Uno de los coches más emblemáticos de la historia ha sido clonado y vendido por 1,5 millones de dólares.
El nuevo superdeportivo de Jaguar ha estado produciéndose desde hace 60 años. No esperes una transmisión semiautomática, ABS, o incluso el lujo de elevalunas eléctricos – el nuevo Jaguar XKSS no sólo tiene una apariencia vintage como el original, también repite todas sus funciones.
Es técnicamente un tipo especial de réplica del coche, cuya producción fue detenida, pero desde entonces se ha reiniciado con diseños y técnicas originales. El XKSS original se fabricó para el mercado de EE. UU. como la versión de calle de tipo D de 1954, que fue tres veces ganador en las carreras de Le Mans, hasta que en 1957, un incendio arrasó la fábrica de Jaguar en Browns Lane. Como resultado, sólo entraron en el mercado 16 coches de la producción total de 25.
No es de sorprender que los coches que sobrevivieron cuesten tanto hoy en día. Steve McQueen posee uno que se estima que vale hasta 30 millones de dólares.
El nuevo modelo XKSS se presentó el miércoles en el Salón del Automóvil de Los Ángeles. El diseño y montaje del primer coche requirió 18 meses de investigación y fabricación. Ahora se utilizará como modelo para las nueve unidades de colección que Jaguar comenzará a fabricar en 2017.
Según Kev Riches, gerente de ingeniería de Jaguar Classic, una sucursal de la empresa dedicada principalmente a la renovación y mantenimiento de Jaguars clásicos, el proyecto XKSS intenta reemplazar esos nueve vehículos que se perdieron en el incendio.
“Para mí es casi como volver a crear una obra de arte”, dice. “Estamos tratando de construir un auténtico coche – e intentar hacer los coches lo más parecidos posibles a los coches que se construyeron en ese período”.
El equipo de Jaguar Classic utilizó dibujos originales de los archivos de la compañía y los complementó con tecnología moderna, como escanear el coche para construir modelos 3D para utilizar los métodos de producción auténticos. Los paneles de acero y aluminio se fabrican a mano en equipos ingleses como se hacía en los años cincuenta. Incluso se han reproducido algunas tuercas, puesto que ya no se pueden comprar. Riches comenta:
“La idea era crear un coche perfecto utilizando las técnicas y materiales lo más parecidos posibles a los de esa época”.
Bajo el capó, el XKSS tiene un motor de seis cilindros de 3,4 litros y seis cilindros con 262 CV. La empresa dice que todo el interior del coche, desde la madera del volante hasta el cuero de los asientos y el latón del tablero, son exactamente como lo habrían sido en 1957, con sólo pequeños cambios para los requisitos de seguridad del siglo XXI.
Los nueve coches que se planean fabricar fueron vendidos casi inmediatamente a una selección de compradores internacionales. Riches calcula que cada modelo se vendió por alrededor de 1,5 millones de dólares.
