Durante estas vacaciones hemos tenido tiempo para reflexionar sobre los éxitos y fracasos del pasado año. Este año, muchos de los viejos problemas siguen estando ahí, pero en realidad no hay ninguno nuevo, así que vamos a intentar darle 5 consejos que le pueden ayudar a alcanzar el éxito este año.
1. No le quite el ojo de encima a los tipos de interés
Muchos esperan que este año se produzca una subida de los tipos de interés, lo que podría afectar a su cartera de tres formas diferentes. En primer lugar, las acciones de dividendos podrían volverse menos atractivas que los bonos debido al aumento de los rendimientos, lo que significa que las acciones de ingresos que han gozado tradicionalmente de unos ingresos altos podrían acabar cayendo. Una de las empresas más vulnerables es el gigante del tabaco Altria (NYSE: MO), que actualmente paga un rendimiento del 3,6%, pero se negocia a 26 veces sus ganancias.
En segundo lugar, el aumento de los tipos de interés afectará negativamente a las empresas que financian la compra de acciones propias por medio de préstamos, por ejemplo, Qualcomm (NASDAQ: QCOM) y Apple (NASDAQ: AAPL). Sin embargo, compañías como Texas Instruments (NASDAQ: TXN) - que financian totalmente sus recompras con su flujo de caja libre – no se verán afectadas. Unos tipos de interés más altos también podrían reducir la actividad de fusiones y adquisiciones debido a los mayores costos de endeudamiento.
Por último, unos tipos de interés más altos podrían aumentar la rentabilidad de los bancos, haciendo que las cuentas de ahorro sean más atractivas, al tiempo que aumentan los intereses cobrados sobre los préstamos pendientes.
2. Preste atención al dólar estadounidense
El fuerte dólar estadounidense, que podría aumentar incluso más en un entorno de altos tipos de interés, podría perjudicar a las empresas multinacionales que generan un alto porcentaje de sus ingresos en el extranjero. Esto significa que las acciones de muchas empresas blue chips, como Procter & Gamble (NYSE: PG), Coca-Cola (NYSE: KO) e IBM (NYSE: IBM), podrían verse afectadas negativamente por el cambio del dólar con otras divisas.
Sin embargo, el fortalecimiento del dólar podría llevar a un aumento en el atractivo de las acciones de las empresas centradas en el mercado estadounidense – siempre y cuando su valoración sea razonable y su crecimiento se mantenga constante.
3. Tenga cuidado con los cambios regulatorios
Además de un dólar fuerte, las presiones regulatorias tanto en EE. UU. como en el extranjero podrían afectar negativamente a las empresas multinacionales. El presidente electo Donald Trump ha atacado recientemente a empresas como Apple y General Motors (NYSE: GM) por contratar a empleados extranjeros. Si estas empresas se ven obligadas a trasladar sus instalaciones de fabricación a EE. UU., sus gastos de operación podrían aumentar, lo que se dejaría sentir en sus beneficios.
Las empresas estadounidenses también podrían seguir teniendo problemas en China, donde los reguladores parecen haberse cebado con empresas como Qualcomm, Microsoft (NASDAQ: MSFT) y General Motors, que se han visto obligadas a pagar multas por presuntas prácticas anticompetitivas. Los inversores deben prestar atención a estos acontecimientos, pero no deben dejarse llevar por las noticias negativas y vender sus acciones después de leer unos cuantos titulares negativos.
4. No compre acciones de empresas que no sabe cómo funcionan
Durante los últimos años, muchos grandes inversores están transfiriendo sus fondos a otros sectores de la economía. Por ejemplo, muchos inversores institucionales están comprando acciones de empresas energéticas debido a los altos precios del petróleo, así como acciones de empresas financieras en previsión del aumento de los tipos de interés.
Al mismo tiempo han estado vendiendo las acciones de algunos gigantes tecnológicos como Facebook (NASDAQ: FB), Amazon (NASDAQ: AMZN), Netflix (NASDAQ: NFLX) y Alphabet (NASDAQ: GOOGL). Esta tendencia ha provocado un importante aumento de los precios de las acciones de empresas energéticas y financieras durante los últimos meses, pero los inversores no deberían seguir estas tendencias si realmente o saben lo que están haciendo.
5. No hacer nada
Comprar y mantener acciones no es lo mismo que comprar y olvidar. Los inversores responsables deben mantenerse al día de las últimas noticias sobre los tipos de interés, el dólar y los cambios regulatorios, pero no deben vender sus acciones basándose únicamente en las noticias. En su lugar, lo mejor que podría hacer durante este año es sentarse y ver cómo van las cosas. Después de todo, Peter Lynch dijo en una ocasión a los inversores que "una acción vigilada nunca hierve".
A menos que se produzcan algunos acontecimientos totalmente inesperados, como que Trump aplique un impuesto del 45% a todos los productos fabricados en China, lo mejor que puede hacer es simplemente mantener sus acciones – siempre y cuando las haya comprado con cierta inteligencia.