10 consejos para los fotógrafos de viajes

El fotógrafo de viajes Kevin Walsh ha compartido 10 consejos sobre cómo inmortalizar con la cámara el recuerdo de sus aventuras.

Mientras vas haciendo el equipaje y planificando tu siguiente aventura, ya sea un viaje de fin de semana a una ciudad que no conoces, un nuevo país, o todo ello junto, pensarás en las experiencias que te esperan durante esos días. Ser capaz de documentarlo tú mismo en la medida de tu habilidad puede ser algo muy importante para ti, sobre todo para aquellos momentos en que lo compartas con tus amigos o tu familia.

Tras estudiar un semestre en el extranjero, en Florencia, Italia, me enamoré completamente de la fotografía de viajes. La posibilidad de experimentar durante un tiempo otra cultura y poner de manifiesto su modo de vida por medio de la fotografía me resultaba muy estimulante. A cada oportunidad que se me presentaba, me ponía a deambular por las calles empedradas de la ciudad que vio nacer el Renacimiento, buscando el siguiente momento para capturar con mi cámara. Es increíble pensar que antes de embarcar rumbo a Italia, mi experiencia con una cámara era nula. Comencé el semestre sin tener ningún conocimiento real de la exposición, la ISO o del valor de la composición, más allá de lo que podía saber por intuición propia.

Mi deseo es poder guiaros con algunos principios básicos que he ido descubriendo desde que llegara a casa tras mi viaje, con mis 10 mejores consejos para la fotografía de viajes.

Ya se trate de la cámara de tu smartphone o de esa nueva réflex digital tan sofisticada, no tienes ni idea de cómo usarla: ¡investiga un poco! Una de las cosas que he aprendido es que cuanto menos tiempo tengas que pasar toqueteando tu equipo, más posibilidades tendrás de poder capturar esa gran fotografía que estabas intentando hacer desde el principio. La mayor ayuda que he recibido para entender el funcionamiento de todos los botones y las técnicas de mi cámara procede de tutoriales de YouTube. Te sorprenderá el nivel de ayuda profesional que puedes conseguir totalmente gratis si dedicas simplemente algo de tiempo a buscarla.

El «ensayo y error» es una parte importantísima de la fotografía. Yo he vuelto tras un sinfín de mañanas levantándome realmente pronto sin una solo foto decente. Aun así, cuando consigo captar un amanecer impresionante con todo fluyendo en la dirección correcta, vale completamente la pena.

¡Intenta ser creativo! Algo que siempre me pregunto es «¿Puede hacer cualquier persona esta fotografía?». Ten siempre en cuenta los elementos presentes en tu composición: la luz, la gente, los objetos que pueden distraer, todo lo que puede restar al momento que tratas de capturar con tu cámara. Algo con lo que he estado experimentando últimamente es con los reflejos. Ya se trate de un charco o de un escaparate, intenta capturar lugares interesantes con la ayuda de las herramientas que tengas a tu disposición y que normalmente pasarías por alto.

Pasear simplemente por la ciudad en la que me encontraba, Florencia, fue increíble. Siempre me encontraba fuera de mi apartamento para descubrir calles nuevas y joyas ocultas de la ciudad. Piérdete, pregunta (aunque tengas problemas con tus escasos conocimientos del idioma) y, lo más importante de todo, diviértete. Tu tiempo en el lugar increíble al que hayas viajado es limitado. Algunas de mis mejores fotografías, ya sean del extranjero o de Estados Unidos, han sido el resultado de tomar al azar un camino por el que nunca antes había pasado. Por supuesto, usa el sentido común. No hay ninguna necesidad de adentrarse en un callejón oscuro a las 2 de la mañana y que te roben todos tus objetos de valor.

La única forma de mejorar como fotógrafo es la práctica. Una de las cosas que lamento no haber hecho mientras estaba en el extranjero es interactuar más con la gente local para tratar de saber más acerca de su historia. Al preguntarles si les importaría que les hicieras una fotografía, muéstrate confiado. Esto nos devuelve al punto número uno: ten tu equipo preparado y hazlo rápido para no quitarles demasiado tiempo y que se sientan incómodos. Incorpora algunos detalles, como los objetos que puedan llevar con ellos o el entorno en el que se encuentran para contar su historia con más precisión. Muchas personas tienen miedo a ser rechazadas. Si la persona te dice que no, da las gracias y continúa tu camino.

