4 razones para creer en el mercado de valores
Página principal Finanzas, Mercado de EE. UU., Educación para trading

El autor del popular blog de finanzas Money Beagle ha enumerado cuatro razones por las que hay que ignorar a los predicadores sobre el fin del mundo en el mercado de valores de Estados Unidos.

El mercado de valores no ha sido bonito últimamente. Los tres principales índices estadounidenses están en la zona de corrección o han bajado en algún momento reciente a ella, lo que se toma como un 10% de bajada. Los toros que dirigían el mercado de valores a más del doble durante los pasados años se han tomado una pausa y ahora los osos se han alegrado mucho por introducirse y, por fin, tener razón. Sin embargo, considero que hay algunos que están equivocados.

¿Estamos de nuevo ante 2008-2009?

Hay muchos por ahí que le dirán muy felizmente que el mercado de valores está encaminado a otro desplome como el de 2008-2009, momento en el que los mercados perdieron la mitad de su valor en un periodo de 18 meses:

  • Afirman que la Reserva Federal (Fed) estadounidense apoyó artificialmente los precios durante los últimos años y que su efecto se ha terminado y ahora vamos a volver a aquellos niveles (y algunos afirman que a niveles más bajos).
  • ¡Afirman que la economía mundial está tan mal que el mundo va a explotar y a arder cualquier día!
  • ¡Afirman que todo es una burbuja y todo va a estallar!

Respecto a todo esto y a cualquier tesis relacionada con un derrumbe inminente del mercado, soy muy escéptico. Déjenme explicar por qué.

Les presento cuatro razones de por qué no pienso que el mercado esté encaminado a derrumbarse.

1. No existen señales de una crisis de hipotecas en el horizonte

¿Recuerdan a principios de la década de 2000 cuando los precios en casi todos los barrios estaban desorbitados? ¿10% de aumento en valores al año? Sin problema. La gente podría comprarse una casa y sentirse cómoda con haber sacado partido en tan solo unos pocos meses. Sin embargo, ahora todos sabemos que todo esto estaba construido sobre un castillo de naipes causado por banqueros que concedían préstamos que nunca deberían haber dado.

Eche un vistazo a su alrededor ahora. Aunque los precios de la vivienda se han recuperado mucho, el volumen no alcanza esos niveles. Hay muchas menos casas que se venden. Esto es bueno. Significa que realmente hay personas que compran y venden porque lo necesitan, lo que elimina gran parte de la especulación que condujo a la previa subida y caída. Aunque sigue habiendo especuladores, la práctica es mucho menos común y uno tiene que saber realmente lo que está haciendo para que funcione.

En otras palabras, este es un mercado de viviendas bastante normal que tiene una base sólida y aunque los precios pueden nivelarse o incluso disminuir, el derrumbe de los precios y el pico en ejecuciones parece un riesgo muy bajo.

2. Los bancos no están construidos en una base fangosa

¿Recuerda las imágenes de Lehman Brothers cerrando? Gente que salía llevando cajas. Un edificio gigante de repente sin propósito. Una empresa que había tratado y gestionado billones de dólares y había estado en el negocio más de un siglo, de repente... ¿desaparecida? Todos vimos las imágenes y llegaron a casa. El hecho es que, a pesar de que Lehman fue la única víctima principal de los bancos gigantes, podría haber ido más allá.

Por suerte no fue así. Cuando todo esto sacudió, resulta que muy pocos bancos estaban en muy buena forma. Muchos estaban tan consumidos con el lío de las viviendas que podría haberse tambaleado todo. Lehman no tuvo la suficiente suerte como tener otra oportunidad, pero muchos sí.

Y los resultados lo demuestran hoy. Los bancos han de pasar de manera rutinaria tests de estrés en los que ocurre un simulado desastre económico y los bancos han de mostrar que tienen la liquidez y la fuerza financiera para controlar las tormentas. Cuando comenzaron los tests de estrés, muy pocos bancos aprobaban. Hoy en día, la mayoría de los principales bancos han mostrado fuerza y pasan de manera rutinaria las pruebas de estrés.

¿Tienen garantía todos los bancos de sobrevivir a un posible evento económico? Por supuesto que no. Sin embargo, la industria como conjunto es ahora mucho más fuerte y no está en riesgo de derrumbarse en cualquier momento.

