Ignorar los pensamientos negativos habituales puede ser algo difícil. Estas 13 nociones suelen hacernos sentir miserables, y nos impiden seguir avanzando.
Deja de sabotear tus mejores esfuerzos con tu diálogo interno negativo.
Se necesita muy poco tiempo para encontrar artículos e historias en la web que te informarán sobre los buenos hábitos o mantras motivacionales de las personas que han logrado el éxito en su campo elegido.
Sin embargo, por muy interesantes e inspiradores que puedan ser dichos artículos, solo cuentan la mitad de la historia.
Mucha gente los leerá y en lugar de inspirarse, terminarán con una sensación de abatimiento y derrota. "Nunca seré como esas personas de éxito", se dicen a sí mismos. "Son mucho más dedicadas de lo que soy yo".
Ese es el diálogo interno negativo. Todos somos culpables de ello de vez en cuando.
Existen al menos cuatro tipos diferentes de diálogo interno negativo: la filtración, la personalización, el catastrofismo y la polarización.
Aquí tienes una muestra de algunas de las cosas que posiblemente nos digamos a nosotros mismos – cosas que solo sirven para desviarnos del camino hacia el éxito.
1. "Esta persona siempre me está haciendo eso..."
Estas son dos formas de diálogo interno negativo en una sola frase. Actúa como filtro porque el hablante ha ignorado cualquier cosa positiva sobre su situación y ha aumentado solo lo negativo. También se trata de un caso de polarización, en cuanto a que esa persona solo ve lo malo o lo bueno (malo, en este caso). No hay término medio en esta frase.
2. "Genial, ahora mi día entero se ha echado a perder..."
Catastrofismo significa coger una situación negativa y exagerar sus efectos en el panorama general. Podría ser algo tan insignificante como que no te traigan el café que habías pedido, y sin embargo dejarás que eso te decepcione hasta el punto en que la expresión se convierte en una profecía que se cumple a sí misma.
3. "Él/ella solo lo hace solo para molestarme..."
Esto es personalizar, y significa pensar que todo gira en torno a ti (u otra persona en concreto), incluso cuando en realidad no es el caso. Recuerda, la mayoría de las personas que te encuentras no tienen tiempo ni deseos de dejar lo que estén haciendo para tomarla contigo y fastidiarte el día.
4. "Se me da fatal esto..."
Por supuesto, es posible que encuentres dificultades con algo, pero no te haces ningún favor al definir tu situación como algo que "se te da fatal", sin pensar en la posibilidad de que realmente no eres tan inútil como te ves a ti mismo.
5. "Siempre estoy en problemas..."
Nadie está "siempre" en problemas, pero pensar eso significa que vas a actuar de tal manera, y eso puede que te marque como el tipo de personas de las que nadie quiere estar cerca. ¡Puedes cambiar eso!
6. "No hay forma de que esto funcione..."
Una vez más, un comentario como este solo deja espacio para la negatividad. Y, ¿por qué molestarse en hacer algo si ya estás convencido de que está condenado al fracaso? No caigas en esa trampa de la mente. Sea lo que sea, dale una oportunidad. El resultado podría ser una agradable sorpresa.
7. "Nadie se molesta en decirme nada..."
Cuando te pones a ti mismo en medio de cualquier cosa que piensas que está mal, es fácil identificarse solo con las situaciones negativas. Lo que es peor, también estás reduciendo al mínimo tu propia importancia en cuanto a lo que está sucediendo a tu alrededor. En lugar de ello, busca maneras de formar parte de la solución.
8. "Es imposible..."
Todos hemos dicho esto alguna vez, ¿verdad? Sin embargo, pocas cosas son realmente imposibles, a menos que te convenzas de lo contrario, que es exactamente para lo que está diseñada esta observación. En su lugar, piensa en por qué algo es o debería ser no solo posible, sino probable.
9. "Nunca voy a ser bueno en nada..."
Es probable que la mayoría de nosotros hayamos estado ahí en un momento u otro. No hay margen para el buen potencial que puede ocurrir. La verdad es que todos somos buenos en algo, y muchas cosas. El diálogo interno negativo nos impide centrarnos en esas cosas. No se lo permitas.
10. "No aprecian nada de lo que hago..."
Posiblemente, aquello que haces lo aprecian más de lo que crees, pero por alguna razón, no lo estás viendo u oyendo. En lugar de convencerte a ti mismo de que tus esfuerzos son en vano, podrías pedirle a alguien que te dé su opinión. Se darán cuenta y, con suerte, apreciarán tu iniciativa.
11. "Otras personas pueden hacer esto... soy un perdedor..."
Si estás teniendo problemas con una tarea en particular, es probable que tengas puntos fuertes diferentes en los que podrías concentrarte en su lugar. Y deberías tener en cuenta que otras personas puede que no encuentren las cosas tan fáciles como piensas. Si te encuentras en el mismo barco con otra persona, podríais trabajar juntos para encontrar la manera de ayudaros el uno al otro a tener éxito.
12. "Nadie me va a querer contratar nunca más..."
Puede que una tarea o un trabajo no hayan funcionado de la manera que querías, pero eso no tiene que significar el fin del mundo. Puedes dar un paso atrás, concentrarte en las cosas que haces bien, y empezar de nuevo. Nadie dijo que el camino hacia el éxito era un paseo agradable.
13. "Estoy completamente solo y nadie está nunca ahí para mí..."
Puede parecer que esto ocurra a veces, pero no quieres que esto se convierta en otra profecía que se cumple a sí misma. Una mala actitud parece que realmente funciona para mantenernos aislados de otras personas, especialmente aquellas que podrían ayudarnos a encontrar una salida. Si quieres un amigo, tienes que ser un amigo. Tiende la mano. Pide ayuda cuando la necesites.
El diálogo interno negativo se interpone en nuestro camino, se mete en nuestra cabeza, y nos distrae de nuestras metas. Nos convence de que no sirve de nada intentarlo, porque probablemente fracasaremos de todas maneras. Todos hemos experimentado esos sentimientos.
Pero a menudo olvidamos que el fracaso es un elemento importante del éxito.
Nos enseña lo que funciona e, igualmente importante, lo que no funciona. Nos enseña que nada que valga la pena tener, llegará fácilmente en la vida.
Tienes el poder de cambiar la forma en que hablas contigo mismo, y lo que dices. Haz un esfuerzo para evitar estas cosas y otros patrones destructivos. Sé positivo, y te ocurrirán cosas positivas.