Los futuros de bitcoin ya han llegado al mercado: ¿Qué significa esto para los inversores?

Hoy, la Bolsa de Chicago (CBOE) ha iniciado la negociación de futuros de bitcoin (Bitcoin: BITCOIN), y CME Group pronto seguirá su ejemplo. Se trata de un hito en la aceptación de la moneda digital por parte del mundo tradicional de las inversiones, impulsado en parte por el meteórico ascenso del bitcoin de este año. Sin embargo, todavía son muchos los escépticos, incluidos los ejecutivos de algunos de los bancos más grandes del mundo. Para los que todavía tienen dudas, por lo menos hay un lado positivo: la negociación de futuros podría servir para ayudar a explotar lo que ven como una burbuja.

En una red de intercambios no regulados que tienen sus propios precios para la moneda digital y una larga historia de problemas que van desde interrupciones del servicio hasta robos. Comprar y mantener el bitcoin es esencialmente una apuesta de que su valor aumentará aún más. No todos los que quieren participar en este mercado lo creen así.

Los contratos de futuros - que derivan su valor de algo subyacente como el maíz, el trigo o, en este caso, una moneda digital - obligan al comprador a pagar por algo a un precio acordado en una fecha determinada en el futuro. Pueden ser utilizados para apostar sobre el futuro movimiento de precio de un producto. También pueden ser utilizados para vender en corto, o apostar que los precios caerán.

Tres de las mayores compañías bursátiles de Estados Unidos, todas supervisadas por la Comisión de Comercio de Futuros de Materias Primas, planean lanzar los futuros de bitcoin. Cboe es el primero que ha conseguido licencia para lanzarlos al mercado. CME comenzará a ofrecer un producto similar el próximo 18 de diciembre. Nasdaq planea introducir los futuros de bitcoin el año que viene. El otro gran jugador estadounidense, Intercontinental Exchange Inc., todavía no ha anunciado ningún plan al respecto. "Puede que no ser los primeros en esto no sea una idea muy inteligente", dijo Jeff Sprecher, director ejecutivo de ICE, en una conferencia de inversores este mes.

Las bolsas quieren ofrecer a los inversores lo que les interesa, y este año cada vez más gente quiere negociar en el mercado del bitcoin. Coinbase, un gran intercambio de bitcoin, se vio colapsado por la gran cantidad de tráfico de usuarios cuando la criptomoneda alcanzó los 10.000 $ a finales de noviembre. CME, que en octubre todavía no había tomado ninguna decisión sobre qué hacer con respecto a la criptomoneda, ha acabado sucumbiendo a su encanto. Para los traders, el bitcoin ofrece un escenario completamente nuevo. Una de las características distintivas de las operaciones con bitcoin son sus impredecibles fluctuaciones de precios, que contrasta con la espeluznante calma que reina en otros mercados financieros, incluyendo la renta variable estadounidense.

No todo el mundo piensa que los derivados basados en bitcoin estén listos para su lanzamiento. La volatilidad, que hasta ahora ha sido una característica clave del mercado de las divisas digitales, preocupa a muchos. Apenas tres días antes de que el producto de Cboe fuera presentado, el bitcoin registró una de sus sesiones más salvajes: En el intercambio GDAX de Coinbase, los precios aumentaron hasta casi los 20.000 $ desde los 16.000 $ en tan solo 90 minutos, antes de volver a caer.

Algunos importantes traders opinan que todavía es demasiado pronto para el lanzamiento de este producto. La Asociación de la Industria de Futuros - un grupo de importantes bancos, corredores y traders - ha dicho que los contratos han sido lanzados sin tener en cuenta los riesgos. En una carta abierta a las bolsas, el grupo cuestionó si serían capaces de controlar adecuadamente la manipulación del mercado en el bitcoin. El grupo ha dicho que las bolsas deberían haber buscado más retroalimentación de la industria sobre los niveles de margen, límites de negociación y pruebas de estrés antes de comenzar a operar. Cboe y CME están exigiendo a los traders que reserven una cantidad inusualmente grande de dinero en efectivo para que este sirva como garantía para respaldar las compras.

Esta simple pregunta suscita un sorprendente debate en el mundo de las inversiones. Mientras que los defensores del bitcoin lo llaman moneda, la CFTC lo ve como una materia prima. Los escépticos lo ven como una materia prima sin valor intrínseco, con una demanda impulsada por la novedad y la escasez impuesta por los protocolos de software de bitcoin, que limitará su producción. Algunos analistas creen que se comerciarían más como acciones volátiles, mientras que otros esperan que se convierta en una nueva clase de activos. Estos argumentos se están debatiendo en las mesas de negociación de bancos y aficionados por igual.