¿Qué se puede aprender de una de las películas más importantes del año 2015? Aquí presentamos cuatro lecciones que cualquier futuro inversor debería tener en cuenta.
Es razonable preguntarse qué podría enseñarle sobre inversión a la gente ordinaria una película sobre la crisis inmobiliaria y el consiguiente colapso financiero. Pero en La gran apuesta pueden encontrarse perlas de sabiduría relacionadas con la inversión en valores. También puedes ver a Margot Robbie en una bañera, de modo que hay algo para todos.
La película está ambientada en la primera década del año 2000, y sigue los acontecimientos y personajes implicados en la burbuja del mercado inmobiliario (Alerta de Spoiler: la burbuja explota). Todos los personajes eran clarividentes, vieron que el mercado inmobiliario estaba decididamente sobrevalorado, y se dieron cuenta de que saldrían ganando si vendían en corto. Casi todos los personajes de la película, así como sus homólogos en la vida real, obtuvieron unos beneficios enormes gracias a esto.
Mientras que la película se centra en los gestores de fondos de cobertura, corredores de bolsa de alto nivel, y vendedores de bonos —ni mucho menos el típico grupo del que se puede aprender algo acerca de inversión personal—, hay verdades en el largometraje que se extienden a los inversores de todos los niveles.
1. El mercado no siempre tiene sentido
“Los mercados pueden seguir siendo irracionales más tiempo del que puedes seguir siendo solvente”.
–John Maynard Keynes
La cita de Keynes ilustra una verdad de la película, aunque no es evidente de forma directa si no pensamos un poco un ello. Parte del problema a la hora de seguir a un tipo de gente en la película, es que todos ellos se encontraron en situaciones en las que tenían millones de dólares a su disposición.
En ciertos momentos, los personajes habían perdido casi un 40%, y estaban contemplando si cerrar o no sus posiciones. Pero de lo que todos estaban seguros era del inminente estallido, de modo que al final aguantaron hasta que llegó el día de pago masivo. ¿Qué hubiera ocurrido si la burbuja hubiera tardado más en estallar? ¿Cuánto tiempo habrían resistido? ¿Qué número de pérdidas estaban dispuestos a tolerar? Si vas a invertir para tu propio bienestar financiero, y no tienes millones de dólares en reserva, no importa lo seguro que estés en cuanto a si un producto básico está adquiriendo valor, puede que en realidad no sea así.
La cita de Keynes también ilustra esto muy bien. Es posible que lleves toda la razón en algo, pero el mercado no funcionará bajo tu vigilancia. Si no te das suficiente tiempo y apalancamiento, podría ser desastroso para ti en términos financieros.
2. Investiga sobre el terreno lejos de tu mesa de trabajo
Una cosa que querrás emular de los personajes de la película es su entrega a la investigación, con independencia de sus trabajos.
Para tener una idea real de lo afectado que estaba el mercado inmobiliario, varios personajes hicieron un viaje a los suburbios de Florida para conocer el estado de la situación en primera línea.
Sin entrar en los detalles de su viaje en la película (aunque podríamos hablar un día entero de Steve Carell dando asesoramiento financiero a una bailarina de stripteases), este es el tipo de dedicación a la investigación que todos los inversores deberían emplear.
Obviamente, cada inversión debería considerarse e investigarse con detenimiento. Sin embargo, algo que se ha perdido en muchos inversores modernos es que esta investigación puede y debería tener lugar fuera de la oficina. Puede que no requiera un viaje a Florida, pero si pretendes invertir en un nuevo sector, ve y habla con las personas que trabajan en ese campo. Hay mucho que aprender de este tipo de investigación, y cualquier mínimo de conocimiento que puedas obtener te ayudará como inversor.
Una de las ventajas que tiene el inversor moderno es que ahora es el mejor momento para investigar fuera de tu mesa de trabajo. Hacer un viaje siempre será una buena idea, pero una vez que te hayas abierto camino en el mundo, hay servicios, como CityFALCON, que te permitirán seguir la información como nunca antes.
3. Mantén tu posición mientras la historia/hipótesis fundamental no cambie
Si bien es importante conocer tus límites, otra lección de la película es mantener una posición siempre que la hipótesis fundamental no cambie. La paciencia puede ser el recurso más valioso para un inversor de valores.
En la película, casi todo el mundo pensaba que los personajes estaban locos por apostar contra el mercado inmobiliario. Cuando empezaron a tener pérdidas, esos detractores lo tomaron como una señal de que estaban en lo correcto, y que estos eran casos atípicos que estaban a punto de perder una gran cantidad de dinero.
Pero los personajes principales de la película, y la gente de la vida real en quienes están basados, estaban en lo cierto, y aguantaron a pesar de tener pérdidas. Para los inversores de valores, este principio parece verdad en cualquier circunstancia. Recuerda por qué invertiste en primer lugar, y si nada hubiera cambiado tu hipótesis original, deberías esperar hasta tener más información.
4. Pocos "expertos" saben realmente lo que está pasando en el mercado
En la vida real – así como en la película – muchos representantes consumados de Wall Street daban discursos sobre la estabilidad del mercado de la vivienda. Estas personas eran muy respetadas y ganaban grandes cantidades de dinero como expertos de mercado. Y mira cómo terminó eso.
No importa cuán profundamente respetados o astutos sean estos “expertos”, o lo bien que les paguen, puede que no tengan ni idea acerca de lo que está pasando en el mercado. Incluso las personas que predijeron la crisis financiera de 2008 han cometido errores garrafales desde entonces.
Puede ser tentador escuchar a una persona que confirma totalmente tus ideas, e igual de tentador desestimar a alguien que tiene puntos de vista opuestos. El mercado es complicado, caprichoso e incontrolable. Estos factores hacen que sea casi imposible "saber" con certeza lo que está sucediendo en un momento dado, aunque después de los hechos todo parece muy obvio.
Es importante tener esto en cuenta cuando vayas a hacer cualquier tipo de inversión; casi nadie sabe lo que está pasando realmente.