La empresa va a presentar hoy su informe trimestral y Wall Street se pregunta si esta vez Elon Musk va a ser capaz de demostrar que Tesla es rentable.
El director ejecutivo de Tesla (NASDAQ: TSLA), Elon Musk, puso el listón muy alto para los resultados del tercer trimestre. Los analistas llevan rebajándolos desde entonces.
En una nota enviada a sus empleados en agosto y publicada recientemente por Bloomberg, Musk pidió a sus empleados que redujeran los costes lo máximo posible y “produjeran el mayor número posible de coches” con el fin de poder alcanzar un flujo de caja positivo. Musk dijo que se trataba de la "última oportunidad" de Tesla para demostrar a los inversores que la empresa puede ser rentable antes de comenzar la producción total del Model 3. “Sería increíble poder sorprender a todos los escépticos de Wall Street que piensan que Tesla es incapaz de generar beneficios”, escribió Musk.
Sin embargo, parece que Musk tendrá que esperar un poco antes de entrar en esa competición. Los analistas de Wall Street han reducido drásticamente sus estimaciones para el informe trimestral que Tesla publicará hoy miércoles. Según una encuesta llevada a cabo por FactSet, Tesla perderá 4 centavos por acción de ganancias ajustadas. Más recientemente, en marzo, los analistas esperaban unas ganancias trimestrales de 52 centavos por acción. Y en el verano de 2015, esta estimación era mucho más optimista, alcanzando los 1,09 $ por acción.
Se espera que Tesla informe de unas pérdidas de 59 centavos por acción. Desde su salida a bolsa en el año 2010, Tesla solo ha informado de un trimestre rentable. Esto fue en 2013, cuando el precio de las acciones aumentó desde los 30 $ hasta casi alcanzar los 200 $. Desde entonces, el precio de la acción ha sufrido bastante volatilidad, pero todavía se mantiene alrededor de los 200 $.
Independientemente de si este tercer trimestre resulta ser rentable o no, los inversores desean saber más sobre la producción futura de la empresa, una de las razones que justifica el precio actual de las acciones de la empresa. A principios de este mes, Tesla informó que durante el tercer trimestre de este año había entregado 24.500 vehículos, más del doble de coches que el año anterior. También confirmó su pronóstico de fabricar 50.000 vehículos durante la segunda mitad de 2016. Y en 2018, con el lanzamiento del Model 3, la empresa promete entregar medio millón de coches.
Sin embargo, no se trata de la primera vez que Tesla promete demasiadas cosas que luego no es capaz de cumplir. Según un análisis de The Wall Street Journal, durante los últimos 5 años, Musk ha hecho 20 predicciones que luego no han acabado cumpliéndose.
Hay otras razones para ser cauteloso: el acuerdo de fusión con SolarCity, la investigación de la Comisión de Valores y el bajo índice de fiabilidad de Consumer Reports. En estos momentos, una tercera parte de los analistas recomiendan vender las acciones de Tesla, lo que supone más del doble que en el verano de 2015 y el mayor número de escépticos desde que la empresa saliera a bolsa.
Es posible que haya llegado la hora de ponerle freno a las acciones de esta empresa.