Un año después, la mayor salida a Bolsa de la historia parece haber sido un tremendo error. Estas son las razones.
Jack Ma, el fundador de Alibaba, posee una receta simple para la felicidad: Concentrarse en sus amigos, no preocuparse demasiado por el dinero, y, lo más importante, no hacer una oferta pública de venta.
Si Ma hubiera seguido su propio consejo, todo sería diferente... Hace un año desde que Alibaba (NYSE: Alibaba Group Holding [BABA]) se lanzara en la Bolsa de Valores de Nueva York en la mayor salida a bolsa jamás vista. A pesar de un fuerte comienzo, las acciones han estado cayendo durante 2015.
En un momento dado, Alibaba tenía un valor de mercado mayor que Walmart y Amazon. Ahora, sus acciones han bajado un 45% desde su máximo del 15 de noviembre y están operando por debajo de su precio inicial de 68 dólares.
«Si tuviera otra vida, mantendría mi empresa privada», dijo Ma a principios de este año. «La vida es dura cuando haces una OPV».
¡Que se lo digan a los inversores! 1.000 dólares en acciones de Alibaba comprados a principios de 2015 tienen ahora un valor de 635 dólares. Esto es lo que tiene preocupados a los analistas:
1. La economía de China: Las acciones de Alibaba se han visto afectadas por las preocupaciones sobre la desaceleración económica y la volatilidad del mercado de valores de China. El comercio electrónico sigue siendo la actividad principal de Alibaba, y cualquier desaceleración en el gasto de los consumidores tendrá consecuencias para el crecimiento de la compañía.
2. Los otros chicos: Alibaba está haciendo frente a una mayor competencia, particularmente por parte de JD.com (JD), que está respaldado por el gigante chino de los móviles Tencent (TCEHY) y el príncipe saudí Alwaleed bin Talal.
3. Falsificaciones: Ma y sus colegas ejecutivos se han comprometido a acabar con los productos falsificados que se venden en varias plataformas de Alibaba. Pero es posible que no se muevan lo suficientemente rápido: Gucci ha demandado a la compañía (dos veces). Y a principios de 2015, incluso los reguladores chinos le pidieron a Alibaba que iniciara acciones contra las falsificaciones.
4. Grandes gastos: Alibaba ha estado gastando mucho, invirtiendo dinero en adquisiciones y asociaciones. Algunas de las inversiones están dando sus frutos. Otras... no tanto. ¿Necesita Alibaba una participación en un equipo de fútbol o un estudio de entretenimiento con problemas? Los inversores preferirían ver a Ma centrado en su negocio principal.
5. Gobierno corporativo: Alibaba decidió vender sus acciones en EE. UU. en lugar de en Hong Kong porque la Bolsa de la ciudad estaba preocupada por el verdadero control que Ma y otros socios tienen sobre la dirección de la empresa. Desde su salida a Bolsa, la empresa no ha hecho mucho para hacer frente a esas preocupaciones.
Es poco probable que se relaje el escrutinio intenso de los inversores y analistas de Wall Street. Sin embargo, Alibaba siempre habla de paciencia: los ejecutivos de la compañía afirman con frecuencia que Alibaba es «cliente en primer lugar, empleado en segundo y accionista en tercero».
Hay un montón de otras razones para ser optimistas: Alibaba ostenta una posición dominante en uno de los mercados más lucrativos del mundo. ¿En cuanto a Ma? Sigue siendo uno de los hombres más ricos del mundo, aunque no quiera serlo.
«La gente dice, “Bueno Jack, ser rico es bueno.” Sí, es bueno, pero no ser el hombre más rico de China. Es un gran dolor porque cuando eres la persona más rica del mundo, todo el mundo se acerca a tu lado por el dinero», dijo a la CNBC en noviembre.