La mayoría de los bancos están en contra de las criptomonedas, ya que según estos sufren una gran volatilidad y pueden ser utilizadas para el blanqueo de dinero. Sin embargo, la verdadera razón por la que se muestran tan reacios ante esta nueva tecnología es que se sienten amenazados.
El crecimiento de las criptomonedas ha superado todas las expectativas y, mientras que el concepto todavía es muy joven, posee un gran potencial para superar al anticuado sistema basado en dinero fiat. Por ejemplo, el tamaño total del mercado supera al del banco JPMorgan, mientras que la capitalización de mercado del bitcoin es comparable a la del Bank of China.