El último discurso del Estado de la Unión de Obama fijó sus objetivos finales con una nota de optimismo frente al tono pesimista dominante de la parte republicana. Vea con claridad lo que Barack Obama ha logrado a lo largo de casi siete años.
Desempleo
El presidente Obama asumió el cargo el 20 de enero de 2009 en medio de la Gran Recesión. Las cifras de desempleo estaban por las nubes debido a que las empresas estaban recortando empleos a diestro y siniestro cuando se dieron cuenta de que era poco probable que la economía se recuperase pronto. El desempleo alcanzó el 10,3% en octubre de 2009 (luego sería revisado hasta el 10%), el peor en 26 años.
Hoy en día el desempleo vuelve a estar al 5,1%, cifra que no está lejos de la que los expertos consideran típica de una economía sana.
Crecimiento laboral
En 2009, EE. UU. perdía alrededor de 800.000 empleos al mes. El Congreso y Obama aprobaron medidas de estímulo y recortes fiscales ese año para incentivar a las empresas para que contratasen a gente. La Reserva Federal también tomó medidas extraordinarias para arreglar la economía.
Pero no fue hasta mayo de 2014 cuando los EE. UU. por fin recuperan todos los 8,7 millones de empleos destruidos durante la crisis.
Las contrataciones han subido últimamente. El pasado año fue el año más fuerte respecto al crecimiento laboral en Estados Unidos desde 1999. Este año, EE. UU. sigue creando de media unos 200.000 nuevos puestos de trabajo al mes, lo que es una señal de salud.
Crecimiento económico (PIB)
Una de las mayores críticas a la economía de Obama es que es crecimiento ha sido lento. Históricamente, la economía estadounidense ha crecido un 3% o más al año, de media. La Gran Recesión supuso un corte para la economía. Desde entonces, EE. UU. ha tenido problemas para crecer a más del 2% al año. 2015 iba a ser un año decisivo, pero la Reserva Federal prevé un crecimiento de tan solo el 2,1% de nuevo este año debido al empeoramiento de la economía mundial.
Renta familiar media
Los estadounidenses siguen preocupados por sus bolsillos. Casi 3 de cada 5 dicen que «a veces» o «con frecuencia» se sienten ansiosos por su situación financiera.
Gran parte de esta preocupación proviene del hecho de que los sueldos no crecen. La renta familiar media en Estados Unidos está ahora en 53.650 dólares, lo que es más o menos lo mismo que era en 1996 tras los ajustes por inflación.
La renta familiar todavía no se ha recuperado desde que el presidente Obama asumió el cargo.
Mercado de valores
El 3 de marzo de 2009, el presidente Obama dijo que las acciones parecían una compra bastante buena. Menos de una semana más tarde - el 9 de marzo- el mercado de valores alcanzó su punto más bajo tras la crisis financiera.
Desde entonces, el mercado de valores estadounidense se encuentra en una tremenda situación alcista en auge durante más de seis años. El S&P 500 ha ganado alrededor de un 200%. Hasta ahora, Obama se sitúa en el primer puesto de los mejores presidentes para el mercado de valores en la historia moderna.
Cupones para alimentos
Uno de los signos más claros de cuánto estaban sufriendo los estadounidenses durante la recesión es que casi 50 millones - alrededor del 15% de la población - necesitaba cupones para alimentos.
El uso de cupones para alimentos alcanzó su máximo en 2013 y ha caído un poco desde entonces, aunque sigue estando mucho más alto de lo que estaba cuando Obama asumió el cargo. Es otra señal de que la recuperación no ha ayudado a muchos.
Manufacturación estadounidense
La manufacturación ha sido un punto destacado en la economía de Obama. Le va mejor de lo que le iba antes de la recesión, según el índice de producción manufacturera.
Los esfuerzos para salvar a la industria automovilística sirvieron para mantener empleos y las ventas de coches hoy en día vuelven a estar en auge. Además, el tremendo crecimiento en el sector energético estadounidense, sobre todo la producción de gas esquisto en Dakota, Pensilvania y Texas, ha impulsado la creación de nuevos puestos de trabajo en el sector de la energía y en sectores relacionados.
Precios de la vivienda
La crisis financiera estuvo causada en parte porque se vendían demasiadas casas a personas que no se las podía permitir. Como consecuencia, el sector de la vivienda se vio muy afecado por la Gran Recesión. La gente ha sufrido para obtener hipotecas y eso por esto por lo que los compradores de casas son cada vez mayores.
Pero hay señales de esperanza. El precio de venta medio de casas en EE. UU. es tan solo de 222.000 dólares, según la Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios. Este es el mismo precio que en 2006, antes de la crisis.
Precio del combustible
Los precios del combustible son famosos por fluctuar mucho. Desde que el presidente Obama asumió el cargo, la media nacional para un galón de gasolina normal ha sido tan alta como 3,91 dólares en 2011 y tan baja como 1,81 dólares por galón el mes en el que asumió el cargo.
Hoy en día los precios se encuentran en 2,17 dólares por galón, casi un dólar más barato que hace un año, según la Administración de Información de Energía de Estados Unidos. Muchos estadounidenses se están ahorrando cientos de dólares al año en las gasolineras. Es dinero que están invirtiendo en comer más a menudo fuera de casa y en «pequeños caprichos».
Deuda del Gobierno estadounidense
El Congreso y el presidente Obama han gastado mucho dinero para estimular la economía durante y tras la Gran Recesión. Estados Unidos ha tenido déficit año tras año desde que Obama asumiese el cargo, a pesar de que ahora es más bajo. El último déficit ha sido el más bajo desde 2007.
Muchos economistas tienen la vista puesta en el coeficiente deuda/PIB, una perspectiva de cuánta deuda tiene EE. UU. en relación al tamaño de la economía.
Cuando el presidente Obama asumió el poder, la relación estaba alrededor del 50%. Hoy en día se encuentra al 75%, según los cálculos de la Casa Blanca.