¿Está nervioso por el mercado? No recurra a la bebida, recurra a los bebedores.
Esa es la idea detrás de un recién lanzado fondo cotizado en bolsa que sigue el sector del whisky y de las bebidas alcohólicas, un hueco dentro del espacio del consumo discrecional que ha experimentado un crecimiento. El whisky, según los administradores del fondo, ve demanda en los buenos tiempos económicos – cuando las personas están celebrando – o en los malos tiempos – cuando están ahogados en pérdidas.
El ETF Spirited Funds/ETF MG Whiskey and Spirits (NYSE: WSKY), que hizo su debut el miércoles, se compone principalmente de empresas que obtienen la mayor parte de sus ingresos de la fabricación o comercialización de whisky y otras bebidas alcohólicas, aunque también incluye nombres que derivan una menor parte de sus ingresos de la industria. Las participaciones son internacionales e incluyen a la empresa Brown-Forman (NYSE: BF.B) – el fabricante de Jack Daniel’s, entre otras marcas– así como a la francesa Pernod Ricard (PA: PERP) y a la japonesa Kirin Holdings (FRA: KIR).
En el primer día de negociación del fondo, menos de 2.000 acciones cambiaron de manos y el mismo se elevó un 0,1%, a 24,96 dólares. David Bolton, presidente y director ejecutivo de Spirited Funds, dijo en relación con la industria del whisky y de las bebidas alcohólicas:
"Creemos que estamos al comienzo de un súper-ciclo que podría durar 40 años, o al menos 25 si quiere ser conservador. Incluso nuestros analistas más pesimistas, que estaban bebiendo whisky cuando elaboraron sus comentarios sobre el mercado, son optimistas".
Bolton citó datos del Consejo de Bebidas Alcohólicas de Estados Unidos, que situó las ventas totales de bebidas alcohólicas estadounidenses en 72 mil millones de dólares en 2015, incluyendo las exportaciones, y calculó que los ingresos de Estados Unidos para las "marcas de whisky de primera calidad Bourbon y Tennessee" se incrementaron un 155% entre 2010 y 2015. La categoría "de alta calidad" vio un crecimiento de sus ingresos del 50% durante ese período.
Según el informe del Consejo de Bebidas Alcohólicas de 2015, que fue publicado en febrero, los ingresos anuales de los proveedores de bebidas alcohólicas aumentaron cada año desde 2005. La única excepción se encontró en 2009, durante lo peor de la recesión posterior a la crisis financiera, en la que los ingresos se estabilizaron en 18,7 mil millones de dólares. Bolton citó datos del Consejo de Bebidas Alcohólicas de Estados Unidos, que situó las ventas totales de bebidas alcohólicas estadounidenses en 72 mil millones de dólares en 2015, incluyendo las exportaciones, y calculó que los ingresos de Estados Unidos para las "marcas de whisky de primera calidad Bourbon y Tennessee" se incrementaron un 155% entre 2010 y 2015. La categoría "de alta calidad" vio un crecimiento de sus ingresos del 50% durante ese período.
Según el informe del Consejo de Bebidas Alcohólicas de 2015, que fue publicado en febrero, los ingresos anuales de los proveedores de bebidas alcohólicas aumentaron cada año desde 2005. La única excepción se encontró en 2009, durante lo peor de la recesión posterior a la crisis financiera, en la que los ingresos se estabilizaron en 18,7 mil millones de dólares. Bolton explicó:
"Se ve un cambio en la marca o en la calidad del producto que los consumidores compran en los mercados a la baja, pero las personas comen y beben independientemente de si el mercado sube o baja, y algunos estudios muestran que beben más cuando los mercados caen".
Desde principios de 2009, cuando el mercado salió de la crisis financiera, las acciones de Brown-Forman subieron más de un 180%, mientras que las de Pernod Ricard ganaron cerca de un 112%. El índice S&P 500 (INDEX: US500) aumentó un 137% en el mismo período. Por lo tanto, no está claro si el ETF será capaz de superar al S&P durante el largo período, pero puede ser divertido que los inversores lo intenten.
Este ETF es la última entrega en la categoría "ETF temáticos", que busca huecos dentro de los sectores. Viene con un ratio de gastos del 0,75%. En comparación, el ETF PowerShares Dynamic Food & Beverage tiene un ratio de gastos del 0,61%, mientras que el fondo Consumer Discretionary Select Sector SPDR - una forma popular para que los inversores entren en el espacio discrecional general – cobra un 0,15%