Eric Roberge, planificador financiero certificado y fundador de Beyond Your Hammock, ha compartido sus mejores consejos sobre el dinero.
Cuando cumplimos 30 años, la vida no se vuelve más fácil. Carrera, negocios, matrimonio, comprar una casa, tener una familia: todo esto requiere mucho tiempo y esfuerzo.
Todos los días ayudo a mis clientes con problemas similares, y con el paso del tiempo he aprendido que la vida es difícil. Sin embargo, tus finanzas no tienen por qué serlo. Si quieres controlar tus finanzas, tan solo tienes que centrarte en poner en práctica unas pocas reglas simples.
1. Vive muy por debajo de tus posibilidades
Probablemente has escuchado el consejo de vivir por debajo de tus posibilidades. Este es un buen lugar para empezar, pero no es suficiente si quieres aumentar tu riqueza real. Si ganas 2.000 $ al mes y gastas 1.999 $, técnicamente, estás viviendo por debajo de tus medios. No estás gastando en exceso en el sentido de que no estás gastando más de lo que ganas. Como resultado, probablemente no estás acumulando deudas y lo estás haciendo bien.
Pero "estar bien" y "ser rico" son dos cosas muy diferentes. Si buscas lo último, entonces necesitas vivir mucho más por debajo de tus posibilidades. Cuanto más grande sea la brecha entre lo que ganas y lo que gastas - es decir, tu gasto real está muy por debajo de la cantidad de dinero que llevas a casa cada mes - más rápido alcanzarás tus metas financieras (si ahorras e inviertes el excedente de efectivo). Lo que me lleva al siguiente consejo que debes seguir si deseas alcanzar el éxito financiero.
2. Concéntrate en el porcentaje de ingresos ahorrados, no en la cantidad en dólares
Digamos que ganas 2.000 $ al mes y ahorras e inviertes 500 $ de ese dinero. Se trata de una gran parte de tus ganancias y una cantidad impresionante que estás ahorrando.
Pero, ¿qué sucede cuando empiezas a ganar más dinero? ¿Qué pasaría si empezaras a ganar 2.500 $ al mes pero sigues ahorrando lo mismo?
Si en vez de ahorrar te gastas el dinero extra, habrás sucumbido a un estilo de vida por encima de tus posibilidades, por lo que no alcanzarás el bienestar financiero.
A largo plazo, no se trata tanto de la cantidad en dólares que ahorres, sino del porcentaje de tus ingresos que dedicas a ahorrar e invertir. Al concentrarte en los porcentajes, puedes asegurarte de que siempre estás ahorrando más a medida que más ganas. También es una excelente manera de comparar tus hábitos de ahorro con personas de diferentes niveles de ingresos.
3. No te olvides de mantener un registro de tus finanzas
¿Cuál es el mayor error que veo a la gente cometer con su dinero? Ser reactivo en vez de proactivo.
La mayoría de las personas pasan la vida reaccionando a sus finanzas. Resulta fácil ignorar tu dinero siempre y cuando nada vaya seriamente mal. Si tienes suficiente para comprar lo que quieres, ¿por qué deberías preocuparte? El problema con este enfoque es que, algún día, cuando necesites algo urgente, como comprar bienes inmuebles, salir de viaje o jubilarte, es posible que no tengas suficiente dinero en tu cuenta bancaria.
El dinero tiende a irse cuando no le prestamos atención.
Reserva tiempo en tu calendario cada mes para revisar tus finanzas. Después de haber estudiado todas tus facturas y propiedades, acabarás reflexionando sobre lo que está sucediendo y, por lo tanto, estarás más atento a tu propio comportamiento y hábitos.
4. No gastes más, gasta mejor
La gente suele creer que conforme aumentan sus ingresos, más pueden gastar, y formalmente tienen razón. La pregunta es, ¿este gasto adicional da una felicidad adicional?
El problema es que el dinero en sí no trae felicidad a menos que hagas un esfuerzo y lo gastes sabiamente.
Cada uno de nosotros aprecia algo diferente: mis recetas de felicidad y las tuyas son indudablemente diferentes. Como resultado, si sigues el ejemplo de los demás, no encontrarás ninguna felicidad, sino más bien problemas financieros.
