Las siguientes 20 empresas se han visto afectadas por la crisis de China y deben evitarse.
Skyworks Solutions afronta la mayor exposición de China, dice Goldman Sachs. Aunque es posible silenciar el impacto de una ralentización económica china en Estados Unidos, Goldman Sachs todavía aconseja a los inversores que se aparten de los activos chinos con una exposición significativa dado el retrasado rendimiento de este año hasta el momento.
«Las acciones de las empresas estadounidenses con actividad en China han mostrado un peor rendimiento en comparación con el S&P 500 en 750 puntos básicos (-8% frente al -1%) desde que el Índice MSCI de China llegó a su apogeo. Preferimos valores con elevadas ventas en el mercado de EE. UU.», ha dicho el analista David Kostin de Goldman Sachs en un informe.
Kostin ha advertido que las exposiciones de empresas en China son limitadas, 168 mil millones de ingresos provenientes del país, tan solo alrededor del 2% del total. No obstante, es posible que las empresas que obtienen una gran parte de sus ventas de China sigan teniendo problemas siguiendo los pasos de la agitación del mercado de valores chinos.
«Los analistas han recortado las estimaciones de EPS de empresas estadounidenses con una elevada exposición de ventas a China del 15% al año hasta actualizarlas al 8% para el S&P 500 total», ha dicho.
Las empresas IT dominan la lista Goldman Sachs de las 20 empresas más expuestas a China, con una exposición estimada del 83% de Skyworks Solutions (NASDAQ: SWKS), Wynn Resorts (NASDAQ: WYNN) seguido con el 70% y Qualcomm (NASDAQ: QCOM) fue la tercera con el 61%.
Los economistas de Goldman han estimado que un shock de 1 punto porcentual al crecimiento del producto nacional bruto chino tendrá como resultado una caída de 0,06 puntos porcentuales en Estados Unidos. El crecimiento del PIB es el último dato de Pekín que apunta a una ralentización económica continuada. Las exportaciones en julio bajaron un 8,3% interanual mientras que las importaciones bajaron un 8,1% el noveno mes en una serie de bajadas, resaltando las preocupaciones de que China no podrá confiar en las exportaciones para impulsar su economía. El PIB de China aumentó un 7% en el segundo trimestre, más allá de las expectativas, pero por debajo de los niveles a los que el país estaba acostumbrado.
El Shanghai Composite Index aumentó durante una segunda sesión el lunes para cerrar con un 4,9% hasta 3.928,42, mostrando signos de estabilidad después de una semana inestable.