Sony y AMD ofrecen a los inversores una forma barata acceder a un sector emergente con un futuro muy prometedor.
La realidad virtual es una de las tendencias más interesantes en el mundo de la tecnología. Esta industria no ha hecho más que nacer, pero hay unas cuantas empresas que ya están tomando posiciones para aprovechar la creciente demanda de cascos y contenido de realidad virtual. Facebook (NASDAQ: Facebook [FB]) y NVIDIA (NASDAQ: NVIDIA Corporation [NVDA]) son unas buenas opciones, y por buenas razones: Ambas empresas podrían desempeñar un papel importante en el sector de la realidad virtual.
Pero, por desgracia, estas acciones son caras, puede que Facebook incluso demasiado. Por el contrario, los inversores que buscan una ganga podrían considerar comprar acciones de AMD (NASDAQ: Advanced Micro Devices [AMD]) o Sony (NYSE: Sony Corp Ord [SNE]).
La única otra opción
Si desea utilizar un casco de realidad virtual de calidad como el Oculus Rift de Facebook o Vive de HTC, necesitará un ordenador equipado con una tarjeta gráfica potente. En este momento, solo hay dos empresas que vendan este tipo de tarjetas, y AMD (NASDAQ: Advanced Micro Devices [AMD]) es una de ellas. Esto brinda a la empresa la oportunidad de aumentar sustancialmente su negocio de tarjetas gráficas durante los próximos meses y años.
La participación de AMD en el mercado de las tarjetas gráficas es inferior a la del líder del sector, NVIDIA. Durante el primer trimestre del año, AMD tan solo ha captado un 22,8% del mercado en comparación con el 77,2% de NVIDIA, según Jon Peddie Research. Pero AMD tiene la oportunidad de recuperar cuota de mercado a través del segmento de las tarjetas gráficas de gama baja.
La tarjeta AMD Radeon RX 480 ha recibido unas críticas bastante buenas desde que saliera a la venta a finales del mes pasado. Esta tarjeta gráfica es capaz de funcionar con los cascos de realidad virtual actuales con un precio de tan solo 199 $. Este precio la convierte en la tarjeta más barata del mercado con capacidad para conectar un casco de realidad virtual, compitiendo con la GTX 1060 de NVIDIA, que es un 25% más cara.
AMD también podría beneficiarse de la próxima PlayStation VR de Sony. El dispositivo de realidad virtual del gigante japonés de los videojuegos se conecta a la PlayStation 4 en vez de al ordenador. Los jugadores que quieran utilizar el casco de Sony no tendrán que comprar tarjetas gráficas potentes; tan solo necesitarán sus consolas. AMD fabrica los chips de la PlayStation 4, por lo que un aumento de la demanda de la consola podría traducirse en ingresos extras para la empresa.
Desde una perspectiva de valoración, AMD es barata. Es cierto que no es rentable, y después de subir más de un 45% durante las últimas cinco semanas, no es tan barata como hace un mes. Sin embargo, la relación entre su valor y los ingresos es de alrededor de 1,7, significativamente menor que la de Facebook o NVIDIA. Su relación precio/beneficio es igualmente modesto, situándose en 1,4.
Una nueva forma de jugar
La mayor demanda de la PlayStation 4 podría beneficiar a AMD, pero puesto que Sony (NYSE: Sony Corp Ord [SNE]) es el fabricante de la consola, sería esta la mayor beneficiada. Hasta la fecha, la PlayStation 4 ha vendido más de 40 millones de unidades, y eso ha ayudado a Sony a recompensar a los accionistas. Las acciones de Sony han subido más de un 23% hasta la fecha, superando el rendimiento medio del mercado.
En su año fiscal que terminó el 31 de marzo, el negocio de los videojuegos de Sony generó menos del 19% de sus ingresos, pero casi un tercio de sus ingresos de explotación. Si los pronósticos de Sony son precisos, generará un 45% de ingresos de explotación durante este año fiscal.
PlayStation VR empezará a venderse al por menor el 13 de octubre. Funcionará con la PlayStation 4, por lo que es posible que algunos jugadores se animen a comprar la consola para disfrutar del nuevo casco de realidad virtual. Aunque Sony todavía no ha hecho pública la noticia, sí ha confirmado que tiene la intención de lanzar una versión mejorada de la PlayStation 4 en algún momento en el futuro cercano. La experiencia de realidad virtual podría ser mucho mejor con esa nueva consola que con la PlayStation actual.
Con un precio de 399 $, PlayStation VR es caro, pero es más barato que otros productos de la competencia (Oculus Rift de Facebook tiene un precio de 599 $). Por sí misma, la PlayStation 4 es más barata que un ordenador potente con una tarjeta gráfica capaz de funcionar con cascos de realidad virtual, y es más fácil de configurar y utilizar. Por otra parte, Sony cuenta con varios estudios de videojuegos y asociaciones que pueden ayudarle a crear contenido de alta calidad para su casco.
Con una relación precio-beneficio de cerca de 32, Sony no es demasiado barata, pero es más barata que otras empresas. Por ejemplo, es más barata que AMD.
Por supuesto, Sony es una empresa compleja con muchos otros segmentos, pero si tenemos en cuenta que los videojuegos representan una parte cada vez mayor de los beneficios de Sony, la realidad virtual podría impulsar las acciones de la empresa en los años venideros.