Supongamos que alguien ha viajado a una isla tropical y ha disfrutado mucho, por lo que crees que si haces lo mismo serás igual de feliz que esa persona. Es posible que esto sea así.
Sin embargo, cuando gastamos dinero porque tenemos que hacerlo, o porque nos parece que tenemos que impresionar a los demás, lo único que estamos haciendo es malgastarlo.
Piensa en lo que es valioso para ti personalmente. Puede ser crear una familia o encontrar una oportunidad de aprender algo.
Cuanto más analices en qué gastar tu dinero, mayores serán las recompensas. Y cuanto más se correspondan estos gastos a estos valores, más feliz te sentirás.
5. Piensa en cuándo recurrir a los servicios de un planificador financiero (y cuándo no)
Si eres como la mayoría de la gente, seguramente te cueste comprometerte a ir al gimnasio 4 o 5 veces a la semana. Incluso si lo consigues, te enfrentas al reto de saber exactamente qué ejercicios tienes que hacer - y quizás no te esfuerces tanto como puedas porque hacer esos ejercicios puede ser realmente incómodo.
Eres consciente de lo difícil que puede ser levantarse e ir al gimnasio para seguir un entrenamiento bueno, duro y efectivo. Y todo esto sin contar todas las cosas que tienes que hacer antes de conseguir la deseada tableta de chocolate, como seguir una dieta estricta y planificar bien tus tiempos de ejercicio y descanso.
Todo esto es aplicable a tus finanzas. Resulta difícil comprometerse a hacer lo correcto una y otra vez. Conocer todos los pasos correctos que debes seguir no es tarea fácil. Dedicarse a ello consistentemente a lo largo del tiempo es agotador.
Un entrenador personal puede marcar la diferencia entre el éxito y el fracaso en tus objetivos para mantenerte en forma. Mientras que un planificador financiero puede ser lo único que te separe de alcanzar tus objetivos financieros.
¿Cómo distinguir a un buen asesor financiero y entrenador personal?
- Te escucharán, responderán a tus preguntas e intentarán entender tus objetivos lo mejor posible.
- Desarrollarán un plan individual para ti.
- Cuando empieces a moverte en la dirección correcta, te dejarán en paz.
- Según sea necesario, te ayudarán con consejos y conocimientos.
- Te harán responsable de las acciones necesarias para lograr el objetivo.
Tal vez puedas lograr buenos resultados por ti mismo, pero con un asesor financiero estos serán todavía mejores.
Al mismo tiempo, no todo el mundo necesita ayuda. Todos conocemos a personas que les gusta tanto el deporte que se han vuelto prácticamente profesionales, lo mismo ocurre con las finanzas. Si estás listo para trabajar y comprometerte con el proceso de aumentar tu riqueza por tu cuenta, adelante.
6. El camino hacia el éxito financiero es simple (así que no lo compliques)
Al final del día, mi mejor consejo se reduce a esto: mantén las cosas simples. Hay muchos profesionales y compañías que hacen que las finanzas personales y el éxito financiero suenen realmente difíciles y complejas, pero eso es probablemente porque tienen un producto que quieren vender para resolver todos tus problemas.
El éxito financiero se reduce a acciones muy pequeñas y sencillas que tomas consistentemente a lo largo del tiempo. La riqueza no se construye de la noche a la mañana. Es un proceso a largo plazo que requiere paciencia y disciplina, algo que no es siempre fácil de encontrar. Pero la buena noticia es que cualquiera puede crear riqueza si está dispuesto a seguir algunas de las mejores prácticas básicas para la administración del dinero:
- Concéntrate en tus hábitos. Analiza tus gastos y ahorros.
- Evita los esquemas para hacerse rico rápidamente. La creación de riqueza sucede con el paso del tiempo, no en días o incluso meses.
- Busca la guía de expertos o personas que se hayan hecho ricas - no el típico compañero de trabajo que siempre te recomienda las acciones que debes comprar.
Eso es todo. Lo principal es repetir las acciones correctas día a día. Y si eres constante, alcanzarás todos los objetivos.