10 datos que revelan lo absurdo de la riqueza del «Zar de la cocaína».
El «Zar de la cocaína» era hijo de un granjero colombiano y cuando cumplió los 35 se convirtió en uno de los hombres más ricos del mundo. A pesar de sus humildes orígenes, Pablo Escobar se convirtió en el líder del Cartel de Medellín, siendo responsable del 80% del mercado mundial de la cocaína. Se ha calculado que «el patrón» ingresaba 420 millones de dólares semanales, lo que le hizo uno de los señores de la droga más ricos de todos los tiempos.
Aunque es imposible verificar la fortuna de Escobar debido a la naturaleza del dinero procedente de la droga, se estima que asciende a 30.000 millones de dólares.
1. A mediados de los 80, se estimaba que el cartel de Escobar producía unos 420 millones de dólares semanales, que ascendían a casi 22.000 millones de dólares anuales.
2. Escobar formó parte de la lista Forbes de los multimillonarios de todo el mundo durante siete años consecutivos, de 1987 a 1993. En 1989 fue nombrado el séptimo hombre más rico del mundo.
3. A finales de los 80, suministraba el 80% de la cocaína mundial.
4. Traficaba con cerca de 15 toneladas de cocaína en EE. UU. cada día.
Escobar con su hijo, Juan Pablo, frente a la Casa Blanca en 1981
Según el periodista Ioan Grillo, el Cartel de Medellín traficaba con la mayor parte de su cocaína directamente en la costa de Florida.
«Lo hacía a unos mil cuatrocientos Km de la costa norte de Colombia y estaba realmente muy expuesto. Los colombianos y sus colegas americanos lanzaban desde el aire cargamentos al mar, desde donde se llevaban apresuradamente a la orilla en lanchas motoras, o incluso eran llevados en avión directamente a Florida para tirarlo en el campo», describió Grillo.
5. Es decir, de los americanos productores de cocaína, cuatro de cada cinco esnifaban las rayas que les proporcionaba «el patrón».
6. El «Zar de la cocaína» registraba pérdidas de 2.100 millones de dólares todos los meses, pero eso en realidad no importaba.
La inmensa riqueza de Escobar se convirtió en un verdadero problema cuando no pudo blanquear el dinero con la suficiente rapidez. Recurría al dinero que guardaba apilado en las granjas colombianas, en almacenes en ruinas y en las paredes de las casas de los miembros del cartel, según describía Roberto Escobar, contable jefe del cartel y hermano del cerebro, en su libro «The Accountant's Story: Inside the Violent Wold of the Medelling Cartel» (Historia del contador: en el mundo violento del Cartel de Medellín).
«Pablo ganaba tanto que todos los años daba por perdido el 10% del dinero porque las ratas se lo comían donde lo guardaba o se estropeaba por el agua, o se perdía», describe Escobar.
Lo cual ascendía a cerca de 2.100 millones de dólares, dada la cantidad de dinero que se publica que reunió. Escobar sencillamente tenía más dinero del que necesitaba, de manera que la pérdida de dinero repentina por los roedores y el moho, no era un problema.
7. Gastaba todos los meses 2.500 dólares en gomas.
Una de las fotos policiales de Pablo Escobar
Esconder y destruir la exorbitante cantidad de dinero era una cuestión, pero los hermanos tenían que enfrentarse a otro problema primordial: organizar de manera meticulosa los billetes. Según Roberto Escobar, el Cartel de Medellín empleaba una cifra estimada de 2.500 dólares mensuales en gomas para sujetar los fajos de billetes.
8. Una vez encendió un fuego con 2 millones de dólares porque su hija tenía frío.
Pablo Escobar con su mujer, María Victoria, su hijo Juan Pablo y su hija Manuela
En una entrevista en el año 2009 para la revista Don Juan, el hijo de Escobar, Juan Pablo, de 38 años - que desde entonces pasó a llamarse Sebastián Marroquín - describió cómo era la vida al lado del Zar de la cocaína.
Según Sebastián Marroquín, la familia vivía escondida en la ladera de las montañas de Medellín donde la hija de Escobar, Manuela, sufrió una hipotermia. Escobar decidió quemar 2 millones de dólares en billetes para que se calentara.
9. Le apodaron «Robin Hood» por dar dinero a los pobres, hacer casas para los sintecho, construir 70 campos de fútbol comunitarios y un zoo.
10. Cerró un acuerdo con Colombia para entrar en prisión, pero en una cárcel de lujo que él mismo creó y denominó «La Catedral».
Pablo Escobar con su principal sicario «Popeye» en «La Catedral»
En 1991, Escobar fue encarcelado en la prisión que él mismo diseñó y que denominó «La Catedral». Según el acuerdo pactado con el gobierno colombiano, Escobar pudo elegir con quién quería compartir la cárcel y quién trabajaría en ella. Podía continuar también dirigiendo su cartel y recibir visitas.
La Catedral contaba con campo de fútbol, barbacoa y patios, y estaba situada cerca de otro complejo que construyó para su familia. Por otro lado, las autoridades colombianas no podían acercarse en un radio de casi 5 km de distancia de la prisión.