Últimamente han pasado unas cuantas cosas en el mercado de valores. Snap acaba de salir a bolsa, Airbnb y Uber llevan tiempo preparando sus propias OPV, y hay rumores de que hasta BuzzFeed podría salir a bolsa dentro de unos años. Le explicamos por qué las startups de Silicon Valley han decidido que ya no es necesario mantenerse alejado de la bolsa.
De todos los factores que han dado lugar a la reciente creación de tantas empresas privadas altamente valoradas, lo que conocemos como "Edad de los Unicornios", las startups que evitan los mercados públicos es el más importante. En lugar de trabajar con el fin de salir a bolsa, las startups se esfuerzan por alcanzar una valoración de mil millones de dólares, un hito que proporciona los mismos beneficios que una salida a bolsa (con la excepción de un rendimiento financiero). Unirse al llamado club de los unicornios les brinda cierta reputación externa entre los clientes, empleados, medios de comunicación y futuros inversores, y todo ello sin la necesidad de elaborar los molestos informes trimestrales. La nueva estrategia de los fundadores de startups es evitar y retrasar su salida a bolsa el máximo tiempo posible.
Esto es lo que opina Travis Kalanick, director ejecutivo de Uber:
"Queremos retrasar nuestra salida a bolsa tanto como podamos. Tendrá lugar un día antes de que mis empleados y otras personas importantes vengan a mi oficina con horquetas y antorchas. Saldremos a bolsa el día antes".
Y esta es la opinión de Alex Karp, director ejecutivo de Palantir:
"Las empresas pierden competitividad en el preciso instante en el que salen a bolsa... Necesitas mucha gente creativa y loca que tal vez Wall Street no comprenda. Puede que se equivoquen todo el rato durante una entrevista. Lo que realmente quieres es que la gente se centre en solucionar el problema, no en beneficiarse de él".
Durante años, el director ejecutivo de Facebook (NASDAQ: FB.NASDAQ), Mark Zuckerberg, se mostró "muy franco" defendiendo que las empresas deberían mantenerse privadas el mayor tiempo posible. (Desde entonces ha cambiado totalmente esta postura, afirmando que la salida a bolsa de Facebook ha ayudado a la empresa a ser más fuerte).
La situación llegó al punto en que destacados inversores de capital de riesgo como Bill Gurley, Bill Maris y Fred Wilson evitaban públicamente que las empresas de su cartera de inversiones crecieran y salieran a bolsa. Muy a mi pesar, debo admitir que como reportero cansado de confiar en las filtraciones y las cifras publicadas por las propias empresas, estoy de acuerdo con ellos. Ahora estamos consiguiendo lo que deseábamos.
Bloomberg ha declarado que las startups de Silicon Valley ahora prefieren las OPV. ¿Por qué las salidas a bolsa vuelven a estar de moda? Porque muchos inversores no están dispuestos a invertir el dinero suficiente para mantener sus altas valoraciones. En algunos casos, los compradores no quieren ser propietarios de empresas que pierden dinero.
Esto significa que las OPV son especialmente interesantes para las empresas que no son capaces de encontrar un comprador. Bloomberg ha informado de que AppNexus realizó un proceso de venta y salida a bolsa de dos vías; las negociaciones no llevaron a buen puerto y finalmente ha optado por salir a bolsa. Del mismo modo, Okta intentó su venta, pero el acuerdo fracasó; Ahora va a salir a bolsa. Lo mismo ha sucedido con otras tres startups: Plex Systems, MapR y Forescout.
A esto hay que sumar que Cloudera está a punto de salir a bolsa. Blue Apron ha contratado a unos banqueros para trabajar en su OPV. Pinterest está preparando su salida a bolsa. Y según los informes, BuzzFeed también.
La pregunta es si los inversores del mercado público opinarán lo mismo sobre las altas valoraciones y el importante gasto de efectivo que los posibles compradores. Si la demanda de acciones de Snap (NYSE: SNAP.NYSE)sirve de indicación, la respuesta es un rotundo "no". Pero además de ser un unicornio, Snap también fue un poco especial. Otras startups que pierdan dinero y que no tengan el mismo reconocimiento, podrían no tener la misma suerte.
De cualquier manera, está claro que el auge de los unicornios está llegando a su fin. El número de startups que recaudan capital por valor de miles de millones de dólares se ha reducido significativamente desde el máximo de 2015, y si siguen saliendo a bolsa o vendiéndose al mismo ritmo, la cifra será todavía menor.
La mayoría de los observadores de mercado no esperan que las startups más grandes, más valiosas y más destacadas, Airbnb y Uber, se hagan públicas hasta 2018. Será en ese momento cuando podremos afirmar con total seguridad que la Edad de los Unicornios se ha acabado.