Bernard Marr, escritor y experto en el campo del análisis y big data, nos habla sobre cómo la idea de un registro distribuido encriptado impulsará el desarrollo de la IA y viceversa.
La IA, que es el término que se suele utilizar actualmente para hacer referencia a esta tecnología, es, en pocas palabras, la teoría y la práctica de la construcción de máquinas capaces de realizar tareas que parecen requerir inteligencia. En la actualidad hay varias tecnologías que emplean este tipo de inteligencia, entre las que nos encontramos con el aprendizaje automático, las redes neuronales artificiales y el aprendizaje profundo.
Mientras tanto, el blockchain es esencialmente un nuevo sistema de almacenamiento de información digital que almacena los datos en un formato de libro mayor cifrado y distribuido. Puesto que los datos son codificados y distribuidos en muchos ordenadores diferentes, este sistema permite la creación de bases de datos a prueba de manipulaciones y muy seguras que solo pueden ser leídas y actualizadas por las personas que tengan permiso para hacerlo.
Aunque desde una perspectiva académica se ha escrito mucho sobre el potencial de combinar estas tecnologías innovadoras, las aplicaciones del mundo real son escasas en este momento. Sin embargo, esperamos que esta situación cambie en un futuro próximo.
Estas son tres maneras en las que la IA y el blockchain podrían combinarse.
1. La IA y el cifrado funcionan muy bien juntos
Los datos almacenados en un blockchain son por naturaleza muy seguros gracias a la criptografía inherente a su sistema de archivo.
Esto significa que los blockchains son ideales para almacenar datos personales altamente confidenciales que, cuando se procesan de forma inteligente, pueden proporcionar valor y comodidad a nuestras vidas. Tomemos como ejemplo sistemas de salud inteligentes capaces de hacer diagnósticos precisos basados en nuestras exploraciones y registros médicos, o incluso en los sistemas de recomendación de Amazon o Netflix que nos sugieren qué producto deberíamos comprar o qué serie deberíamos ver.
Por supuesto, los datos que se introducen en estos sistemas (después de ser recogidos por nosotros mientras navegamos o interactuamos con los servicios) son altamente personales. Las empresas que trabajan con ellos deben invertir grandes cantidades de dinero para cumplir estrictas normas en términos de seguridad de datos. Y aun así, cada vez son más comunes los robos de grandes cantidades de datos personales.
Las bases de datos tipo blockchain cifran la información. Esto significa que solo es necesario mantener seguras las claves privadas - unos pocos kilobytes de datos - para que todos los datos de la cadena estén seguros.
La IA también tiene mucho que aportar en términos de seguridad. Un campo emergente de la AI se ocupa de la construcción de algoritmos que son capaces de trabajar con (procesar u operar) datos mientras estos todavía están cifrados. Puesto que cualquier procesamiento de datos en el que se produzca la exposición de datos no encriptados supone un riesgo, reducir estos incidentes podría ayudar a aumentar la seguridad.
2. El blockchain puede ayudarnos a rastrear, comprender y explicar las decisiones tomadas por la IA
Las decisiones tomadas por las IAs a veces pueden ser difíciles de entender para los humanos. Esto se debe a que son capaces de evaluar un gran número de variables independientemente unas de otras y de "aprender" cuáles son importantes para la tarea global que está intentando llevar a cabo.
Por ejemplo, se espera que los algoritmos de IA sean utilizados cada vez más a la hora de decidir si las transacciones financieras son fraudulentas y si deben ser bloqueadas o investigadas.
Durante algún tiempo, sin embargo, seguirá siendo necesario que estas decisiones sean analizadas por los seres humanos con el fin de garantizar su exactitud. Y dada la gran cantidad de datos que pueden verse involucrados, esta puede ser una tarea compleja. Walmart, por ejemplo, introduce en sus sistemas de IA datos transaccionales de varios meses para que estos puedan decidir qué productos deben almacenarse y dónde.
Si las decisiones son almacenadas en un blockchain, resulta mucho más sencillo auditarlas, ya que de esta manera queda garantizado que la información no ha sido manipulada desde su registro hasta que es auditada.
No importan todas las ventajas que la IA pueda proporcionar en diversos campos si el público no confía en ella, ya que su utilidad se vería gravemente limitada. El registro del proceso de toma de decisiones en blockchains podría ser un gran paso hacia la transparencia y comprensión de las mentes de los robots necesaria para ganarse la confianza del público.
3. La IA puede administrar el blockchain de manera más eficiente que una persona
La IA es un intento de alejarse de este enfoque de fuerza bruta y de gestionar las tareas de una manera más inteligente y reflexiva. Imagínese a un experto en descifrar códigos que se hace cada vez mejor con la experiencia. Un algoritmo de aprendizaje automatizado abordaría su trabajo de una manera similar - aunque en lugar de tener que pasar toda una vida para convertirse en un experto, podría afinar sus habilidades casi instantáneamente si es alimentado con los datos correctos.
Resulta obvio que la unión entre el blockchain y la AI - ya muy innovadores por sí solos - puede ser verdaderamente revolucionaria, ya que pueden mejorar mutuamente sus habilidades, y aumentar la rendición de cuentas y la transparencia.