La marca de ropa de atletismo va a desarrollar una nueva línea de ropa deportiva.
Under Armour (NYSE: AU) es más conocida por sus famosas prendas de vestir deportivas y, más recientemente, por su floreciente negocio de calzado. Pero en un reciente comunicado de prensa, Under Armour ha revelado que pronto entrará en otro mercado lucrativo: el de la ropa deportiva.
Más concretamente, Under Armour ha anunciado la contratación del diseñador de moda Tim Coppens como director creativo ejecutivo de UAS, o Under Armour Sportswear, una nueva marca que opera bajo la bandera de Under Armour. Coppens ha trabajado anteriormente en Ralph Lauren y Adidas, y más recientemente ha recibido la alabanza del público por la colección de moda que lleva su propio nombre. Ahora se encargará de supervisar la dirección creativa de la marca UAS de Under Armour cuando esta sea lanzada en otoño de este año.
Según la nota de prensa de Under Armour, la etiqueta UAS contará con "ropa deportiva de moda" y está "diseñada para aprovechar la oportunidad existente de una colección que va más allá de las comodidades de la ropa deportiva casual y la funcionalidad de la ropa deportiva innovadora". Coppens ha explicado:
"La gente desea algo nuevo, una nueva versión de una marca de ropa deportiva estadounidense que permita a los ambiciosos llegar más lejos, más rápido y más fuertes con un producto intuitivo y un estilo moderno. Under Armour se encuentra en una posición privilegiada para asumir la tarea de definir este espacio con una auténtica marca innovadora lista para entrar en el mercado de estilo de vida".
La incursión de Under Armour en el mercado de la ropa deportiva no es del todo una sorpresa. De hecho, Under Armour hizo referencia a sus planes para acceder a esta categoría en su reunión de inversores de 2015 en septiembre pasado. En ese momento, el director de comercialización, Henry Stafford, destacó que sus dos principales competidores, Nike (NYSE: Nike [NKE]) y Adidas (NYSE: Alliance Data Systems Corporation [ADS]) consiguen alrededor del 25% de su facturación mundial en ropa deportiva, lo que equivale a aproximadamente 12.500 millones de dólares en ventas anuales.
El director ejecutivo, Kevin Plank, dio más pistas sobre el rumbo de la empresa en la conferencia del mes siguiente al decir: "A día de hoy, nuestro compromiso con este mercado es cero".
Por supuesto, eso también significa que los inversores tendrán que ser pacientes mientras Under Armour construye este nuevo negocio desde cero. Plank también declaró durante la conferencia que la "ropa deportiva no es una parte importante de los planes" para duplicar los ingresos anuales a hasta 7.500 millones de $ para el año 2018.
Para ello, los inversores tendrán que confiar en un combinación del continuo crecimiento interno de Under Armour, el aumento gradual de la expansión internacional y las crecientes contribuciones de sus nuevas iniciativas Connected Fitness.
Si usted se está preguntando si Under Armour será capaz de vencer a su competencia, tenga en cuenta que no sería la primera vez que Under Armour se introduce en un mercado bien establecido. De hecho la empresa hizo su debut en el sector del calzado con su primera línea de zapatillas de fútbol en 2006. Ya en el último trimestre los ingresos provenientes del calzado aumentaron un 64% respecto al año anterior, hasta alcanzar los 264 millones de $, lo que representa algo más del 25% de las ventas totales, impulsadas tanto por su oferta de zapatillas de running como por el éxito continuo de su línea de baloncesto del jugador Curry. Por el contrario, Nike amasó 5.100 millones de $ en ingresos por calzado en el último trimestre, lo que representa un 63% de sus ventas trimestrales totales.
Sin embargo, de momento Under Armour no va a revelar imágenes ni precios para su nueva línea UAS. Pero sí ha confirmado que incluirá ropa para hombres y mujeres, calzado y accesorios, y que la distribución inicial al por menor se llevará a cabo a través de UASportswear.com, tiendas selectas de moda y las tiendas Under Armour de Chicago y Nueva York.
A fin de cuentas, los accionistas deberían estar emocionados por las perspectivas que UAS ofrece. Si Under Armour es capaz de trasladar el éxito que ha cosechado en otros mercados para ganar una cuota significativa en este nuevo segmento de billones de dólares, los inversores deben comprar acciones de la empresa y mantenerlas al a espera de que este crecimiento se materialice.