He visto algunas fotografías magníficas de gente que solo usaba su smartphone. Con las aplicaciones de medios sociales tipo Instagram, una forma rápida y sencilla de compartir y de conseguir inspiración está tan solo a un par de «clics» de distancia. Para editar las fotos en mi iPhone uso un par de aplicaciones; Snapseed y Enlight ayudan a resaltar los detalles y crean el efecto que puedes estar buscando. Otras aplicaciones, como Sky Guide y Rise, son fantásticas para ver dónde puede estar la luz durante ciertos momentos del día, incluyendo por dónde sale el sol y por dónde se pone. Para los fotógrafos más avanzados, estas aplicaciones pueden ayudarle a determinar en qué posición se encuentra la Vía Láctea en el cielo para una fantástica astrofotografía.

Trata de cambiar las cosas un poco con tu fotografía y no te quedes estancado en el mismo tipo de fotos. Si utilizas los medios sociales para contar la historia de tus aventuras en el extranjero, intenta incorporar todo tipo de elementos a la historia. Los retratos, los paisajes y las fotografías de comida ayudan a dar profundidad a la hora de contar la historia y te permitirán practicar en todos los terrenos posibles. Céntrate en los detalles más interesantes en cada fotografía y mantén siempre una mente abierta ante las críticas constructivas.

Creo en la preparación equilibrada. Antes de subirte a ese tren que te llevará a algún remoto lugar, trata de informarte sobre ciertas cosas. Por ejemplo, el clima, cosas a evitar a nivel cultural, eventos que haya en la región, etc. Prefiero estar preparado para lo peor, que no estar preparado para nada. Al mismo tiempo, déjate llevar. Cabe la posibilidad de perder un avión, el equipaje se pierde y pueden surgir situaciones molestas en cualquier momento. La mejor forma de afrontarlas es con una mente abierta. Desde el punto de vista de un fotógrafo, intenta encontrar las joyas ocultas de un lugar. Como ya dije antes, cualquiera puede visitar París y sacar una fotografía de la Torre Eiffel. Por supuesto, haz la fotografía típica, pero al mismo tiempo tratar de encontrar una forma única de hacer que el lugar sea especial para ti capturando un momento que hayas disfrutado, como el viaje hasta llegar allí o la comida de un restaurante increíble al que fuiste.

Muchas de las fotografías que ves son resultado de una gran paciencia. Espera la oportunidad de poder capturar a esa persona que atraviesa tu paisaje para darle dimensión. Puede que tu horario solo te permita pequeñas oportunidades para sacar fotografías, dado que tienes muchos lugares que visitar, pero la luz de las primeras horas de la mañana y de la tarde ofrece la mejor atmósfera para las fotografías. La potente luz del mediodía elimina los pequeños detalles en el tema de tu fotografía, mientras que la luz tenue los acentúa como es debido.

Qué ironía, ¿no? Es uno de los valores más importantes para la fotografía de viajes. Sí, lo que quieres es documentar tu viaje de una forma única, pero veo demasiado a menudo a gente que saca una fotografía realmente impresionante, simplemente para ver el resultado en la pantalla de la cámara y marcharse rápidamente. Piensa en el lugar en el que te encuentras. Tómate tu tiempo para comprender la profundidad de su importancia para la cultura que te rodea. Por desgracia, uno no ve el David de Miguel Ángel en persona todos los días ni disfruta de una auténtica comida italiana en las colinas de la Toscana muy a menudo. Asegúrate de dedicar algo de tiempo a valorar lo afortunado que eres por poder experimentar lo que te ofrece ese lugar.

Nuestras experiencias están formadas por los lugares a los que vamos, la gente a la que conocemos y todo lo que vamos encontrando por el camino. Para mí, la fotografía de viajes es la consumación de todo eso en un solo instante. Documentar mis viajes me proporciona una sensación de felicidad, así como buenos momentos para recordar. Sea cual sea tu objetivo cuando viajas, disfrútalo. Y, más importante aún, nunca dejes de explorar.