Sencillos hábitos de las personas de éxito que cualquiera puede poner en práctica.
Los fenomenales logros con los que las personas con mucho éxito suelen sorprendernos no son cuestión de coincidencia o suerte. Sin embargo, aunque las razones de esas victorias son bien conocidas y se han discutido multitud de veces, hay unas cuantas más explicaciones para esos resultados sobresalientes.
Además de ser el resultado de un fuerte compromiso, dedicación, así como un trabajo duro y persistente, los grandes logros se alcanzaron gracias a inusuales hábitos diarios y formas de enfocar las cosas cotidianas.
Los logros de las personas de éxito son cualitativamente diferentes debido a que sus autores hacen las cosas normales de manera diferente. Han adoptado un modo de pensar que les permite ejecutar tareas de forma más eficiente y alcanzar sus objetivos con mayor rapidez.
1. No son demasiado realistas
Mientras que las masas demuestran ser demasiado aburridas y serias, personas afortunadas todavía observan el mundo a través de la lente de la infancia. No dudan de cada idea con el argumento de que parece poco realista o demasiado fantástica. Por el contrario, la perciben como algo atractivo y no encuentran nada malo en su rareza. Las personas sobresalientes creen en lo imposible y parecen ser grandes fans de las innovaciones. Prefieren darle una oportunidad a una idea extraña y ver si funciona, antes que rechazarla.
2. Pasan más tiempo a solas
Los lugares y multitudes ruidosos no son un buen ambiente para la productividad. Para escapar de ellos, las personas de éxito entran en su zona de soledad – tiempo y lugar, donde nadie pueda interrumpirlos de las cosas que están haciendo. Aquí es donde realmente se hace el trabajo. Aquellos que han dominado esta habilidad pueden permanecer en la zona de soledad durante horas, produciendo resultados de la más alta calidad. Esta práctica es crucial, ya que ofrece una posibilidad para considerar nuevas ideas, analizar experiencias del pasado, dar prioridad a las tareas y planificar nuevas medidas de manera más eficiente.
3. Empiezan teniendo el final en mente
La claridad es importante. Antes de comprometerse con ciertas cosas, es muy importante tener en cuenta el destino al que quieres llegar. Después de haber visualizado qué resultados quieren lograr, las personas de éxito saben exactamente lo que tienen que hacer para alcanzar sus objetivos. Les permite concentrarse y no distraerse con asuntos triviales. Siguen adelante a toda velocidad, centrados en el destino deseado, y saltándose los puntos en los que no están interesados.
4. No se quejan
En un momento u otro, todo el mundo se ha sentido abatido y frustrado por las demandas, cambios de dirección, o las injusticias de este mundo. Esto es natural, no es raro en absoluto, y simplemente parte de la vida. Sin embargo, los individuos destacados no se permiten quejarse de lo mal que va las cosas, por qué algo es tan injusto, lo terrible que es todo, o como de mejor son las cosas en otro lugar. No son esclavos del placer. Nunca evitan la incomodidad o el dolor. Aprenden a convertirlos en una base aún más sólida para nuevos logros.
5. Hacen cosas que importan
La capacidad de moverse hacia las aspiraciones deseadas a un ritmo rápido radica en la capacidad de elegir en qué concentrarse. En vez de hacer bien cosas al azar, toda la energía que tienen se canaliza directamente en la dirección correcta. El tiempo es un activo demasiado valioso como para desperdiciarlo en actividades que no proporcionan ningún progreso. La atención es crucial. La atención hacia las cosas que importan es la clave del éxito.
6. Ven oportunidades, no riesgos
Mientras que la mayoría de la gente siempre dirige su atención hacia las dificultades que probablemente se produzcan a lo largo del camino, las personas con éxito consideran las oportunidades en primer lugar. Se centran principalmente en lo que puede lograrse a través de ciertas acciones. Y sólo entonces calculan las posibles dificultades y problemas que puedan surgir. Esta sencilla técnica les permite literalmente aceptar desafíos sin preocupaciones adicionales y ansiedad sobre asuntos triviales, y ganar.
7. No posponen las cosas
Cuando ven una oportunidad, actúan. Las personas con éxito disfrutan de este, no por sus pensamientos y sueños increíbles, sino porque demostraron ser hacedores increíbles. Ellos saben que en el corazón de cada historia de éxito hay una decisión de actuar. Una merca acción mero es con lo que comienza todo. Por lo tanto, el retraso es percibido como un enemigo de cualquier progreso. Una vez que nace la idea, debe esbozarse, validarse, y llevarse a cabo.
La excelencia se logra a través de acciones repetidas y consistentes. Sin embargo, a veces no son tan triviales como parecen ser. Las personas con mucho éxito inventaron sus propias maneras de enfocar los negocios y la vida, lo que les permite que se conviertan en ganadores y celebran grandes victorias.
Lo bueno es que todo el mundo puede adoptar estos hábitos sencillos también y utilizarlos para su propio beneficio.