Los soldados de las fuerzas especiales de cada país son los que mejor protegen el mundo.
Las fuerzas especiales de élite son una de las unidades más formidables y mejor entrenadas de las que un país puede presumir.
Se adentran donde los otros soldados no quieren pisar, analizando amenazas potenciales, aplicando objetivos estratégicos y llevando a cabo misiones de rescate arriesgadas.
Son realmente lo mejor de lo mejor.
Aunque es relativamente complicado colocar a cada una de estas fuerzas en un ranking, a continuación se presentan algunas unidades que sobresalen por encima del resto por su trayectoria y por el miedo que infunden en sus adversarios. Estos soldados han sido sometidos a programas de entrenamiento rigurosos diseñados para eliminar a aquellos que no alcancen los estándares exactos exigidos.
En un mundo en el que el tamaño global de la fuerza militar del país ya no da fe de su efectividad, son estos soldados en los que el estado confía cuando hay que cumplir con un objetivo.
8. El grupo especial de servicios, SSG, de Pakistán. Allí se les conoce como las «cigüeñas negras» debido al casco que lleva el comando. Aparentemente, su entrenamiento consta de marchas de 36 millas en 12 horas y carreras de cinco millas en 50 minutos a pleno pulmón.
En octubre de 2009, los comandos de la SSG asaltaron un edificio de oficinas y rescataron a 39 rehenes de presuntos militantes talibanes después de que atacaran el cuartel general del ejército.
7. La Unidad de Operaciones Especiales Española o Fuerza de Guerra Naval Especial, como se la conoce desde 2009, es una de las fuerzas especiales más respetadas en Europa. En sus orígenes se creó como la Unidad Anfibia de Voluntarios en 1952, pero siguiendo el ejemplo de la SAS, se ha convertido en una fuerza militar de élite.
No obstante, ganarse la boina verde de la UOE es todo un desafío teniendo en cuenta que la tasa de candidatos que no lo logran se sitúa en un promedio de entre el 70% y 80%. No es extraño que se rechace al 100% de los nuevos aspirantes a reclutas.
6. El Grupo Alfa de Rusia es una de las unidades de fuerzas especiales más conocidas del mundo. Esta unidad de élite antiterrorista fue creada por la KGB en 1974 y permanece bajo el mando de su equivalente moderno, la FSB.
Las fuerzas especiales rusas y en especial el Grupo Alfa fueron criticados durante la crisis de rehenes de Moscú en 2002 en la que 129 rehenes murieron por los efectos del gas que emplearon para derrotar a los militantes que habían tomado un teatro.
5. De todas las fuerzas antiterrorismo que existen, pocas pueden competir con la GIGN francesa (Grupo de Intervención de la Gendarmería Nacional) que es un grupo de 200 miembros y entrenado específicamente para situaciones con rehenes. Afirman haber liberado a más de 600 personas desde su fundación en 1973 y está prohibido por ley publicar fotografías de sus rostros.
Uno de los episodios más extraordinarios de la historia de la GIGN fue la toma de la Gran Mezquita en la Meca en 1979. Debido a que la entrada de no musulmanes en la ciudad santa estaba prohibida, tres comandos de la GIGN se convirtieron al islam antes de la operación para ayudar a las fuerzas armadas de Arabia Saudí a planear la recuperación de la mezquita.
4. La Sayeret Matkal de Israel es otra de las unidades de élite más famosas del mundo. Su función principal son las operaciones de información y opera frecuentemente muy cerca de la línea enemiga. En el campamento de selección (Gibbush), los aspirantes a recluta se someten a duras pruebas de entrenamiento bajo una monitorización médica y psicológica continua. Solo los más fuertes lo consiguen.
En 2003, el taxista israelí Eliyahu Gurel fue raptado por transportar a cuatro palestinos a Jerusalén en su taxi, pero la unidad Sayeret Matkal lo encontró y lo rescató de un hoyo de 10 metros de profundidad en una fábrica abandonada en las afueras de Ramala.
3. El Servicio Británico Especial del Aire o también comúnmente conocido como SAS es el equivalente en infantería a la SBS. En su insignia aparece la famosa frase «quien se atreva gana». Cuando se le preguntó al General estadounidense Stanley McChrystal por la importancia de la SAS, respondió: «Son esenciales. No podríamos haberlo conseguido sin ellos».
2. El equivalente británico de las SEALS de la Marina es el Servicio Especial de Embarcaciones. El proceso de selección consta de una prueba de resistencia muy dura, entrenamiento de combate en las selvas tropicales de Belice así como entrenamiento de supervivencia en combate que conlleva largos interrogatorios de los candidatos. Y solo se dispone de dos intentos para aprobar.
1. Los SEALS de la Marina estadounidense podrían incluso superar a los marines. Para unirse a sus filas, hay que ser capaz de hacer un mínimo de 42 flexiones en dos minutos, 50 sentadillas en dos minutos y correr 1,5 millas en 11 minutos y todo eso, antes de que el entrenamiento empiece.
ADEMÁS: Los marines estadounidenses son muy duros por sí mismos. Debajo, un marine estadounidense se bebe el veneno de una cobra durante el entrenamiento de supervivencia en la selva con la marina tailandesa como parte del entrenamiento militar conjunto llamado «Cobra Gold 2014».
