El arte del autoengaño
Página principal Estilo de vida, Crecimiento personal

Siete cosas en las que te estás mintiendo a ti mismo y te impiden alcanzar el éxito.

Seamos sinceros, todos nos mentimos un poco a nosotros mismos

Algunas de las mentiras son inofensivas, pero otras nos impiden avanzar. Esas mentiras se manifiestan en pequeños hábitos y patrones para la resolución de problemas.

Date la oportunidad de pensar de nuevo las cosas que «sabes que realmente» te ayudan a avanzar de una manera más productiva.

1. Siempre estoy muy ocupado

Verdad: Si estás posponiendo proyectos y objetivos necesarios porque estás ahogando en trabajo que no es necesario, necesitas «reiniciarte».

Es posible que no estés gestionando tu tiempo con eficacia. Pregúntate a ti mismo lo que puedes hacer para reducir las tareas no esenciales, las notas marginales y el desorden que ocupan espacio en tu cabeza y tu horario y te impiden hacer progresos más grandes. Ya sea delegar, contratar o cambiar tu sistema, siempre hay una manera de resolver el problema de siempre estoy «ocupado».

2. Yo soy el único que se preocupa por este proyecto

Verdad: ¿Eres tú? Es probable que haya otras personas que quieran trabajar para encontrar una solución, pero aún no los has encontrado. O no los has involucrado de manera efectiva. No te quedes en el pasado y céntrate solo en el trabajo.

Piensa en quién más podría estar motivado para trabajar contigo y encuentra a esas personas. Y escucha: a través de la co-creación tus ideas encontrarán el mejor camino hacia el éxito.

3. Nadie va a escuchar de todos modos

Verdad: Tal vez no seas el único que no está escuchando. La neurociencia nos muestra que encabezonarnos en un punto de vista puede llevar a una adicción de clases - una adicción a tener la razón. Ves que cada vez que tienes razón se libera dopamina, dejándote con ganas de más. Al igual que un adicto, cada vez tienes menos cuidado del impacto que tienes sobre otras personas.

4. Lo intentamos y no funcionó

Verdad: Si no intentáramos poner en práctica nuestras ideas varias veces, nunca hubiéramos conseguido tener coches, aviones o cualquiera de las innovaciones que se quedaron estancadas en el tiempo durante décadas hasta que la combinación adecuada de personas y tecnología llegó para transformar nuestras vidas. Como persona con experiencia, tu trabajo no es solo hablar, sino también comprender que las situaciones son fluidas y que un nuevo intento podría crear progresos reales.

5. Yo estoy a cargo. Siempre debo tener una solución

Verdad: Tus empleados se dirigirán a ti en busca de una visión más amplia, pero no eres la mejor fuente para saber cómo funciona todo en tu empresa. No tienes visibilidad sobre los problemas a los que determinados departamentos hacen frente y cómo tu enfoque podría complicar las cosas. Contrataste a tu personal por una razón, así que confía en su experiencia. Crea diálogo y pide opinión. Esto te asegurará que dispones de lo necesario para que las soluciones tengan éxito.

6. Puedo aprender por mí mismo todo lo que necesito saber

Verdad: Resulta imposible hacerlo todo por ti mismo o saber cómo poner en práctica lo que has aprendido si nunca lo has hecho antes. Ya estés buscando aprender más sobre codificación o averiguar el sistema de nómina adecuado para tu negocio, podrías olvidar algo si tratas de hacerlo solo.

7. Si me encanta, entonces existe un mercado

Verdad: Tu pasión puede motivar a las nuevas contrataciones, llevarte a través de tiempos difíciles y ayudarte a ver lo que nadie más ve. Pero no puedes inventarte un mercado que no existe. Pregúntate si un cambio ayudaría y cómo podría cambiar tu empresa. Es probable que un pequeño cambio pueda hacer mucho bien.

Lea también:
Por favor, describa el error
Cerrar