Cinco consejos para que nadie malinterprete su lenguaje corporal.
Es por la mañana y está sentado en una esquina durante la reunión del equipo. Puede pensar que su aturdimiento en realidad no importa, y que sus contribuciones hablan por sí mismas. Sin embargo, la forma en la que se presenta es a menudo tan importante como lo que dice y hace. Cosas como la postura y el contacto visual pueden tener consecuencias no deseadas en un ambiente de reunión.
Todo está en el ojo del espectador, así que no es lo que quiere decir cuando hace algo, sino la forma en la que otros lo perciben.
El lenguaje corporal influye tanto en la simpatía como en el éxito, por lo que estos son cinco errores comunes que sería prudente evitar:
1. Cruzar los brazos
En muchos lugares, no hay nada de malo en cruzar los brazos, ya que puede ser por tener frío, o simplemente puede ser una posición de descanso cómoda.
En una reunión, sin embargo, debe siempre evitar sentarse con los brazos cruzados. La mayoría de la gente va a interpretar ese gesto como que muestra resistencia o hermetismo.
2. Una postura decaída en el asiento
Una buena postura es importante donde quiera que esté, pero especialmente en las reuniones donde está sentado durante un período prolongado de tiempo. Encorvarse puede traducirse en una falta de respeto para el orador y transmite una actitud apática.
Sentarse encorvado es un gran error. Le hace parecer sumiso y como que no tiene mucho que ofrecer, y eso no es bueno para nadie, especialmente si está tratando de tener presencia de liderazgo en su organización.
3. Enviar mensajes de texto o correos electrónicos desde su teléfono
Debe evitar cualquier cosa que le distraiga en una reunión. Una de las cosas que más distrae es enviar mensajes de texto o consultar el correo electrónico en el teléfono.
Es una gran falta de respeto. La gente lo justifica diciendo que están pendientes de lo que se dice, pero está distrayendo al orador.
4. Perder el contacto visual con el orador
El no poder mantener la mirada con el orador durante una reunión es tan malo como estar pendiente del teléfono, ya que envía un mensaje a la persona que habla: No estoy interesado en lo que tiene que decir.
5. No hablar a tiempo
En cualquier reunión, quedarse sentado en silencio durante demasiado tiempo puede percibirse como falta de interés. Hablar en una habitación llena de gente puede ser difícil si es tímido, pero es importante contribuir desde el principio.
Decir algo a tiempo le hace ver a la gente que está ahí, aunque lo que diga no sea crucial para la conversación. Necesita hablar cuando lo considere necesario, ya que le será más difícil conforme la reunión avance.