Por qué la estructura del sistema financiero de EE. UU. no permite que los reguladores desarrollen un enfoque unificado.
La gran cantidad de organismos que intervienen en el territorio opaco y a veces polémico de la supervisión de las monedas digitales podría estar conduciendo a un arbitraje regulatorio en el que las empresas se aprovechan de las lagunas legales para conseguir sentencias regulatorias favorables.
Durante los últimos 10 días, dos órganos de Nueva York - la Fiscalía General y el Departamento de Servicios Financieros (DFS) - han sopesado por separado los comentarios y fallos en la industria de las monedas digitales.
La Comisión de Bolsa y Valores (SEC) se ocupa de la mayoría de los problemas de regulación de las criptomonedas a nivel federal. Sin embargo, los expertos han empezado a preguntarse si el enfoque fragmentario de la regulación podría ser perjudicial.
“Tenemos un mosaico de agencias reguladoras a nivel federal, con jurisdicciones que se superponen. Además, tenemos un sistema paralelo de regulación estatal y federal, de nuevo con jurisdicciones que se superponen”, dijo David Yermack, profesor de la Universidad de Nueva York. Este añadió:
“Hay muchas debilidades en el sistema de Estados Unidos, incluyendo el alto coste, el arbitraje regulatorio y la competencia entre las agencias por ser la más influyente. Las criptomonedas han contribuido a la manifestación de todos estos problemas, pero no son ni el primero ni el último”.
El debate sobre la jurisdicción salió a la luz el miércoles pasado cuando el intercambio Kraken y su director ejecutivo y cofundador, Jesse Powell, acusaron a la Procuradora General de Nueva York Barbara Underwood y a su oficina de operar fuera de su territorio.
El informe del fiscal general dice que los casos de Kraken y otros dos intercambios fueron transferidos al Departamento de Servicios Financieros de Nueva York para investigar posibles violaciones de las leyes de regulación de las monedas virtuales en Nueva York, ya que existen sospechas de que ambas plataformas habían aceptado transferencias ilegales de este estado, algo que Kraken niega.
El portal MarketWatch se ha puesto en contacto con la oficina del Fiscal General de Nueva York para preguntarse sobre la cooperación con la SEC durante el estudio de los hechos. Sin embargo, no ha recibido respuesta alguna.
Félix Shipkevich, director de Shipkevich PLLC, ha señalado que ya existen lagunas en la regulación, pero que si las cosas se mantienen a nivel estatal, la capacidad de saltarse las jurisdicciones va a ser cada vez mayor.
“Nueva York es diferente, muchos de los otros estados podrían no tener los recursos suficientes para supervisar el sector, lo que naturalmente crea más arbitraje regulatorio”, dijo Shipkevich.
Nueve días antes del informe del fiscal general, la incertidumbre con respecto a la distribución de las responsabilidades reglamentarias entre las autoridades volvió a hacerse patente cuando el Departamento de Servicios Financieros de Nueva York aprobó el lanzamiento de las criptomonedas estables de Gemini y Paxos.
Cuando MarketWatch preguntó al DFS de Nueva York si había consultado o no a la SEC o a la Comisión de Negociación de Futuros de Productos Básicos antes de tomar la decisión sobre las dos monedas, el departamento dijo en una respuesta enviada por correo electrónico que “no hace comentarios sobre su proceso de revisión de solicitudes”.
La regulación sigue siendo tema de debate entre los entusiastas del bitcoin, con algunos citando la falta de claridad por la caída del precio de la mayor moneda digital del mundo, que ha caído más de un 50% en lo que va de año.
Mientras tanto, la Comisión de Bolsa y Valores ha rechazado una serie de solicitudes para el lanzamiento de ETFs de bitcoin, una de las cuales fue presentada por Gemini Trust.
Los intentos de mejorar la claridad normativa desde dentro dieron un paso adelante a principios de septiembre con el anuncio de la Blockchain Association. El consorcio incluye a algunos de los representantes más influyentes del ecosistema de las criptomonedas, y sus actividades se dedicarán a promover los intereses de la industria para su posterior desarrollo.
“Sería bueno que el gobierno adoptara un enfoque unificado para regular los criptoactivos, pero dada la estructura bizantina de nuestra regulación financiera, no esperaría milagros”, dijo Yermack.