Tutorial sobre inversión para los que aún no han cumplido los 30

Mientras se es joven, se pueden correr riesgos, pero ¿merece la pena? Estos son algunos consejos para aquellos que quieren aumentar su capital.

Si le pregunta al inversor promedio con años de experiencia sobre cómo de bien le fue invirtiendo hasta los 30 años, la mayoría de ellos probablemente diría: “No muy bien”. Eso se debe a que la percepción es muy diferente cuando tienes esa edad. No sólo piensa que va a vivir para siempre, sino que también desea dinero en el momento para las necesidades y deseos inmediatos. La mayoría de los veinteañeros no piensan en los gastos futuros y la jubilación. Afortunadamente, hay maneras de generar dinero relativamente rápido, y al mismo tiempo ahorrar para nuestros gastos futuros y jubilación.

Desde el estallido la burbuja puntocom, hemos vivido en un entorno económico altamente volátil. Mucha gente no se da cuenta de que la burbuja puntocom de 2000 – un período donde muchas empresas de Internet no generaron ningún beneficio – jugó un papel importante en el auge y caída de la economía de hoy de EE. UU.

En pocas palabras, el colapso de la industria de Internet, combinado con los efectos económicos del 11-S, condujo a las entonces históricamente bajas tasas de interés. Esto, a su vez, dio lugar a la burbuja inmobiliaria. Esa burbuja estalló varios años más tarde, pronto seguido por el mercado de valores. ¿El resultado final? Nuevos tipos de interés históricamente bajos.

Esto ha llevado a lo que podría ser la mayor burbuja de la bolsa a lo largo de la historia. Cuando las tasas de interés son bajas, los costes de préstamos son baratos, lo que da lugar a un crecimiento alimentado por la deuda. Pero sin suficiente demanda en la mayoría de las industrias, debido a la falta de crecimiento de los salarios, esto no es sostenible. Con el tiempo, las tasas de interés aumentarán, lo que hará que esas deudas sean más caras.

Esto interrumpirá el flujo de caja asignado para el crecimiento debido a los pagos de deuda necesarios. Y así comienza el círculo vicioso. Esto podría conducir a un colapso en las acciones de alrededor del 50%. Puede leer y escuchar a todos los economistas y expertos que desee acerca de mantener el rumbo, pero un recorte del 50% en su cartera va a tardar años en recuperarse, si no más.

Da miedo, ¿verdad? Eso es bueno. Se supone que debe asustarlo. Evitar desastres es más importante que el potencial de crecimiento. El mercado de valores podría moverse al alza por un tiempo, pero la tendencia alcista actual no es sostenible.

Dicho esto, eso no quiere decir que debería evitar invertir en acciones. La diferencia entre hoy y un ambiente normal de mercado de valores es que ahora tiene que ser muy selectivo. Evite invertir en empresas que suben con la marea. En lugar de ello, invierta en empresas que ofrecen tecnologías revolucionarias. Las acciones de estas empresas sufrirán igualmente un impacto en un mercado bajista, pero gracias a su innovación, no sólo serán capaces de volver, sino que prosperarán.

Unos cuantos ejemplos de empresas que han ofrecido este tipo de productos o servicios en la última década son Apple (NASDAQ: Apple [AAPL]), Netflix (NASDAQ: Netflix [NFLX]), y más recientemente, Tesla Motors (NASDAQ: Tesla Motors [TSLA]). Sin entrar en ideas de acciones individuales, dos industrias que crecerán en el futuro probablemente sean la seguridad cibernética y la energía alternativa.

Si decide invertir en una pequeña capitalización que cree que será la próxima Apple, Netflix, o Tesla, considere entonces seriamente la posibilidad de promediar los costes del dólar. Esto reducirá el riesgo y todavía tendrá un montón de potencial para una excelente rentabilidad a largo plazo, ya que comprará más acciones a precios más baratos.

Otro enfoque a largo plazo para crear riqueza es la aplicación de un plan de reinversión de dividendos de acciones de gran capitalización que pagan dividendos sostenibles y son más resistentes a los mercados bajistas. Esta estrategia probada le permite reinvertir sus dividendos en efectivo comprando acciones adicionales en las fechas de pago de dividendos. Mejor aún, la mayoría de estos programas le permiten comprar acciones sin comisiones y con un descuento significativo de la cotización actual.

