Reconocidos «expertos en felicidad» dan 13 consejos prácticos de cómo encontrar la armonía interior.
Es bastante seguro asumir que usted quiere ser feliz porque... bueno, ¿quién no quiere?. No obstante, conseguirlo realmente es un tanto más escurridizo. Presentamos los mejores consejos de un grupo de especialistas.
Por supuesto, cada cual tiene lo suyo y en algunos casos en los que hay personas que padecen alguna enfermedad mental, como la depresión o la ansiedad, la situación se complica. Sin embargo, con un poco de suerte encontrará aquí algún consejo que le facilite la vida.
1. Dese cuenta de que la felicidad no es sinónimo de tener todo lo que quiere y vivir sin problemas todo el tiempo
«No podemos controlar todo lo que nos ocurre en la vida, pero sí podemos elegir cómo reaccionamos. Si nuestra reacción es «¿Por qué me está pasando esto a mí?» y adoptamos una posición de víctima, sufrimos. Si optamos por «¿Por qué está ocurriéndome esto y qué puedo aprender de ello?», nos sentimos mucho más capacitados, lo que ejerce una influencia más positiva en nuestro estado mental.
El mayor malentendido sobre la felicidad es que se puede externalizar, es decir, que algo externo nos va a hacer felices. La felicidad no es un estado constante. Los seres humanos experimentamos una gran variedad de emociones. Esperar ser feliz continuamente nos deja con una resaca de expectativas. Lo que podemos ser es agradecidos».
Christine Hassler, entrenadora de capacitación y autora de Expectation Hangover: Overcoming Disappointment in Work, Love, and Life
2. Elimine «debería» del vocabulario porque básicamente garantiza que cualquier cosa que crea que «debería» suceder, no lo hará
«Cuando utilizamos la palabra «debería» es lo mismo que apuntarse con ese gran dedo crítico. «Debería entrenar más, debería ser más feliz, debería estar más agradecido». Solo nos causa sentimientos de culpa y vergüenza y consume nuestra felicidad. Ocasiona que nos comportemos de la forma opuesta a la que queremos.
En lugar de esto, remplace la palabra «debería» por el término «me gustaría». Por ejemplo, «me gustaría perder peso porque quiero estar más energético y ser un ejemplo a seguir». Esto es más motivador ya que se basa en la pasión en vez del miedo y la crítica a nosotros mismos que solo nos aleja de ser las personas que queremos ser».
Elizabeth Lombardo, Doctora en Psicología Clínica y autora de Better Than Perfect: 7 Strategies to Crush Your Inner Critic and Create a Life You Love
3. Recuerde que sus pensamientos negativos no son la realidad, solo son pensamientos
«Tristemente, muchos cometen el error de creerse los comentarios negativos que su voz interior les hace y con frecuencia sin ser conscientes del derecho que tienen a cuestionar la precisión de estos comentarios. Cuando nos centramos en el cuidado psicológico, muchas personas aún piensan que hay que pasarse años explorando nuestra niñez o pasado para poder mejorar. Esto no es real en la actualidad. Atrapa, desafía y cambia los pensamientos negativos».
Simon Rego, Doctor en Psicología, director de entrenamiento psicológico en el Centro Médico de Montefiore/Facultad de Medicina Albert Einstein de Nueva York
4. Comience el día recordándose algo positivo sobre su vida
«Puede ser algo pequeño como disfrutar del buen tiempo o algo más profundo como reconocer el avance hacia una meta que tiene en la vida (trabajar para la industria que siempre ha soñado, contar con un buen amigo por el que puede dar gracias, etc.). solemos tender a aferrarnos más tiempo a los pensamientos negativos que a los positivos, por lo que así puede darse un momento para sentir pensamientos y realidades más “felices”».
Jess Allen, Licenciado en Trabajo Social, Terapia de Aceptación y Compromiso, terapeuta de conducta cognitiva de NYC
5. La terapia es beneficiosa para cualquiera, así que considera concertar una cita para un chequeo
«Existe un estereotipo sobre el individuo que opta por ir a un terapeuta. «Tiene que ser un desastre emocional» o «no puede ocuparse de sus propios problemas» o «debe estar loco». Esta última es probablemente el malentendido más popular y ¡el más incorrecto de todos!
Se requiere mucho entendimiento y consciencia emocional para percatarse de que se quiere conseguir la lista de servicios de un terapeuta de salud mental formado para obtener la ayuda adecuada. Sí, existen algunos clientes que buscan terapia cuando están hechos un absoluto desastre emocional, pero también existen los que simplemente quieren mejorar su salud mental para mejorar en el trabajo o vida personal. No hay problemas demasiado pequeños o grandes cuando viene a vernos. Todo es bienvenido porque nuestro trabajo consiste en verte en el punto en el que se encuentre en la vida y no en el que el resto piensa que debería estar».
Gabriela Parra, Licenciada en Trabajo Social, consejera en California
6. No piense sobre sus responsabilidades laborales en casa y viceversa
«Hay que estar presente en el momento, lo que exige dejar la culpabilidad de lado. La culpabilidad no es beneficiosa para nadie. Si está trabajando, concéntrese; cuando esté en casa, centre toda su atención. Dar lo máximo de usted mismo en el lugar en el que esté le mantendrá cuerdo y feliz a cerca de su rendimiento».
