Estamos ante una onda de fusiones en el sector de la producción de chips – ¿Ayudará esto a fabricar coches inteligentes de forma más rápida?
Las altas apuestas en el sector se pusieron de manifiesto ayer por el acuerdo de 39 mil millones de dólares de Qualcomm (NASDAQ: QCOM) para comprar NXP Semiconductors NV (NASDAQ: NXPI), la mayor adquisición en la historia de la industria de los semiconductores y el segundo mayor acuerdo en el sector tecnológico de todos los tiempos. NXP es el principal proveedor de chips para coches, un gran atractivo para Qualcomm que pretende ampliar su segmento de chips al mercado de smartphones, en desaceleración.
IHS Markit estima que el nuevo coche medio tiene 616 chips en comparación con los 550 en 2013. Su valor se ha elevado a aproximadamente 350 dólares por vehículo este año, desde cerca de 250 dólares en 2000, según Gartner Inc.
Qualcomm no fue la primera en ofrecer una gran apuesta en la industria automovilística, que está llegando a ser cada vez más atractiva para los fabricantes de chips, ya que las empresas de automóviles diferencian sus ofertas de todo, desde llamadas con manos libres hasta radios conectadas a Internet. La carrera está llegando a ser especialmente intensa con las empresas centrándose en perfeccionar la conducción autónoma, la tecnología que requiere semiconductores más sofisticados y caros.
Ford (NYSE: F), BMW (ETR: BMW) y otras empresas han avanzado que lanzarán al mercado coches autónomos en los próximos años, mientras que Tesla Motors (NASDAQ: TSLA) ya tiene un sistema semiautónomo que en la carretera. La semana pasada, Tesla comenzó a distribuir vehículos que incluyen hardware que algún día podría actualizarse con software (que debe ser validado y aprobado por los reguladores) para funcionar de un modo totalmente autónomo. Elon Musk, el director ejecutivo de Tesla, tiene como objetivo demostrar la conducción totalmente autónoma a finales del próximo año.
Analog Devices Inc. (NASDAQ: ADI) citó las aplicaciones para automóviles como una motivación clave en un acuerdo anunciado en julio para comprar Liner Technology Corp. – un acuerdo valorado en 14,8 mil millones de dólares. NXP se convirtió en el principal proveedor de chips para automóviles al llegar a un acuerdo valorado en casi 12 mil millones de dólares, el año pasado, para comprar Freescale Semiconductor Inc.
Sin embargo, el mercado ha estado fragmentado durante años entre muchos proveedores con diferentes especialidades que compiten al nivel de los precios. Mientras un iPhone tiene un chip central para alimentar sus funciones, muchas partes de los automóviles utilizan chips independientes – una situación que podría llegar a ser aún más compleja cuando los fabricantes de automóviles añadan más características para seguridad y otros fines.
"Requerirán más capacidad de procesamiento y probablemente serán suministrados por diferentes proveedores que no están trabajando juntos exactamente," dijo Dave Sullivan, un analista de la industria automovilística en AutoPacific, en una entrevista.
El impulso hacia la conducción autónoma requiere chips y software más potentes que puedan analizar la información de cámaras, radares y otros sensores utilizando tecnologías como el aprendizaje profundo. Tesla Motors Inc. se ha movido hacia un sistema informático central, anunciando la semana pasada que había elegido al fabricante de chips Nvidia (NASDAQ: NVDA)para parte del hardware de auto-conducción que pretende incluir en todos sus vehículos nuevos.
Mientras tanto, los fabricantes de chips quieren utilizar acuerdos para combinar diversas especialidades que les ayudarán a ejercer influencia y determinar lo que harán los coches del futuro. Eso significa que más conversaciones directas entre los distribuidores de chips y los que toman las decisiones en la industria del automóvil, que deberían acelerar el ritmo de innovación, dijo Vincent Roche, director ejecutivo de Analog Devices, en una entrevista a principios de octubre.
Steve Mollenkopf, el director de Qualcomm, contó que sus ejecutivos viajan de forma rutinaria por todo el mundo para hablar con los directores de los principales fabricantes de smartphones. Ahora no tiene ese tipo de prestigio en la industria automovilística, a pesar de vender chips inalámbricos para coches.
NXP tiene mucha más influencia. "Ese es el ADN del equipo de NXP," afirmó Mollenkopf.
Rick Clemmer, director ejecutivo de NXP, ha hablado anteriormente sobre cómo la adición de la tecnología de Freescale permitió a su empresa construir módulos multichips para llevar a cabo nuevas funciones en los coches. El jueves, dijo que NXP necesitaba experiencia como Qualcomm en el aprendizaje profundo. Durante una teleconferencia con analistas declaró:
"Necesitamos mayor capacidad informática".
Jim Hines, analista de Gartner Inc, estuvo de acuerdo en que Qualcomm podría ganar una posición más estratégica a través de acuerdos con los fabricantes de automóviles. Al mismo tiempo, ese tipo de acuerdos tienden a aumentar el apalancamiento de los fabricantes de chips en las negociaciones de precios con los fabricantes de automóviles.
En cualquier caso, Qualcomm se enfrentará a una elevada competencia. Además de Nvidia, Mobileye NV (NYSE: MBLY) con sede en Israel fue el primer líder en chips y software para apoyar las funciones de asistencia a la conducción. Intel (NASDAQ: INTC) también ha hecho de la venta de chips para vehículos inteligentes su máxima prioridad.
Según Mollenkopf, NXP tiene muchos más atractivos que las demás empresas de chips para automoviles. La empresa dispone de una amplia gama de productos que se venden a más de 25.000 clientes y una selección mucho mayor de canales de distribución que pueden ayudar a la propia tecnología de Qualcomm a encontrar un público más amplio.
Ambas contribuirán a un mayor impulso al nivel del Internet de las cosas, o IoT, una expresión que se utiliza para describir la adición de sensores, la informática y las comunicaciones a todo tipo de productos. Mollenkopf afirmó: "Se va a producir un gran cambio en la tecnología relacionada con los automóviles y el IoT".