Aunque Tesla (NASDAQ: TSLA), Google (NASDAQ: GOOGL), Uber, y muchos otros se han unido a la carrera de las "tecnologías no tripuladas" y están compitiendo entre ellos, los clientes potenciales parecen no tener mucho interés en este tipo de tecnología.
Casi la mitad de las personas entrevistadas ha admitido sentirse preocupada por su seguridad y no quiere confiar su vida a un robot.
A algunas personas no les gusta esta tecnología porque simplemente disfrutan conduciendo mientras que otras tienen miedo de que los coches puedan ser hackeados. Y ciertamente, estos temores no carecen de fundamento, puesto que hace poco se hizo público un caso de un Tesla que había conseguido ser hackeado de forma remota.