Mientras Snapchat se prepara para una OPV de 25.000 millones de dólares, recordamos cómo la aplicación ha alcanzado el éxito del que goza actualmente.
En el caso de Snapchat, la historia repite casi literalmente el principio de la película "La red social", dedicada a Facebook (NASDAQ: Facebook [FB]).
Pero aún así, la historia se desarrolla en una universidad de élite - Stanford contra Harvard - y ha acabado en los tribunales, con los cofundadores de Snapchat Evan Spiegel y Bobby Murphy contra Reggie Brown.
Snapchat ha conseguido sobrevivir a unos comienzos un tanto difíciles para ahora estar a punto de salir a Bolsa por un valor de 25.000 millones de dólares. Así es como Snapchat ha pasado de una idea de un millón de dólares sobre fotos que desaparecen hasta convertirse en la gigante compañía de medios sociales llamada Snap.
Al igual que con otras muchas startups, el punto de partida de la historia de Snapchat es la Universidad de Stanford, donde un joven de Los Ángeles llamado Evan Spiegel trabó amistad con Reginald (Reggie) Brown. Ambos decidieron unirse a la fraternidad Kappa Sigma - donde conocieron al cofundador de Snapchat, Bobby Murphy - aunque pasarían un par de años hasta que surgiera la idea de la red social que hace desaparecer las fotos.
Snapchat no era la primera startup de Spiegel. Murphy había reclutado a Spiegel, miembro de la fraternidad Kappa Sigma un año más joven que él, para que le ayudara con una idea que tenía sobre una red social. En 2010, lanzaron FutureFreshman, una página web para facilitar el proceso de solicitud de acceso a la universidad. La idea no acabó despegando, pero despertó la pasión de Spiegel por el mundo empresarial.
No fue hasta el penúltimo año Spiegel en la universidad cuando surgió la idea de Snapchat. "Me gustaría que las fotos que le estoy enviando a esta chica desaparecieran", dijo Brown a Spiegel en abril de 2011. Su amigo inmediatamente se entusiasmó con el concepto de hacer desaparecer las fotos y le dijo a Brown que era una idea de un millón de dólares. Cinco años más tarde, esa idea cuesta ahora miles de millones.
En el verano de 2011, nació Snapchat – con la excepción de que ese no era su primer nombre. Cuando la aplicación fue lanzada en la App Store, su nombre original era Picaboo. Brown, Spiegel y Murphy pasaron el verano trabajando en ella. Spiegel incluso dibujó el ahora famoso icono del fantasma Ghostface Chillah.
Sin embargo, Picaboo no fue un gran éxito. A finales del verano, tan solo contaba con 127 usuarios. Entonces Brown, Spiegel y Murphy comenzaron una lucha por la propiedad de la empresa. La cosa acabó con Spiegel colgando el teléfono y bloqueando a Brown de todas las cuentas de la startup. Esto acabó costándole millones más adelante.
Spiegel y Murphy le cambiaron el nombre a la aplicación por Snapchat en septiembre de 2011, su aniversario oficial. El éxito seguía sin llegar, pero poco a poco fue ganando usuarios cuando el primo de Spiegel la empezó a utilizar en un instituto de Los Ángeles. Los adolescentes acababan de encontrar una forma de enviar fotos y mensajes que desaparecerían segundos después de abrirse.
Para la primavera de 2012, la aplicación contaba con poco más de 100 usuarios, cifra que en la actualidad ha aumentado hasta los 100.000 usuarios activos diarios. Eso también dio lugar a un problema: los costes del servidor también aumentaron. Spiegel y Murphy estaban pagando casi 5.000 $ al mes para mantener la aplicación, y justo cuando estaban a punto de quedarse sin dinero, Jeremy Liew de Lightspeed Venture Partners hizo acto de presencia y le entregó a Spiegel su primer cheque.
Spiegel abandonó sus estudios cuando recibió el dinero aunque tan solo le faltaban tres créditos para graduarse en Stanford. Él y su equipo (que ahora contaba con dos desarrolladores) se mudaron a la casa de Spiegel en Los Ángeles. A finales de 2012, Snapchat alcanzó un millón de usuarios activos diarios.
Fue justo en ese momento cuando Facebook le hizo a Snapchat un gran regalo. En diciembre de 2012, lanzó su propio competidor de Snapchat, Poke. Al principio, Spiegel se preocupó bastante ya que pensaba que sería el final de su aplicación, pero Snapchat no tardó en superar a Poke. Spiegel cree que esto fue "el mejor regalo de Navidad" de Snapchat.
La aplicación siguió creciendo y atrajo más atención de los capitalistas de riesgo. Pero fue en ese momento cuando la historia de Snapchat se convierte en un drama parecido al de "La red social". En febrero de 2013, Reggie Brown - el tipo al que se le ocurrió la idea de hacer desaparecer fotos - demandó a Murphy, Spiegel y Snapchat por echarlo de la empresa.
Sin embargo, el juicio no ralentizó el crecimiento de Snapchat. En otoño de 2013, la compañía dio a conocer Snapchat Stories - su primer paso para que su contenido fuera cada vez menos efímero. Los usuarios de Snapchat podrían subir sus instantáneas a una historia que duraría 24 horas. Se trata del intento más cercano de Snapchat por lanzar algo parecido a la línea de tiempo de Facebook.
El rápido ascenso de Snapchat - y la aparente derrota de Facebook Poke - pronto llamó la atención de Mark Zuckerberg. El director ejecutivo de Facebook le hizo una oferta a Evan Spiegel: 3.000 millones de dólares. Spiegel negoció duro con Facebook para luego acabar rechazando la oferta.
Hubo rumores de que Google intentó superar la oferta de Facebook y llegó a ofrecer 4.000 millones por la empresa. De cualquier manera, Spiegel no accedió a su venta.
Un mes más tarde, Snapchat fue hackeado. El nombre de usuario y los números de teléfono de más de 4 millones de cuentas fueron expuestos, lo que enfureció a sus usuarios. Después de todo, la aplicación todavía se consideraba como una app de sexting (para compartir fotos subidas de tono) - y la gente tenía miedo de lo que podrían perder. Al principio, el joven director ejecutivo no vio la necesidad de disculparse, pero la reacción fue rápida. Unos meses más tarde, la compañía abrió una disputa con la Comisión Federal de Comercio, que argumentó que Snapchat había engañado a sus usuarios - la empresa tuvo que efectuar cambios en el acuerdo de usuario.
En mayo de 2014, Valleywag, una página web de noticias de Silicon Valley, publicó mensajes de correo electrónico de cuando Spiegel estudiaba en Stanford. Con asuntos como "Que te….", los correos electrónicos proyectaron una luz negativa sobre el director ejecutivo, a quien ya estaban comparando incluso con Steve Jobs.
Pero eso no frenó el éxito de Snapchat. Integró una función de chat, y lanzó Live Stories. En julio de 2014, los inversores valoraban a la empresa en 10.000 millones de dólares. En tan solo 3 años, el valor de la empresa había pasado del millón de dólares a los 10.000 millones.
Según Nick Bell, la función Live Stories de Snapchat se inspiró en una visita del ilusionista David Blaine a la oficina de Snapchat. Este observó cómo todos sus amigos grababan el video del truco de magia con el fin de unir todas las perspectivas más adelante para así intentar averiguar el truco. Fue entonces cuando se dieron cuenta de que contar una historia a partir de miles de puntos de vista era mucho mejor que hacerlo desde uno solo.