El columnista de Bloomberg Martin Gilbert explica por qué ha cambiado la situación después de las elecciones de Francia.
La victoria de Emmanuel Macron en las elecciones presidenciales de Francia elimina el riesgo de que uno de los miembros fundadores de la Unión Europea abandone la moneda única. Esto, a su vez, debería ser ser el pistoletazo de salida para que los inversores empiecen a invertir en acciones europeas en una situación política más relajada.
Después de varios años de bajo rendimiento, el crecimiento económico de la eurozona ha alcanzado el de EE. UU. durante el último año.
Esa mejora está ganando impulso a través de los ingresos y las ganancias corporativas. Después de que más de 250 empresas hayan presentado sus resultados trimestrales, o alrededor de un tercio de las acciones europeas por valor de mercado, el número de empresas que superan los pronósticos de los analistas está en camino de convertirse en el más alto en 10 años, según Morgan Stanley. Las estimaciones de los analistas sobre los ingresos se fijan para el mejor rendimiento en al menos 14 años, dijo el banco en un informe de investigación esta semana.
Amundi SA, el mayor gestor monetario de Europa con más de 1,1 billones de dólares de activos, dice que tiene una sobreponderación de acciones europeas y francesas, en particular en comparación con las acciones estadounidenses. El reciente impulso de las acciones europeas, junto con la pausa de las acciones estadounidenses, significa que las ganancias del índice de referencia Euro Stoxx 600 (INDEX: STOXX600) ha alcanzado al Standard & Poor's 500 (INDEX: SPX) durante el último mes.
A largo plazo, sin embargo, todavía queda mucho camino por recorrer antes de dejar atrás el bajo rendimiento registrado recientemente por las acciones europeas en relación con sus homólogas estadounidenses.
Los operadores que se han mostrado pesimistas frente al euro durante los últimos tres años en el mercado de divisas, finalmente han invertido esas apuestas negativas, o al menos eso es lo que se puede apreciar en CME Group, que dirige el mayor mercado de futuros del mundo. A partir de este mes, las posiciones de futuros netos muestran que los operadores han adoptado una posición neutral frente a la moneda única.
La decisión del Reino Unido de abandonar la Unión Europea parece haber reforzado el sentimiento de unidad de los miembros restantes, por lo que el bloque estará más unido que nunca a partir de ahora. Además, el Banco Central Europeo se sigue aferrando a sus medidas poco convencionales para impulsar la economía, una batalla que finalmente parece estar ganando.
¿Qué podría salir mal? Los economistas de Citigroup advirtieron en un informe de investigación esta semana que el movimiento anti-euro del partido italiano 5 Estrellas podría convertirse en el mayor partido del parlamento, despertando la preocupación por una ruptura de la moneda común. Grecia todavía tiene que aplicar alrededor de 100 medidas para concluir su revisión de rescate actual y evitar el riesgo de un incumplimiento de deuda que vence en julio.
Sin embargo, los incesantes cambios de gobiernos de coalición de Italia han estado presentes en la escena política europea durante décadas, y es posible que tengamos que esperar otro año más hasta que haya elecciones. Mientras tanto, incluso los más críticos con Grecia dentro de la eurozona han perdido su apetito por amenazar a Grecia con expulsarla del euro.
La combinación de unas mejores perspectivas de crecimiento en la zona euro, un entorno inflacionario benigno y un banco central que no planea subir los tipos de interés a corto plazo le dan a las acciones europeas la oportunidad de superar el rendimiento de sus homólogas del otro largo del charco.