Mientras las monedas de los mercados emergentes se debilitan, el euro y el yen se fortalecen en contra de los deseos de los reguladores.
El euro y el yen están superando a todas sus contrapartes importantes porque están siendo tratados como paraísos en medio de la crisis de los precios de las materias primas que ha hecho que al menos 16 monedas alcancen niveles récord desde principios de año.
Eso no va a venirle bien al Banco Central Europeo ni al Banco de Japón, ya que ambos se beneficiarían de unas monedas más débiles para ayudar a reactivar la inflación y el crecimiento económico.
Y aún peor, hay signos de que las monedas van a seguir fortaleciéndose. La brecha cada vez más estrecha entre los tipos de interés europeos y estadounidenses, además de un abismo cada vez mayor en el euro frente a su tipo de cambio efectivo. El BCE ha decidido mantener los tipos sin cambios. El euro ha caído después de la promesa de Draghi de revisar la política del regulador en marzo, pero aún así sigue más alto de lo deseado.
Lee Ferridge, jefe de estrategia macro para América del Norte de State Street Global Markets, una unidad de State Street Corp (que tiene aproximadamente 2,2 billones bajo gestión) con sede en Boston, dijo:
«El BCE y el Banco de Japón no van a quedarse sentados y ver cómo sus monedas se fortalecen. Si el euro-dólar volvieran a los 1,15 $, entonces escucharíamos hablar más sobre Draghi y quizás más conversaciones sobre estímulo».
Mercado bajista
El euro y el yen han subido al mismo tiempo que la desaceleración económica en China y la crisis en el mercado de materias primas. El índice mundial MSCI All-Country se redujo en un mercado a la baja y los precios del crudo cayeron a un mínimo de 12 años, mientras que el rublo ruso y el peso mexicano batieron récords el miércoles.
Eso está aumentando la preocupación de que la perspectiva de crecimiento económico mundial está empeorando y la Reserva Federal de EE. UU. tendrá que relajar la estricta política monetaria esperada para este año. Tanto la zona euro como Japón tienen superávits de cuenta corriente, lo que los convierte en destinos atractivos para el capital en momentos en los que se percibe el riesgo.
La moneda común avanzó un 0,4% este año hasta los 1,0908 $ a las 8:01 a.m. en Londres ayer, mientras que el yen se fortaleció un 3% hasta los 116,71 por dólar. El euro ya está listo para recibir un impulso frente al dólar debido a la reducción de la diferencia de rendimiento de la deuda soberana alemana y estadounidense, según Ferridge de State Street.
Medidas basadas en el mercado
Otros indicadores revelan que el tipo de cambio efectivo de la moneda común se ha distanciado de la tasa del euro frente al dólar. Los precios de las opciones demuestran que los operadores son ahora más optimistas sobre la moneda común frente al dólar que en ningún otro momento desde 2013.
Valentin Marinov, jefe de investigación de divisas del G10 en el Bank Credit Agricole en Londres, dijo:
«El BCE tuvo que intervenir en el pasado en niveles del tipo de cambio efectivo similares al que nos encontramos actualmente».
Las autoridades de Japón se enfrentan a un problema parecido. El gobernador del Banco de Japón, Haruhiko Kuroda, dijo la semana pasada que las autoridades no dudarán en sumar estímulo si este es necesario. El banco central anunciará su siguiente decisión sobre política el 29 de enero.
Masahiko Shibayama, asesor del primer ministro japonés, Shinzo Abe, dijo el jueves que es «demasiado pronto» para tomar una decisión sobre la reacción del Banco de Japón ante los recientes movimientos de las acciones y las divisas. Haruhiko Kuroda dijo en el Parlamento que la economía se está recuperando y la tendencia del precio está mejorando, al mismo tiempo que reiteró que no dudará en actuar si fuera necesario.
«Daño real»
Derek Halpenny, jefe de investigación de mercados de Europa del Bank of Tokyo-Mitsubishi UFJ Ltd. con sede en Londres, escribió en una nota a sus clientes:
«Las condiciones actuales del mercado financiero están causando un verdadero daño a los intentos del Banco de Japón de levantar las presiones inflacionarias subyacentes. Es probable que la especulación sobre una flexibilización monetaria adicional aumente, pero bajo las circunstancias actuales pero en las actuales circunstancias resulta difícil imaginar qué acciones pueden tener un impacto significativo en revertir la caída del mercado de valores y la fortaleza del yen».
Los fondos de cobertura y otros grandes especuladores han adoptado posiciones largas en el yen por primera vez en tres años durante la primera semana de enero, y siguieron haciéndolo durante la semana pasada, según datos de la Commodity Futures Trading Commission.
Los administradores de dinero se guían por los pronósticos de que los responsables políticos llevarán el euro a un nivel más bajo. Salman Ahmed, jefe de estrategia de Lombard Odier Investment Managers en Londres, dijo:
«Los mercados están divididos entre la aversión general al riesgo y el euro como refugio seguro teniendo en cuenta que el origen de las turbulencias es China y los mercados emergentes, y la perspectiva de una mayor flexibilización del BCE. La dinámica del euro dependerá del tamaño y la naturaleza de cualquier estímulo del BCE y las decisiones paralelas de la Fed».