La semana pasada el Deutsche Bank causó agitación en los mercados globales, lo que explica el hecho de que Europa no ponga punto final a los problemas bancarios de la región.
Ese no es el único problema. Después de un período de descanso, las preocupaciones por la inminente salida del Reino Unido de la Unión Europea están planteando problemas adicionales. Italia se dirige hacia un referéndum constitucional que podría crispar las relaciones políticas y económicas en la zona euro. El lunes los analistas de la compañía Pavilion, con sede en Montreal, escribieron en una nota de investigación:
"Muchos de los problemas subyacentes que han afectado a Europa entre 2009 y 2012 (la falta de competitividad en la periferia, la cuestionable sostenibilidad de la deuda soberana, el potencial de crecimiento pobre) no se consideraron en un principio, sino que se encontraban ocultos por las acciones agresivas [del Banco Central Europeo]".
A esto se suma la creciente sospecha de que el Banco Central Europeo – y otros responsables de la política monetaria a nivel global– se están quedando sin instrumentos para estimular la economía y el bajo nivel de inflación, y no es ninguna sorpresa que los inversores se sientan al menos un poco inquietos.
He aquí un resumen de las mayores preocupaciones que afectan a Europa en este momento:
1. Deutsche Bank
La mayor entidad crediticia de Alemania sigue siendo el centro de atención. Las acciones de Deutsche Bank (NYSE: DB) se recuperaron notablemente el viernes, tras haber alcanzado su punto bajo en las tres últimas décadas, después del anuncio de que el banco estaba cerca de llegar a un acuerdo civil en relación con su fraude hipotecario. La cantidad que el banco tendría que pagar al Departamento de Justicia sería de aproximadamente 5 mil millones de dólares, de los 14 mil millones propuestos inicialmente por los fiscales estadounidenses.
Las negociaciones continuaron hasta el lunes con la falta de un acuerdo que ha dejado a las acciones que cotizan en Estados Unidos vulnerables. Los mercados alemanes fueron cerrados por día festivo.
Muchos analistas se apresuran a restar importancia a las comparaciones con el colapso de Lehman Brothers en 2008. Sin embargo, según los estrategas, el hecho de que en un futuro próximo Deutsche Bank siga manteniendo su posición, especialmente en el sector financiero, debido a su eventual colapso, es el riesgo sistémico más importante para muchos miles de millones de dólares. El director ejecutivo de Deutsche Bank, John Cryan, ha afirmado que la entidad crediticia no tiene planes de vender más acciones. Sin embargo, en el ámbito de la venta al descubierto, existe la percepción de que otro aumento de capital resultará inevitable, reduciendo el valor de las acciones de los accionistas actuales.
Aunque Deutsche Bank es la mayor preocupación en el sector bancario europeo, los problemas de los bancos débiles en Italia y en otros países siguen siendo una fuente de inquietud.
2. El referéndum constitucional de Italia
El 4 de diciembre los italianos acudirán a las urnas para votar en un referéndum sobre las reformas constitucionales que formarán la legislatura del país. El primer ministro, Matteo Renzi, complicó la situación al afirmar que dimitirá en caso de un resultado negativo. Según los analistas, las preocupaciones por el fracaso de las reformas que puedan sentar las bases para nuevas elecciones son otra fuente de posible riesgo.
Esto es debido al temor de que el mismo sentimiento populista que llevó al Brexit y al ascenso de Donald Trump pueda fortalecer al euroescéptico Movimiento 5 estrellas, fundado por el cómico Beppe Grillo. Un resultado negativo en el referéndum aún dejaría a Italia lejos de un escenario de "salida", pero el nivel relativamente alto de sentimiento antieuropeo del país probablemente sería motivo de preocupación.
Los analistas de HSBC argumentaron que un resultado positivo en el referéndum probablemente ayudaría a las acciones italianas a mejorar su rendimiento. En cambio, un resultado negativo, junto con la dimisión de Renzi, "supondría un riesgo significativo para Italia y tendría repercusiones para toda Europa".
El punto de referencia de Italia, el índice FTSE MIB, disminuyó un 24% hasta la fecha, frente a una caída del 6,2% del índice paneuropeo Stoxx 600.
3. 'Difícil' Brexit
En caso de que tuviera alguna duda, el Brexit es inevitable.
Los mercados financieros, con excepción de la libra esterlina, y los datos económicos llevaron el 23 de junio al Reino Unido a votar a favor de una salida de la Unión Europea con calma – tal vez porque el proceso de salida, en realidad, se ha detenido. Esta situación va a cambiar después de que la primera ministra británica, Theresa May, declarase el domingo que Londres podría iniciar el proceso de salida a finales de marzo. El lunes, la libra esterlina cayó frente al dólar y al euro.
Por otra parte, May señaló que el gobierno no tenía ninguna intención de renunciar a su derecho de reducir la inmigración procedente de países de la Unión Europea hacia el Reino Unido – un movimiento que podría tener importantes consecuencias negativas para la economía del Reino Unido a corto plazo. Esto se explica por el hecho de que es poco probable que los otros 27 miembros de la Unión Europea permitan al Reino Unido mantener el acceso al mercado único europeo, si sigue insistiendo en frenar la inmigración. Erik Nielsen, economista jefe de UniCredit, dijo en una nota.
"En este caso, el Reino Unido se enfrentará al sistema de Arancel Exterior Común de la Unión Europea, que es una lista compleja de todo tipo de tarifas diferentes para todo tipo de importaciones, incluyendo el 15% de las importaciones de productos alimenticios, el 10% de las importaciones de automóviles, así como el 5% de los accesorios de vehículos. No se equivoquen con esto, sería un duro golpe para la economía del Reino Unido".
4. ¿Qué pasará con el BCE en un futuro próximo?
Los agresivos esfuerzos de estímulo del Banco Central Europeo (BCE) han coincidido con una vuelta al crecimiento de crédito al consumo en toda la región, mientras que las compras de bonos corporativos han ayudado a reducir el costo del crédito para las empresas, escribieron los analistas de Pavilion en una nota el lunes.
Eso se ha visto acompañado por un aumento en el gasto del consumidor.
Sin embargo, las preocupaciones continúan, según los analistas de Pavilion, lo que afectó al incremento de las acciones europeas a principios de este año. La producción industrial, el crecimiento de la producción y el aumento de los salarios están perdiendo impulso o debilitándose. Mientras tanto, el BCE se está quedando sin activos elegibles para comprar.
Aunque el estímulo fiscal ofrecería una "posible solución", existen muchos obstáculos políticos para una expansión significativa, añadieron.
Los analistas de Pavilion también manifestaron su confianza en Europa, pero quieren ver a los responsables políticos responder ante los problemas. Según ellos, la mayor preocupación gira en torno a Italia y la necesidad de expandir el programa de flexibilización cuantitativa del BCE. Éstos escribieron:
"Sin un resultado positivo en ambos casos, creemos que el ‘comercio divergente’ en Europa podría volver a florecer. Todavía no hemos cambiado nuestro punto de vista, pero seguimos de cerca estos importantes factores de riesgo".