Samantha Ettus, experta en equilibro laboral-personal
7. Deje de mirar el teléfono porque sí. En lugar de eso, establezca momentos concretos en los que se pondrá al día con los medios sociales y el email
«La mayoría de las personas serían más felices (y estarían menos estresadas) si mirasen menos el teléfono. Un estudio llevado a cabo por estudiantes universitarios en la Universidad Estatal de Kent descubrió que aquellos que comprueban con más frecuencia el teléfono tienden a experimentar mayores niveles de ansiedad durante su tiempo libre (¡cuando intentan relajarse!).
En lugar de intentar mirarlo menos, podemos configurar nuestros dispositivos y horario laboral para que nos sintamos tentados con menos frecuencia. El objetivo es comprobar intencionadamente nuestro correo, redes sociales y mensajes telefónicos solo unas pocas veces al día y no impulsivamente. Así le devolvemos a nuestros dispositivos su carácter de herramientas que utilizamos estratégicamente y no máquinas recreativas que demandan nuestra energía y atención constantemente».
Christine Carter, Doctora experta en felicidad en el Centro UC Berkeley’s Greater Good Science Center y autora de The Sweet Spot: How to Find Your Groove at Home and Work
8. Convierta en prioritario mantener el contacto con sus amigos
«La gente piensa que cuando nuestras responsabilidades laborales, académicas o familiares aumentan, quedar con los amigos se convierte en un lujo que hay que reducir. Es lo primero que eliminamos incluso aunque sigamos yendo al gimnasio o viendo cualquier programa nuevo en la tele. En realidad, asegurar el contacto con sus amigos le proporciona grandes beneficios mentales y mantiene los niveles de estrés a raya. Es un gran mecanismo de supervivencia y una necesidad para la salud que no debería de eliminar cuando las cosas se ponen feas. Totalmente lo contrario, lo necesita más que nunca».
Andrea Bonior, Doctor Psicólogo Clínico
9. Tómese realmente tiempo para planear placeres a corto plazo Y objetivos a largo plazo. En otras palabras, trabaje activamente para fabricar la vida que quiere tener
«Muchas personas corren de un lado para otro sin dedicar semanalmente unos minutos a reflexionar y trazar estrategias. Puede que todos reconozcamos que hemos considerado periódicamente apuntarnos de voluntarios y lo hemos olvidado completamente. O queremos cambiar de trabajo y lo aplazamos y entonces, nos vemos un segundo año en un trabajo que planeábamos dejar rápidamente.
Como Greg McKeown explica en su libro, Essentialism, «No elegimos a propósito y deliberadamente dónde centrar nuestras energías y tiempo. Otras personas (nuestro jefe, colegas, clientes e incluso nuestra familia) lo hacen por nosotros y en poco tiempo habremos perdido nuestra percepción de las cosas realmente importantes».
Dedique tiempo semanalmente a planear con antelación (planee actividades que le diviertan en la actualidad y no se quede ahí, piense en lo que quiere a largo plazo)».
Jennifer Taitz, Doctora en Psicología, Psicóloga Clínica
10. Trátese con compasión y mucho amor
«La gente piensa que el autocuidado es egoísta por lo que evitan hacer cosas que realmente son necesidades. El amor propio, el cuidado a uno mismo y la realización personal. Es mucho sobre uno mismo pero la felicidad parte de esa base. El amor a uno mismo incluye eliminar las auto-conversaciones negativas y aceptarse a uno mismo, con los defectos y todo lo demás. El cuidado personal significa fijar límites y tomarse tiempo para recargar energías. La realización personal va de vivir sus valores y tener relaciones auténticas».
Rachel DeAlto, Experta en relaciones y comunicación
11. No olvide que su salud física también influye en su salud mental
«Algunas acciones físicas que puede hacer para crear un hábito de felicidad:
Jennifer Jones, Doctora Psicóloga Clínica
12. Inspire profundamente varias veces a lo largo del día y dígase a sí mismo que todo va bien. Finalmente, el cerebro lo memoriza
«Puede que se acumulen las facturas sin que sepa cómo va a pagarlas. Su madre padece de Alzheimer y lidiar con ello está acabando con usted. Puede que empiece a preguntarse si existe realmente alguien para usted. Pero, en este momento, su corazón late, está respirando y tiene comida y un techo sobre la cabeza. Más allá de todas las circunstancias y deseos, usted está bien. Mientras planee la cena, pasee por el supermercado, vuelva del trabajo o lea el correo, vuelva al presente y recuérdele a su cerebro: «Estoy bien ahora mismo».
Con el tiempo al repetir esta acción, aprende a volver al momento presente y calmar su cuerpo y mente y así modifica realmente las conexiones neuronales (hecho científico denominado plasticidad neuronal) y se convierte en la norma para usted».
Debbie Hampton, fundadora de The Best Brain Possible y autora de Beat Depression and Anxiety By Changing Your Brain
13. Haga un esfuerzo consciente para cuidar de su salud mental al igual que lo haría con la física
«¡Muchos se niegan a convertir su salud mental en una prioridad! Y así queda olvidada y escondida detrás del “muy difícil” o “demasiado ocupado”. Pero al igual que la salud física, la salud mental debería considerarse una obligación no negociable porque sin ella, no tenemos nada.
Si tuviese que limitar los ingredientes clave de la receta para la felicidad y una buena salud mental a solo unos pocos, me quedaría con las relaciones personales de calidad y las conexiones, una buena salud física y bienestar, vivir la vida con un significado y un propósito, amarse a uno mismo y a los demás y tener esperanza y optimismo por el futuro».
Timothy Sharp, Doctor, Psicólogo Clínico y autor de 100 Ways To Happiness: A Guide for Busy People