3. Las cifras de desempleo son sólidas

Un argumento que emplean los mega osos es apuntar que la recuperación económica está ralentizándose. Esto es cierto, pero si lo comparamos con unos pocos años atrás, ¿supone esto realmente una sorpresa? Estábamos saliendo de la mayor catástrofe económica sucedida en 80 años, así que cuando las cosas comenzaron a ir en la dirección correcta, no fue ninguna sorpresa el que las cosas comenzaran a recuperarse rápidamente.

El desempleo se sitúa solo al 5% hoy en día. Es la tasa más baja en años y mientras que descienden las ganancias del desempleo, creo que es por lo que muestran los números, que mucha gente tiene trabajo.

Mucha gente estará en contra de este argumento diciendo que las cifras de desempleo son falsas, porque mucha gente sencillamente ha abandonado el mercado laboral. No puedo probar que esto sea falso, pero para mí, solo por pruebas empíricas, está bastante claro que más gente esté volviendo al trabajo estos días. No veo las publicaciones en Facebook de personas sentadas en casa que buscan un empleo. Recibo alertas automáticas sobre empleos en mi zona para mi profesión y veo que la cifra de oportunidades está creciendo en número. Sencillamente no veo que las cifras de desempleo sean una razón para predecir un derrumbe.

Para colmo, también creo que el hecho de que el desempleo haya crecido lenta y constantemente durante los últimos años es una razón de fortaleza ahora mismo. Muchas recuperaciones del pasado vieron crecer muy rápidamente las cifras de empleados tras una recesión, solo para ver que las grandes ganancias se deshacían a la primera señal de problemas. Creo en nuestra economía actual, los empleadores han añadido trabajos pues realmente se necesitan y el riesgo de que estos relajen las contrataciones de unos pocos años pasados es bajo.

4. No nos dirigen otros países (a pesar de que podrían llevar escopetas)

Pero... pero... China... y... Grecia... si, ellos caen, nosotros caemos.

¿No es esto lo que los sembradores del miedo han estado predicando durante el pasado año? Cada vez que China o Grecia se ralentiza, el mercado entra en modo pánico y los osos se dan una palmada en la espalda de satisfacción.

Da lo mismo.

Lo cierto es que aunque tenemos una economía donde los asuntos de otros países van a tener impacto en nosotros desde una perspectiva financiera, nosotros seguimos manejando nuestra propia economía.

¿Analizamos esto? La última vez que hubo turbulencias en Grecia, ¡el mercado de valores perdió más valor que todo el PIB anual de Grecia! De nuevo, entiendo que la situación no es para reírse, pero a veces se pierde la perspectiva y aquellos que quieren ver un pájaro de mal agüero se aferrarán a cualquier pequeña noticia y harán parecer como que el país va a caerse a lo más profundo del océano y cesará toda la actividad económica.

Grecia, China y otros países, todos, van a tener problemas. ¿Van a tener impacto en nosotros? Seguro. Pero, ¿van a dinamitar nuestra economía?

Probablemente no.

Así que, ¿qué significa todo esto?

¿Estoy aquí para decirles que el mercado de valores no debería haber caído? No. ¿Estoy aquí para decirles que no caerá de nuevo? No. De hecho, puede que esté completamente equivocado sobre todo lo que he dicho. Puede ser que el mercado se derrumbe.

Pero yo no creo que esto suceda. Yo mantengo a mi cartera alineada con esa opinión (y esto es todo).

No veo que los toros lo consigan a corto plazo. ¿Alcanzará el Dow los 20.000 este año? Probablemente no (¡aunque estaría bien!). Pero, ¿va a caer por debajo de los 10.000 como muchos parecen pronosticar? Yo no veo que eso vaya a suceder.

Creo que va a haber mucha volatilidad. Creo que ahora esto está más causado porque el mercado siente miedo y trata de deshacerse de las manos débiles. Desafortunadamente, si esto es cierto, mucha gente ya no va a estar, sufriendo pérdidas y entonces se perderá de nuevo en el lado alcista.

Esto es lo que a los peces gordos de Wall Street les encanta hacer con los inversores minoristas.

Así que antes de que realicen un gran movimiento en el mercado, sea cual sea, asegúrense de mirar hacia atrás, sea quien sea quien le esté diciendo que las cosas van a caer (o subir) y asegúrense de que entienden por ustedes mismos las cosas que están sucediendo y de que tienen su propia creencia en la fase siguiente.

Pueden tener razón o no, pero al menos no estará creyendo en nadie más. Porque, asumámoslo, todos esos «alguien más» no tienen los mejores intereses en mente para su dinero a pesar de lo que digan.

Fuente: Money Beagle

Lea también:
Por favor, describa el error
Cerrar