El anuncio de las pésimas ganancias de Apple demuestra que necesita con urgencia reconsiderar su modelo de innovación y liderazgo.
La última innovación importante de Apple Inc. (NASDAQ: Apple [AAPL]) fue el iPhone - que salió a la venta en 2007. Desde entonces, Apple ha estado únicamente ajustando sus componentes, añadiendo procesadores más rápidos y sensores más avanzados así como jugando con su tamaño – desde el más grande, el iPad, al más pequeño, el Apple Watch.
Tim Cook, el director de Apple, es probablemente uno de los ejecutivos de operaciones más competentes de la industria, pero está claro que no es un visionario de la tecnología. Apple necesita otro Steve Jobs para reinventarse a sí mismo; de lo contrario, se unirá a las filas de HP y Compaq.
Steve Jobs puede ser Elon Musk - que ha demostrado ser el mayor visionario de nuestra época.
En el mismo período en que Apple puso a la venta el iPhone y sus sucesores, Musk desarrolló dos generaciones de vehículos eléctricos que están cambiando el mundo, perfeccionó una nueva generación de tecnologías de baterías y dio a conocer las capacidades de la conducción autónoma de primera generación. Y esto solo fue en Tesla Motors Inc (NASDAQ: Tesla Motors [TSLA]).
En su otra compañía, SpaceX, Musk creó una nave espacial- que acopló con la Estación Espacial Internacional y regresó con carga. Lanzó dos cohetes al espacio que han realizado aterrizajes verticales en la Tierra - uno en un helipuerto y otro en un barco en el océano.
Musk también está desarrollando el Hyperloop, un sistema de transporte de alta velocidad en el que las cápsulas presurizadas son impulsadas por motores de inducción lineales y compresores de aire. A Musk le gusta decir que su ambición era construir una estación espacial y jubilarse en Marte. No estaba bromeando, perfectamente podría hacerlo.
Al parecer, Apple ha estado creando un vehículo eléctrico y cabe suponer que presentará algo así en los próximos cinco a diez años.
Sin embargo, Tesla ya cuenta con esta tecnología - y es increíble. El Tesla Model S se parece a una nave espacial que circula por el suelo. Incluso puede que sea mejor que cualquier producto que ofrece Apple - porque es más complejo, elegante y está mejor diseñado.
Apple debería comprar Tesla y nombrar a Elon Musk su director ejecutivo.
¿Musk estaría interesado en ser parte de Apple cuando Tesla está en la cima del mundo? Tesla acaba de recibir cerca de 20 mil millones de dólares de las reservas para su Model 3 - un récord para cualquier producto en la historia. Parece ser que en 2013 Musk rechazó una oferta de compra de Google, cuando estaba al borde de la quiebra. ¿Por qué consideraría ahora una oferta de Apple?
Es probable que lo hiciera - si se le ofreciera el cargo de jefe ejecutivo.
La combinación de un ejecutivo de operaciones como Cook y un visionario como Musk sería extraordinaria. La gran cantidad de recursos de Apple permitiría a Tesla ampliar sus operaciones para entregar los casi 400.000 pedidos que ha recibido para el Model 3. Tesla sería capaz de aprovechar la red de distribución global de Apple e incorporar muchas tecnologías nuevas. Musk podría lograr sus proyectos soñados, mientras Cook se preocupa por las entregas y los detalles.
Así, Cook obtendría al visionario que Apple necesita con urgencia y los mercados se regocijarían y llevarían las acciones de Apple a su nivel más alto.
Cabe destacar que la capitalización bursátil de Tesla de 33 mil millones de dólares es sumamente asequible para Apple, que tiene reservas de más de 200 mil millones de dólares. Tras el anuncio de sus ganancias el pasado martes, Apple perdió 47 mil millones de dólares en la valoración, que es más de lo que probablemente le costaría adquirir Tesla.
Esta podría ser una unión perfecta. Conseguiríamos innovaciones que cambiarían el mundo además de nuestras colonias en el espacio.