolitical Futures, George Friedman, ha dicho que Europa tiene ahora un problema mucho más grande: Alemania. Y el sistema bancario se encuentra en el epicentro del problema que se avecina para Alemania y Europa.
Friedman dijo:
«Los problemas de los bancos italianos van a extenderse por los Países Bajos, y a su vez por Alemania. Alemania es el nuevo PIIG. Alemania depende de las exportaciones y sus mercados están pasando por un mal momento».
Las economías PIIGS - Portugal, Italia, Irlanda, Grecia y España - fueron las principales preocupaciones durante la crisis de la deuda europea de 2011 y 2012. Y ahora que aparentemente esas crisis han quedado atrás y Europa se dirige de nuevo hacia la estabilidad económica, Alemania se ha beneficiado con una economía tan fuerte como lo fue tras la reunificación y con una tasa de desempleo de tan solo el 4,5%.
Sin embargo, Alemania ha estado disfrutando de un superávit comercial estructural respaldado por un euro más débil, que alcanzó un récord de 23,9 mil millones de dólares en junio. Y Friedman cree que las exportaciones de Alemania están a punto de hundirse.
Friedman piensa que los problemas del sistema bancario italiano van a arrastrar a Alemania - la economía más fuerte en la zona euro – con ellos.
Los datos publicados a finales de 2015 mostraron que la morosidad de los bancos italianos alcanzaba los 300 mil millones de euros, el 17,3% de los préstamos pendientes. Eso es una cifra muy alta teniendo en cuenta que la media de la zona euro es del 6,8%, y la del NPL alemán de tan solo el 2,3%.
Según Friedman, se trata de un gran problema porque Italia es la cuarta economía más grande de Europa y la octava economía más grande del mundo. Italia alberga el mayor sistema bancario de Europa del Este, por lo que el país está interconectado con los sistemas de muchos otros países.
Por ejemplo, el mayor banco de Alemania, el Deutsche Bank, está muy expuesto a Italia, y lo mismo ocurre con el resto de Europa. En última instancia Friedman piensa que será Alemania quien tenga que salvar a Italia. Y eso costará mucho dinero.
Friedman dijo:
«No son los PIIGS de los que hay que preocuparse. Alemania ni siquiera ha empezado a caer. Y cuando Alemania caiga, y lo hará, será cuando cunda el pánico».