El presidente de la web líder de análisis financiero ADVFN y experto en inversiones Clem Chambers comparte su opinión sobre lo que le espera al mercado de las criptomonedas en el futuro cercano.
Muchas personas creen que el precio del bitcoin (Bitcoin) se va a desplomar después de que Mt. Gox entregue a sus acreedores una gran cantidad de bitcoins y Bitcoin Cash. En su opinión, estas 160.000 monedas van a hacer que el mercado se desplome por completo.
El sector de las criptomonedas ha acuñado un léxico totalmente nuevo, y este es utilizado por los millennials, quienes han adoptado las criptomonedas como una alternativa al antiguo dinero fiat o tradicional.
“Fiat”, por ejemplo, es una palabra nueva para la mayoría de la gente. Esta hace referencia a un punto de vista despectivo que considera basura al dinero creado por los gobiernos. Por supuesto, esto no es cierto, y tampoco es posible comprarse un Lamborghini con bitcoin, mientras que sí se puede hacer con dólares.
Luego nos encontramos con el término “FOMO” o miedo a perderse algo. El bitcoin, el ethereum y el litecoin permitieron que mucha gente ganara dinero rápidamente, lo que hizo que millones de personas quisieran formar parte del boom, dando lugar así a una burbuja. El mercado se disparó y los inversores más veteranos vendieron. En mi caso, la aparición de los futuros de bitcoin fue una señal de alarma. Sin embargo, la mayoría de los inversores solo veían cómo subían los precios.
Lo que tiene que hacer es “hodl”, que básicamente significa que debe comprar y mantener, incluso cuando el precio de sus exóticas criptomonedas caiga por los suelos. Todo saldrá bien, la cosa mejorará dentro de unos años, como sucedió con Enron.
Luego está el “mooning”. Este término es empleado para describir cuando una criptomoneda pasa de no valer nada a disparar su precio (hasta la luna). Compre 10.000 ethers por unos pocos miles de dólares y hágase multimillonario en un año o dos. Todo el mundo desea que se produzca este fenómeno, aunque algunos tienen más suerte que otros.
Yo me encontraba en un taxi en 2013 cuando su conductor me dijo que había comprado bitcoins en 2010 y que la semana anterior se había enterado de que su precio había subido, por lo que su inversión ahora valía 100.000 dólares. ¿Qué hizo? Pues lo mas probable es que, como cualquier persona cuerda, vendiera sus bitcoins a 1.000 $. Seguramente la navidad pasada, cuando el precio del bitcoin se aproximó a los 20.000 $, se puso bastante triste. Ahora no tanto.
El “mooning” a veces sucede: El bitcoin pasó de 1 $ a 20.000 $, Apple pasó de valor unos pocos centavos la acción a poseer una capitalización de mercado de billones de dólares, el ethereum (ETH/USD) pasó de casi nada a 1.200 $ por moneda. Los porcentajes no siguen la lógica financiera, por lo que si sufre FOMO, lo más probable es que invierta su dinero en cualquier criptomoneda vieja, la que tenga más a mano, y acabe manteniéndola para siempre, incluso cuando su precio se desplome.
Pero esto es solo “FUD”.
El “FUD” es miedo, incertidumbre y duda. Se trata de una antigua técnica de marketing de los años 80 utilizada para despistar a los competidores y a los clientes para que no compren los productos de la competencia. El FUD es la razón por la que los precios caen, mientras que el FOMO hace que suben. Los millennials novatos que sueñan con comprase un Lamborghini dicen: “No escuche al FUD, hodl (mantenga sus monedas), el precio acabará disparándose”.
Podría, realmente podría suceder, pero todos los acrónimos del mundo no harán que pase.
Así que el FUD dice que los mil millones de dólares en bitcoin que Mt. Gox está a punto de entregar a sus clientes van a hacer que el bitcoin se desplome.
Eso espero, de veras, ya que todavía estoy esperando poder comprar bitcoin barato, con que caiga hasta los 2.500 $ me es suficiente.
Todavía estoy esperando, porque mil millones de dólares en bitcoin se evaporarán en una o dos semanas de ventas. Todos los días se negocian en torno a 2 o 3 mil millones de dólares en bitcoin, aunque como podrá imaginar, una gran parte de este dinero es transferido entre los intercambios. Sin embargo, los flujos de bitcoin no son una fantasía completa, esto se puede apreciar en el blockchain; mucho dinero está fluyendo por todo el mundo, ya sea entre intercambios o de otra forma.
El 82% de todos los bitcoins ya han sido minados y para mayo de 2020 la oferta se reducirá a la mitad.
Puede que le guste o no, pero el bitcoin es un dinero deflacionista. No deberíamos apodarlo como el “oro digital”. El bitcoin es una moneda global, con una aceptación cada vez mayor, con una popularidad comparable a la de Trump y la NFL.
Las desventajas son claras: falta de seguridad práctica, defensores sobreestimulados incapaces de mantener la boca cerrada, y ejércitos de hackers que intentan por todos los medios robar bitcoin de cualquier lugar que puedan. El bitcoin necesita a los bancos de igual forma que los bancos del salvaje oeste necesitaban cajas fuertes, pero nadie ha presentado una solución ya que los más veteranos creen que el bitcoin es un virus financiero pero que el brexit.
Mt. Gox lanzará dentro de unos días al mercado el 5% de la oferta total del bitcoin, por lo que todo el mundo hará cola para comprar, especialmente el Bitcoin Cash. ¿Y si las víctimas de Mt. Gox mantienen sus monedas? ¿Qué sucederá?
Pero nunca se sabe, en el salvaje oeste no se necesita mucho para crear una estampida.
El bitcoin ha mantenido el tipo durante las últimas semanas, pero todavía no hemos llegado al final del camino. Me gustaría comprar uno.
Siempre compro barato, pero solo cuando la gente dice que todo ha terminado para siempre mientras que yo estoy seguro de que su precio todavía podría dispararse.
La opinión del autor puede no coincidir con la posición editorial