Este jueves, cuando PepsiCo publique sus resultados del segundo trimestre, los inversores obtendrán nuevas pistas de cómo la volatilidad económica está afectando a las empresas globales.
El gigante estadounidense de aperitivos y bebidas PepsiCo (NYSE: Pepsico [PEP]) realiza casi la mitad de sus ventas en el exterior. Cuenta con una gran presencia desde el Reino Unido hasta Rusia y Brasil. Todos consumimos sus patatas fritas, refrescos y zumos a diario, lo que refleja claramente la confianza del consumidor en esta marca.
Hasta ahora PepsiCo ha sido capaz de capear el temporal en el extranjero gracias a la reducción de costes, al aumento de los precios e impulsando su negocio en EE. UU. En los informes de resultados del segundo trimestre de 2014 y 2015, la empresa aumentó su pronóstico anual de ganancias.
Sin embargo, no está claro si la empresa va a volver a revisar su previsión de beneficios al alza después de que el Reino Unido haya votado a favor de abandonar la Unión Europea, hecho que ha avivado los temores de una recesión mundial
Jack Russo, analista de bienes de consumo en Edward Jones, dijo:
"Creo que en esta ocasión no lo hará debido a la incertidumbre que reina en todo el mundo''.
La semana pasada Morgan Stanley pronosticó que existen un 40% de posibilidades de que se dé una recesión global durante el próximo año, lo que supone un aumento del 10% con respecto a su pronóstico del año pasado.
Se espera que el S&P 500 informe de una caída del 5,2% en las ganancias del segundo trimestre en comparación con el año anterior, lo que supone el quinto trimestre consecutivo de contracción las ganancias, según cree FactSet.
Según un sondeo de Thomson Reuters, se espera que PepsiCo informe de unas ganancias trimestrales por acción de 1,29 $; una cifra que se encuentra por debajo de los 1,32 $ del mismo trimestre del año anterior. Se espera una caía de los ingresos del 3,4% hasta alcanzar los 15.370 millones de $ provocado por el debilitamiento de las divisas extranjeras.
El fabricante de las patatas fritas Lay’s y de la Pepsi-Cola se ha negado a pronunciarse antes de la publicación del informe. En el informe de ganancias de abril, el presidente ejecutivo, Indra Nooyi, advirtió de un "entorno difícil '' a nivel mundial y de "una volatilidad e incertidumbre constante''.
Durante el primer trimestre PepsiCo se ha enfrentado a un cargo por deterioro de 373 millones de dólares en su empresa conjunta de bebidas china. Muchos economistas esperan que el crecimiento del segundo trimestre de China esté por debajo del 6,7% interanual durante el primer trimestre, lo que supone su ritmo trimestral más lento desde la crisis financiera mundial de 2008.
PepsiCo también estima que Venezuela tendrá un impacto negativo del 2% sobre las ganancias de este año después de haber debitado un cargo por deterioro y unas operaciones desconsolidadas por valor de 1.360 millones de $.
Sin embargo, todos esos cálculos fueron hechos antes de referéndum del 23 de junio en el que Reino Unido decidió abandonar la UE. Con el 3% de las ventas de la compañía y un crecimiento de solo un dígito el año pasado, el Reino Unido es el quinto mayor mercado de PepsiCo. Sin embargo, los economistas advierten que la quinta economía más grande del mundo enfrenta a los riesgos gemelos de la recesión y la inflación, que podrían causar un efecto dominó. El Fondo Monetario Internacional advirtió la semana pasada que podría rebajar la previsión de crecimiento de Alemania.
No solo Europa está nerviosa. El presidente del Banco Central de Brasil, Ilan Goldfjan, dijo la semana pasada que el Brexit podría perjudicar a la economía de su país, que ya se espera que se contraiga un 3,3% este año. Brasil es el sexto mercado más grande de PepsiCo y genera 2% de sus ingresos. Las empresas han estado esperando un aumento en las ventas del país anfitrión de los Juegos Olímpicos en agosto.
PepsiCo también está expuesta a la debilitada economía de Rusia, su mayor mercado después de EE. UU. y México. El banco central de Rusia recortó los tipos de interés el mes pasado por primera vez en casi un año, lo que alimentó las esperanzas de que la economía del país vuelva a crecer el próximo año.
La volatilidad internacional aumenta la presión para que PepsiCo crezca más en EE. UU., que generó el 56% de sus ingresos en 2015. El gasto personal en EE. UU. subió un 0,4% en mayo respecto al mes anterior después de haber dado un salto del 1,1% en abril, el mayor aumento en casi siete años.
La unidad de snacks de PepsiCo en EE. UU. tuvo su mejor rendimiento en más de un año en EE. UU. en las cuatro semanas que terminaron el 18 de junio, registrando un aumento en las ventas del 5,9% respecto al mismo lapso del año anterior, según Wells Fargo, citando datos de Nielsen.
Las ventas de gaseosas de PepsiCo se contrajeron un 3,4% en las 12 semanas que terminaron el 18 de junio, una caída peor al 2,2% en toda la industria. Sin embargo, las ventas de agua embotellada, bebidas deportivas y té registraron un crecimiento saludable.
Gran parte de la desaceleración ha estado ligada a Diet Pepsi, cuya caída de ventas se agravó cuando la compañía cambió sus edulcorantes artificiales en agosto pasado. La semana pasada, PepsiCo dijo que volverá a usar su vieja receta, pero no antes de septiembre.
PepsiCo estimó a principios de este año que las monedas extranjeras más débiles tendrían un impacto negativo de cuatro puntos porcentuales en los resultados de 2016, un impacto negativo inferior al 11% del año pasado.