Después del susto inicial, puede que se pregunte por qué hemos incluido información sobre los mercados que han visto quiebras en los últimos años. Históricamente hablando, ningún tipo de inversión ha crecido más rápido que la tasa de inflación como las acciones comunes y bienes raíces. Tan sólo tiene que tener más cuidado con sus inversiones que en el pasado.

El siguiente paso es asignar su capital de acuerdo con ello. La mayoría de los asesores le recomendarán que se arriesgue más cuando sea más joven. Esto es correcto, pero sólo hasta cierto punto. Eso no significa que deba jugárselo todo en una empresa de biotecnología bursátil de pequeña capitalización. En su lugar, debería diversificar su cartera, pero con más asignación de capital de riesgo que el inversor de edad más avanzada.

El desglose depende de su situación financiera actual y los objetivos futuros, pero a la mayoría de los inversores les gusta mantener las inversiones especulativas en torno al 5%. Si tiene de 20 a 30 años, y se siente cómodo con el riesgo, entonces puede asignar el 10% de su capital a inversiones especulativas. La posible recompensa será alta, y si se equivoca, entonces tiene tiempo de sobra para recuperarlo con la generación de ingresos. Como se mencionó anteriormente, vale la pena considerar la estrategia de promedio de coste en dólares. También puede asignar un capital de renta fija, pero a esta edad, eso no es tan importante ya usted está generando ingresos.

Comprar en el margen es algo que sólo deberían considerar los inversores de alto riesgo. Cuando hace esto, está utilizando el apalancamiento en un intento de aumentar las ganancias, pero los riesgos a la baja son extremos. El riesgo real aquí es que la mayoría de las personas en sus 20 años no tienen suficiente experiencia en inversiones, sin embargo, está seguros de que lo saben todo mejor que nadie.

Esta es una situación peligrosa. Si se equivoca con sus predicciones, se enfrentará a un ajuste de márgenes – o bien tendrá que depositar más dinero o vender algunos de sus activos, posiblemente, un coche o una casa. En otras palabras, evite los márgenes. Haciendo esto, evitará deudas innecesarias.

El gran problema con las operaciones de margen es que incluso si sus predicciones son correctas, el mercado puede seguir siendo irracional más tiempo del que puede mantenerse solvente. Cuando se compra con dinero en efectivo (a diferencia de margen), puede estar esperando una eternidad para recuperar una acción. Nadie le puede obligar a hacer lo contrario. Cuando compra en el margen, hay un límite de tiempo.

Pero este no es el único tipo de inversión de alto riesgo que debe evitar.

Para el inversor medio, los fondos cotizados (ETF) apalancados son muy atractivos. ¿Por qué no habrían de hacerlo? Sus ganancias pueden ser tres veces más de lo que sería con un ETF estándar. Y ciertamente es posible invertir en un ETF apalancado que está en racha, asegurando un rendimiento significativo en un corto período de tiempo.

El problema es que los ETF apalancados siempre vienen con gastos elevados. La relación media de gasto en un ETF es de 0,46%. La relación media de gasto en un ETF apalancado es de 0,89%. Esto reducirá sus beneficios y exacerbará tus pérdidas. También, ese posible retorno tres veces mayor es diario, no anual, y está antes de cuotas y otros gastos.

Si nos fijamos en los ETF con apalancamiento a los que les ha ido peor durante dos o más años, casi todos ellos han sufrido una depreciación de más del 95%. Esto es horrible y debería evitarse a toda costa. Los ETF apalancados son para operadores con experiencia e inversores que tienen una buena idea de a dónde se dirigirán un índice, los productos básicos, o la moneda en un futuro próximo.

Actualmente vivimos en un entorno económico peligroso. Pero si utiliza un promedio de coste en dólares, mientras asigna la mayor parte de su capital a acciones con una alta capitalización/acciones resistentes, y el resto (aproximadamente el 10%) a acciones de pequeña capitalización, reducirá el riesgo en gran medida, permitiendo al mismo tiempo el potencial de impresionantes rendimientos a largo plazo.

Evite las operaciones de margen y los ETF apalancados. Empiece a guardar dinero para una jubilación temprana. Y comience a ahorrar al menos un 10% de cada sueldo.