Los españoles que se arriesgan ganan a medida que la economía crece al ritmo más rápido en ocho años.
La racha de crecimiento económico en España está reportando beneficios a Andoni Goicoechea. Hace dos años, el exmédico de 28 años compró un bar en el centro de Madrid y lanzó un restaurante justo en el momento en el que la economía resurgía de la recesión. Los datos del jueves muestran un crecimiento del 1 por ciento en el segundo trimestre, el mayor en ocho años, lo que significa que su apuesta está amortizándose a medida que más personas entran por las puertas de su cadena en expansión.
«La gente en la calle está cambiando. Lo que pensaban o de lo que hablaban hace unos dos años ya no es lo mismo».
«Mis peticiones de préstamos eran rechazadas, no había créditos», dijo Goicoechea en una entrevista realizada en uno de sus seis restaurantes. «Yo me arriesgué, dejé mi trabajo como médico y utilicé mis ahorros para montar mi primer restaurante».
Con ocho trimestres seguidos de crecimiento, España se encuentra a la cabeza de la zona euro este año. Su previsión de crecimiento de cerca del 3 por ciento en 2015, según datos de un estudio de Bloomberg, es el doble que el de la media de la región de los países con la moneda única.
Otros también esperan un crecimiento continuado de la economía. Con las elecciones generales previstas para finales de este año, el presidente Mariano Rajoy está cortejando a los votantes de clase media con una mezcla de bajada de impuestos y de reducción del desempleo.
«Estamos viendo un fuerte crecimiento», dijo el ministro de Economía, Luis de Guindos, en Onda Cero. Esto se «suma a una inflación inexistente, a una evolución positiva del consumo y de las exportaciones y a la mejora del mercado laboral».
Estímulo
Sin embargo, a pesar de que la tasa de desempleo ha descendido hasta el 22 por ciento desde su cifra récord del 27 por ciento en 2013, sigue siendo casi el doble de la media de la zona euro.
Con el crecimiento apoyado por un euro más débil, los costes de la energía más bajos y el acceso a la financiación más barata gracias al estímulo del Banco Central Europeo, se plantean cuestiones sobre si puede sostenerse el ritmo de crecimiento. Esta es una cuestión planteada por economistas de ING Group, quienes han dicho esta semana que, con posibles turbulencias por las elecciones a finales de este año, el segundo trimestre puede que sea el mejor.
«Probablemente el crecimiento ha alcanzado su máximo», dijo Geoffrey Minne en ING en Bruselas. «La incertidumbre política podría causar un impacto en la confianza empresarial y reducir ligeramente el crecimiento del PIB en el tercer y cuarto trimestre». Por ahora, dice Goicoechea, el ambiente es bueno y tiene planeado abrir más restaurantes en Barcelona.