Los riesgos políticos y de seguridad podrían perturbar el status quo de la economía mundial.
No obstante, la probabilidad de que ocurran estos riesgos, así como el grado en el que pueden perturbar las cosas varía en gran medida.
Teniendo esto en cuenta, la Economist Intelligence Unit (EIU) recogió en una lista los cinco principales «escenarios de riesgo» que «pueden alterar considerablemente el ambiente de operaciones empresariales en los próximos dos años».
Estos escenarios se clasificaron según una «puntuación en términos de intensidad de riesgo» o de acuerdo con la probabilidad de que ocurriera el riesgo y el impacto del mismo. La puntuación máxima posible es 25. Descubra los cinco riesgos más importantes.
5. La creciente amenaza del terrorismo yihadista desestabiliza la economía mundial
Combatientes del Estado Islámico
Intensidad de riesgo: 12
El Estado Islámico domina territorio en Siria e Irak y ha tenido éxito a la hora de reclutar y motivar a sus combatientes. Además, la naturaleza descentralizada del grupo permite que se centren en diversos objetivos, a veces de forma simultánea.
Según el informe «en caso de que esta espiral de ataques y represalias continúe aumentando, no hay duda de que esto reduciría la confianza de los consumidores y de las empresas, lo que a su vez podría amenazar con acabar con los cinco años de mercados bursátiles alcistas en EE. UU. y Europa».
4. La divergencia en la política monetaria mundial conduce a una volatilidad monetaria extrema
Erdem Basci, Presidente del Banco Central de Turquía
Intensidad de riesgo: 16
Se espera que la Reserva Federal aumente los tipos este año, y los inversores seguirán de cerca lo que pase cuando esto suceda. En el pasado, los mercados emergentes tuvieron problemas durante las fases iniciales de los ciclos de política monetaria estricta.
«Los países más vulnerables al cambio de ciclo monetario serán los que tengan grandes déficits fiscales y de cuenta corriente, los que no cuenten con credibilidad política y los que sean altamente dependientes de las exportaciones de materias primas», se indica en el informe. «Por ello, los países más vulnerables parecen ser Turquía, Sudáfrica, Rusia y Venezuela».
3. La intervención de Rusia en Ucrania sigue en aumento, lo que conduce a tensiones similares a las de la época de la Guerra Fría
Vladimir Putin, Presidente de Rusia y Angela Merkel, Canciller de Alemania
Intensidad de riesgo: 16
Las relaciones entre Rusia y Occidente cayeron durante el pasado año a niveles de una pos-Guerra Fría. Recientemente la UE renovó las sanciones que expiraban en julio, mientras que Rusia aún no ha tomado nuevas medidas económicas de represalia (aunque sí comenzó a restringir la importación de productos de alimentación occidentales).
«No obstante, incluso sin represalias comerciales, el debilitamiento de las relaciones comerciales continuará perjudicando la economía rusa y hundiendo la producción industrial en Europa Central y del Este», se indica en el informe.
2. La caída del precio de las materias primas y la crisis de inversión en China afianzan la crisis de los mercados emergentes
Xi Jinping, Presidente chino
Intensidad de riesgo: 20
Existe preocupación en relación a la desaceleración de la economía china, así como por un posible efecto colateral adverso del estallido del mercado inmobiliario o del hundimiento del mercado bursátil.
Según la EIU, «debido a la creciente dependencia de los fabricantes y minoristas occidentales según la demanda en el mundo desarrollado, una desaceleración prolongada en los mercados emergentes tendría un grave efecto rebote en la UE y EE. UU., mucho más de lo que hubiera sido el caso hace unas décadas».
1. A «Grexit» le sigue una ruptura en la eurozona
Euclid Tsakalotos, Ministro de Finanzas de Grecia
Intensidad de riesgo: 20
«Continuamos atribuyendo una elevada probabilidad a ese resultado a partir de 2016, dada la dificultad a la que el gobierno sirio se enfrentará a la hora de implementar las difíciles condiciones del nuevo acuerdo», se dice en el informe.
«Si Grexit», o una salida de Grecia del euro, «condujera a la salida de otros países de la eurozona, esto sería un gran desestabilizador para la economía mundial... El sistema financiero mundial sufriría grandes pérdidas y se hundiría en una recesión».