5 hechos sobre la victoria de Macron
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Emmanuel Macron, un ex-banquero de inversiones de Rothschild & Cie de 39 años de edad, que ocupó durante poco tiempo el cargo de ministro de economía en el gobierno de François Hollande, ha sido elegido presidente de Francia para los próximos cinco años.

Macron ha derrotado a la candidata del Frente Nacional, Le Pen, por un margen del 65,8% frente al 34,2% - casi dos a uno - convirtiéndose así en el líder más joven de Francia en más de 140 años. Con ese resultado, Francia ha reafirmado su compromiso con el liberalismo y la Unión Europea, a pesar del aumento de los atentados islamistas en suelo francés de los últimos años y al fracaso frente a los problemas crónicos de desempleo y déficit presupuestario.

Estos son los puntos más relevantes que debe conocer sobre las elecciones más importantes de Europa de los últimos años.

1. El populismo se ha pospuesto, pero no se ha cancelado

Se trata de una gran victoria para Europa, pero no es el final. El desempleo lleva cayendo más de un año, mientras que el crecimiento parece haberse afianzado. Las encuestas de negocios sugieren que la economía está creciendo a su ritmo más rápido en seis años.

Esto ha hecho que Le Pen pierda votos. El 21,3% que cosechó durante la primera vuelta hace dos semanas ya había caído un 3,5% en comparación con el 24,8% que su partido obtuvo en las elecciones al Parlamento Europeo en 2014. Esto significa que el resultado de 2014 caerá tras la crisis que va a experimentar el Frente Nacional.

Sin embargo, el crecimiento es cíclico y muchos de los factores que sustentan el apoyo a la extrema derecha y a la extrema izquierda - el resentimiento de la globalización, el miedo al islamismo y gran parte del problema del desempleo - son estructurales.

Le Pen, que todavía mantiene casi el doble del 17,8% que su padre Jean-Marie obtuvo en la segunda vuelta de 2002, todavía podría argumentar que el FN podría crecer a largo plazo.

2. La excepción francesa

Los dos grandes éxitos populistas de 2016, la elección de Donald Trump y el referéndum del Brexit, se debieron en gran medida a los votantes mayores. Las personas mayores de 65 años votaron a Trump por un margen de ocho puntos porcentuales (54%-46%), y votaron el Brexit por un margen de 20 puntos (60%-40%).

Por el contrario, los jóvenes estaban más dispuestos a votar a Le Pen que cualquier otro grupo de edad, señaló la profesora de Harvard, Yascha Mounk. Según las cifras citadas por Mounk, el voto gris se dividió entre el 80% y el 20% a favor de Macron.

3. El apoyo al euro

Parte del miedo de los jubilados a Le Pen estaba sin duda ligado a sus promesas de abandonar el euro y reintroducir el franco (aunque de una forma tan confusa que ni siquiera ella seguramente comprendía). La división del 80%-20% de los votos en contra de Le Pen fue exactamente la misma que se produjo cuando la encuestadora Opinion-Way.fr preguntó si sus promesas de retirarse del euro eran realistas.

El “Frexit” habría significado una reducción del poder adquisitivo y una mayor inflación para un grupo demográfico que, como en todas partes del mundo avanzado, está ejerciendo una enorme y creciente influencia sobre los resultados electorales. En última instancia, los votantes franceses no pensaron que una moneda más barata y más libre resolvería sus problemas. Esto no es sorprendente si tenemos en cuenta que el 48% de sus importaciones proceden de la Eurozona.

4. Macron aprende muy rápido

Después de la primera vuelta de las elecciones, Macron fue criticado por celebrar su pase a la segunda vuelta de las elecciones en un restaurante de lujo de París. Muchos pensaron que ya daba por hecho que iba a acabar ganando. Tenía buenas razones para hacerlo, ya que todas las encuestas de opinión le daban una importante ventaja frente a Le Pen. Sin embargo, su discurso de victoria del domingo fue mucho más humilde.

Los cínicos dirían que también refleja el hecho de que ahora tiene que empezar a ser amable con sus oponentes, porque su movimiento, En Marche!, podría no conseguir unos resultados tan buenos en las votaciones de la Asamblea que tendrán lugar en junio. Y al no contar con una mayoría en el parlamento, Macron no lo tendrá fácil para aprobar las reformas necesarias para acabar de una vez por todas con la amenaza extremista.

5. Los votantes están empezando a hacerse inmunes a las noticias falsas

Una de las buenas noticias de las elecciones es que parece que los votantes franceses son cada vez más inmunes a las noticias falsas como las que intentaron desacreditar a Macron.

Los rumores sobre su homosexualidad secreta y cuentas bancarias clandestinas en las Bahamas se divulgaron rápidamente por Internet, pero no consiguieron influir en la opinión pública. El último intento por desacreditar a Macron fue el pirateo masivo del correo de su campaña (las investigaciones parecen indicar que Rusia está relacionada de alguna forma).

Por el contrario, la campaña de filtraciones llevada a cabo por la izquierda en un intento por desacreditar al candidato de centro-derecha François Fillon, tuvo un éxito espectacular, sobre todo porque parecía tener más pruebas. Parece que la democracia de Francia estará a salvo mientras la clase dirigente manipule la opinión pública mejor que los grupos que están en su contra.

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