Según los datos oficiales que se han hecho públicos hoy, el fuerte consumo interno mantiene la economía de Alemania en el camino del crecimiento sostenido, aunque modesto a finales de año, a pesar de la debilidad de las exportaciones y los vientos en contra del crecimiento de la economía mundial.
Según los datos de la oficina de estadística de Alemania, el producto interior bruto de Alemania creció a una tasa intertrimestral del 0,3% durante el cuarto trimestre, al mismo ritmo que durante el trimestre anterior y cumpliendo los pronósticos de los economistas.
El crecimiento constante de Alemania durante el último trimestre de 2015 podría aliviar la preocupación de que la zona euro sufriera una desaceleración con la llegada del fin de año, después de que los datos de Francia, la segunda mayor economía de la unión monetaria, mostraran que su PIB solo había crecido un 0,2% durante los últimos 3 meses del año pasado, en comparación con el 0,3% del tercer trimestre. Los últimos datos de producción industrial de toda la zona euro también han sido débiles.
No obstante, las preocupaciones sobre las perspectivas de crecimiento mundial han aumentado desde el comienzo de este nuevo año, tal y como se puede apreciar en las turbulencias de los mercados financieros que han afectado a las acciones de Europa, Asia, y esta semana en particular, los bancos de Estados Unidos.
Se espera que el BCE intensifique sus esfuerzos para impulsar el crecimiento más rápido y alimentar la inflación en la unión monetaria cuando los funcionarios se reúnan de nuevo el próximo mes.