¿Qué hace la gente de éxito antes de acostarse?

Lo último que hace antes de acostarse normalmente tiene un impacto significativo en su estado de ánimo y en su nivel de energía al día siguiente, ya que suele determinar la calidad y cantidad de sueño. Las personas exitosas entienden que su éxito comienza y termina con su salud mental y física, lo que depende casi en su totalidad de dormir lo suficiente. Estos son los hábitos de muchas personas exitosas antes de acostarse.

Los expertos coinciden en que leer es un hábito que suelen tener las personas de más éxito antes de irse a dormir. El presidente de EE. UU. Barack Obama y Bill Gates leen durante al menos media hora antes de acostarse.

Michael Kerr, conferenciante internacional de asuntos empresariales y autor de You Can't Be Serious! Putting Humor to Work, dice que conoce a numerosos líderes empresariales que siempre guardan tiempo para la lectura antes de irse a la cama e incluso a veces lo incluyen como «elemento inamovible» de su agenda. El autor dice:

«El tipo de lectura de estas personas no tiene por qué ser solo sobre asuntos empresariales o libros de inspiración. A muchas personas de éxito les gusta buscar información en distintas fuentes, ya que consideran que es una forma de aumentar la creatividad y pasión de la vida».

Las personas que realmente tienen éxito no hacen nada relacionado con el trabajo justo antes de acostarse, dice Kerr. No revisan su correo electrónico de manera obsesiva y tratan de no pensar en cuestiones relacionadas con el trabajo.

Diferentes estudios han revelado que si asocia su cama con el trabajo, le será más difícil relajarse, por lo que es esencial que reserve su cama solo para dormir y mantener relaciones sexuales.

Michael Woodward psicólogo organizacional y autor del libro The YOU Plan coincide con esta afirmación, a lo que añade lo siguiente:

«Lo último que necesita es estar acostado en la cama pensando en un correo electrónico que acaba de leer de un jefe que no hace más que escribirle con preguntas aleatorias sin importancia. Es recomendable disfrutar de al menos un periodo de media hora entre el momento de leer el último correo electrónico y la hora de irse a la cama».

Desconectar del trabajo significa no comprobar el correo electrónico antes de acostarse, y también incluye la consulta de redes sociales o juegos en el móvil. Los investigadores coinciden en que cualquier tipo de exposición a una pantalla antes de acostarse le hace más mal que bien.

La luz azul del teléfono imita al brillo del sol, y esto le indica al cerebro que puede dejar de producir melatonina, una hormona esencial que regula el ritmo circadiano y le informa a su cuerpo de la hora de despertarse y la de dormir. Esto podría provocar no solo falta de sueño, sino también problemas de visión, cáncer y depresión.

Si no cree en lo que dicen los estudios de investigación, puede tomar como referencia el caso de Arianna Huffington, cofundadora de The Huffington Post, presidenta y editora-jefe. Tras sufrir una crisis por agotamiento, Huffington ha cambiado por completo sus hábitos a la hora de dormir. Como se detalla en su libro, Thrive, ha eliminado por completo la presencia de iPads, Kindles, portátiles y otros aparatos electrónicos de su dormitorio.

«Tener la mente despejada es esencial para dormir bien y es algo que tienen en cuenta las personas de éxito», dice Kerr. «Suelen dedicar un tiempo a escribir una lista de tareas pendientes que tienen que hacer al día siguiente, para que así estos pensamientos no terminen invadiendo su espacio mental por la noche».

Por ejemplo, Kenneth Chenault, director ejecutivo de American Express, suele anotar tres cosas que quiere lograr al día siguiente.

Woodward dice que es importante dedicar tiempo a charlar con la pareja, con los hijos, o a jugar con el perro. Laura Vanderkam, autora de I Know How She Does It y What the Most Successful People Do Before Breakfast, dice que esto es una práctica común entre la gente muy exitosa. Añade:

«No todo el mundo puede acostarse a la misma hora que su pareja, pero si puede, es una forma de conectar y hablar de cómo ha ido el día».

Joel Gascoigne, cofundador y director ejecutivo de Buffer, se da un paseo de 20 minutos todas las noches antes de acostarse. Escribe en su blog:

«Me sirve para desconectar y evaluar el trabajo del día, pensar en retos mayores, dejar poco a poco de pensar en el trabajo y sentirme cansado».

Kerr dice que muchas personas de éxito dedican cierto tiempo justo antes de acostarse a reflexionar o escribir tres cosas que sucedieron durante el día y por las que están agradecidos. Benjamin Franklin se hacía a sí mismo hizo la misma pregunta cada noche: «¿Qué cosas buenas he hecho hoy?». Woodward dice:

«Es importante dedicar cierto tiempo a reflexionar sobre los momentos positivos del día y celebrar los éxitos, aunque fueran pocos y no ocurrieran a la vez».

Según Lynn Taylor, experto en relaciones laborales y autor de Tame Your Terrible Office Tyrant: How to Manage Childish Boss Behavior and Thrive in Your Job, muchas personas de éxito dedican unos minutos antes de acostarse a imaginar los resultados positivos que obtendrán de los proyectos en los que trabajan.

«Para la mayoría, esto no es una tarea o ejercicio, sino que cuentan de forma natural con habilidades resolutivas», añade.

Muchas personas de éxito dedican los 10 minutos antes de acostarse a meditar. Dale Kurow, coach empresarial con sede en Nueva York, dice que es una gran manera de relajar el cuerpo y la mente.

Una forma de lograrlo es irse a la cama a la misma hora todas las noches, lo que los expertos consideran clave para conciliar una noche de sueño de calidad. Vanderkam dice:

«Lo peor que puede hacer es quedarse despierto hasta tarde y luego apagar el despertador por la mañana», dice. «Los seres humanos tenemos una cantidad limitada de fuerza de voluntad. ¿Para qué entonces desperdiciarla pensando en cuándo levantarse, y en dormir unos minutos más cuando ya ha sonado la alarma?».

La Fundación Nacional del Sueño recomienda crear un ritual de higiene que envíe una señal psicológica de que se está preparando para irse la cama. Esto puede incluir cepillarse los dientes, lavarse la cara, usar hilo dental o peinarse. La rutina nocturna de Stephen King incluye lavarse las manos y asegurarse de que todas las almohadas están colocadas de una manera determinada.

Cuando realizaba la investigación para elaborar su manifiesto del sueño Thrive, Huffington consultó a una serie de especialistas del sueño para que le dieran consejos. Uno de sus favoritos es evitar el alcohol justo antes de dormir. Aunque el alcohol sin duda puede ayudar a conciliar el sueño, priva de sueño de calidad. Además, el alcohol mantiene a la gente en las etapas de sueño más ligero, etapas de las pueden ser despertados fácilmente e impide conciliar un sueño más profundo y reparador.